El médico explica cómo el ejercicio puede ayudar a mejorar los síntomas del TDAH en los niños.
Para liberar esa energía inquieta, los niños con TDAH necesitan hacer mucho ejercicio. Las investigaciones están demostrando que mantenerse activo no sólo permite a los niños con TDAH desahogarse, sino que también puede ayudar a resolver problemas como:
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falta de concentración
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impulsividad
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escasas habilidades sociales
Cuando se utiliza junto con los tratamientos tradicionales del TDAH, como los medicamentos estimulantes y el asesoramiento, la práctica regular de ejercicio físico puede tener un impacto positivo en los síntomas del TDAH del niño.
Los expertos en salud recomiendan que los niños hagan al menos 60 minutos de ejercicio moderado o intenso cada día. La forma en que hagan ese ejercicio -montar en bicicleta, nadar, jugar al fútbol, bailar- no importa realmente.
Pero hay pruebas de que salir al exterior y pasar tiempo en la naturaleza puede calmar a algunos niños con TDAH. En un estudio, un simple paseo de 20 minutos por el parque ayudó a los niños con TDAH a concentrarse mejor.
El ejercicio y el cerebro
El ejercicio no sólo es bueno para tonificar los músculos. También puede ayudar a mantener el cerebro en forma.
Cuando los niños hacen ejercicio, cambian la cantidad y la mezcla de unas sustancias químicas llamadas neurotransmisores que libera su cerebro. Entre los neurotransmisores se encuentra la dopamina, que está relacionada con la atención.
Los medicamentos estimulantes utilizados para tratar el TDAH actúan aumentando la cantidad de esta misma sustancia química en el cerebro. Así que tiene sentido que un entrenamiento pueda tener muchos de los mismos efectos en los niños con TDAH que los medicamentos estimulantes.
En estudios publicados en la revista Archives of Clinical Neuropsychology y Attention Deficit Hyperactivity Disorder, los niños con TDAH que hacían ejercicio tenían mejores resultados en las pruebas de atención y menos impulsividad, incluso si no tomaban medicamentos estimulantes.
Los investigadores creen que el ejercicio actúa sobre el cerebro de los niños de varias maneras:
Flujo sanguíneo.
El ejercicio aumenta el flujo sanguíneo al cerebro. Los niños con TDAH pueden tener menos flujo sanguíneo en las partes de su cerebro responsables de:
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el pensamiento
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planificación
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emociones
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comportamiento
Los vasos sanguíneos.
El ejercicio mejora los vasos sanguíneos y la estructura del cerebro. Esto ayuda a la capacidad de pensar.
Actividad cerebral
. El ejercicio aumenta la actividad en partes del cerebro relacionadas con el comportamiento y la atención.
Cómo ayuda el ejercicio al pensamiento y al comportamiento
Una de las áreas en las que los niños con TDAH tienen especiales problemas es en la función ejecutiva. Se trata del conjunto de habilidades de resolución de problemas que utilizamos para planificar y organizar.
La falta de estas habilidades hace que a tu hijo con TDAH le resulte difícil acordarse de terminar los deberes o de llevarse la comida al salir del colegio. El ejercicio puede mejorar la función ejecutiva en los niños con TDAH.
Muchos niños con TDAH también tienen problemas sociales y de comportamiento. Practicar un deporte puede tener el beneficio añadido de mejorar estas dos áreas.
En los estudios, los niños que hacían ejercicio se metían en problemas con menos frecuencia por comportamientos disruptivos como hablar fuera de turno, insultar, pegar, moverse de forma inapropiada y negarse a participar en actividades.
Por todos estos beneficios, el ejercicio puede potenciar la eficacia de los medicamentos para el TDAH cuando se utilizan conjuntamente. También puede ayudar a los niños que no han respondido a los fármacos estimulantes u otros medicamentos para el TDAH.
Más razones para hacer ejercicio
Más allá de ayudar a los síntomas del TDAH, hay muchas otras razones para que los niños hagan ejercicio. Participar en actividades regulares de fitness puede ayudar a los niños:
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Mantener un peso saludable
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Mantener la presión arterial y los niveles de colesterol en un rango normal
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Reducir el riesgo de diabetes
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Mejorar la confianza en sí mismo y la autoestima
El ejercicio debe ser una parte de un plan de tratamiento del TDAH bien completo, que también puede incluir medicamentos y terapia. Acuda a un pediatra, psicólogo o psiquiatra para elaborar el mejor plan de tratamiento del TDAH para su hijo.
