Mientras que el 75% de las mujeres padecen al menos una candidiasis a lo largo de su vida, hasta el 8% padece más de cuatro al año. Se denominan infecciones recurrentes por hongos cuando se repiten una y otra vez.
Si eres una de esas mujeres, es posible que tú y tu médico tengáis que adoptar un enfoque diferente.
Lo que podría estar ocurriendo
La mayoría de las infecciones por hongos son causadas por un tipo de hongo (cándida) llamado Candida albicans. Otros tipos de hongos también pueden causar infecciones por hongos, pero los tratamientos antifúngicos suelen dirigirse sólo al más común. Si su infección está causada por algo diferente, los antifúngicos utilizados para tratar las infecciones por hongos pueden no ser eficaces para usted.
O bien, aunque parezca que está contrayendo nuevas infecciones, es posible que no se haya librado de la primera. Asegúrate de seguir cuidadosamente las instrucciones del tratamiento y de terminar todos los medicamentos.
El uso de antibióticos con demasiada frecuencia puede reducir la cantidad de bacterias buenas en la vagina. Esto puede permitir que la cándida crezca y aumente las posibilidades de una infección por hongos. Cuanto más tiempo utilices los antibióticos, más probabilidades tendrás de contraer una.
Los niveles elevados de azúcar en la sangre, debidos a una diabetes no controlada, facilitan la alimentación y el desarrollo de los hongos.
Los anticonceptivos hormonales, incluidas las píldoras anticonceptivas orales y las cremas y jaleas espermicidas, pueden alterar el equilibrio de las bacterias en la vagina, permitiendo que crezca más cándida.
Llevar ropa húmeda o ajustada, como la ropa sudada del gimnasio que no te cambias enseguida, o un traje de baño húmedo después de nadar, crea un lugar cálido y húmedo que le gusta a la levadura.
Hábitos alimenticios
Aunque algunas personas creen que ciertos alimentos o dietas promueven el crecimiento de la levadura y conducen a infecciones recurrentes, no hay suficiente investigación para apoyar esa teoría.
Según los estudios realizados, una dieta estricta no parece ser útil para prevenirlas.
Habla con tu médico
Tu médico puede ayudarte a averiguar lo que ocurre, sobre todo si se trata de otro tipo de infección o de una afección médica que está causando tus síntomas. Un diagnóstico preciso es la mejor manera de recibir el tratamiento adecuado y encontrar alivio.
