El sistema biliar mueve la bilis a través del tracto digestivo. Conozca cómo funciona, los problemas que puede experimentar y las opciones de tratamiento hoy mismo.
Cómo funciona el sistema biliar?
La bilis es un líquido amarillo-verdoso que tiene dos funciones. La primera es descomponer las grasas cuando se digieren los alimentos. La segunda es transportar los desechos fuera del sistema digestivo. La bilis contiene un componente salino que descompone las grasas, las absorbe y las traslada a través del sistema digestivo hasta las heces para su eliminación.
La bilis comienza en el hígado, donde es creada por células especiales. A partir de ahí, los conductos biliares recogen la bilis y la transportan por el conducto hepático hasta que se une al conducto cístico de la vesícula biliar y se convierte en el conducto biliar común.
A través de este proceso, aproximadamente la mitad de la bilis se almacena en la vesícula biliar, que está situada justo debajo del hígado. Cuando comes, la vesícula biliar libera la bilis en los intestinos para ayudar a descomponer las grasas.
La vesícula biliar controla la cantidad de bilis liberada, que depende de la cantidad que el estómago necesita para la digestión. El sistema biliar también sirve para drenar los desechos del hígado hacia el duodeno, una parte del sistema digestivo que está justo debajo del estómago.
Problemas del sistema biliar
Hay una serie de problemas que pueden afectar a su sistema biliar y provocar consecuencias negativas para su salud.
Reflujo biliar. Cuando la bilis se devuelve al estómago en lugar de bajar para ayudar a la digestión, se llama reflujo. A veces la bilis entra en el esófago, el conducto que conecta la boca y la garganta con el estómago.
El reflujo de bilis también puede incluir el ácido gástrico del estómago, aunque normalmente las dos condiciones son diferentes. El reflujo gástrico suele convertirse en enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), un problema crónico que irrita el tejido esofágico y provoca inflamación.
El reflujo gástrico puede abordarse o controlarse con cambios en la dieta o con la introducción de medicamentos. Sin embargo, los cambios en la dieta no mejorarán su reflujo biliar. En su lugar, tendrá que probar la medicación o la cirugía en los casos graves de la enfermedad.
Los síntomas del reflujo biliar son:
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Dolor intenso en la parte superior del abdomen
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Ardor de estómago persistente
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Náuseas
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Vómitos de bilis
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Tos o ronquera en la voz?
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Pérdida de peso inexplicable?
ERGE. Se trata de una afección diferente al reflujo biliar, aunque los síntomas son muy similares. La bilis puede mezclarse con el ácido estomacal si se padece esta afección. De hecho, los profesionales médicos sospechan que la bilis contribuye significativamente a la ERGE.
Esófago de Barrett. Se trata de una afección grave que suele diagnosticarse tras sufrir reflujo y ERGE durante mucho tiempo. El ácido y la bilis dañan tanto el tejido esofágico que éste corre el riesgo de desarrollar cáncer?
Cáncer de esófago. Debido a la relación entre el reflujo y la ERGE con el esófago de Barretts, también existe una relación con el cáncer de esófago. Cuando se padecen estas enfermedades durante mucho tiempo, es fácil pasar por alto los síntomas del cáncer. Si su estado empeora o no mejora con el tratamiento, consulte a su médico.
Enfermedad biliar. Puede desarrollar enfermedades que dañen el hígado, el páncreas, la vesícula biliar y los conductos biliares. Aunque puede tener o no síntomas perceptibles de la enfermedad, ésta también puede dañar silenciosamente sus órganos y tejidos sin que haya señales. Si experimenta alguno de los siguientes síntomas, hable con su médico:?
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Hinchazón abdominal
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Orina más oscura de lo habitual?
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Diarrea que contiene grasa no digerida
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Gases persistentes, hipo y eructos.
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Picor en la piel
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Coloración amarilla de la piel y los ojos, también llamada ictericia
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Perder el apetito, lo que hace que se pierda peso sin intentarlo
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Náuseas y vómitos?
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Dolor por la parte superior del abdomen y la zona media de la espalda?
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Deposiciones pálidas o con vetas de sangre
Diagnóstico de los problemas biliares
Para hacer un diagnóstico, su médico hablará con usted sobre su historial médico y sus preocupaciones. Después de completar un examen físico, su médico puede preguntarle sobre su historial médico familiar para acotar los trastornos específicos a los que puede ser propenso. Las pruebas incluyen:
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Análisis de sangre para evaluar sus niveles de enzimas pancreáticas y la función hepática
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TAC para buscar inflamación actual y cicatrices de brotes anteriores?
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Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica para buscar obstrucciones
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Resonancia magnética para buscar inflamación en el páncreas, el abdomen y/o la zona pélvica
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Ecografía para buscar cálculos biliares y evaluar la inflamación de la vesícula biliar
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Endoscopia superior para observar el tracto gastrointestinal y el estómago
Cómo tratar los problemas del sistema biliar
Los casos menos graves de problemas biliares pueden tratarse con medicamentos. En algunos casos, puede ser necesario operar para extirpar la vesícula biliar. Esta cirugía se utiliza con mayor frecuencia para tratar:
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Cálculos en la vesícula biliar, una condición también llamada colelitiasis
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Cálculos biliares en su conducto biliar, una afección también llamada coledocolitiasis
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Inflamación de la vesícula biliar, afección también llamada colecistitis
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Pólipos grandes en la vesícula biliar ?
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Inflamación de su páncreas, también llamada pancreatitis, que es causada por los cálculos biliares?
La cirugía de la vesícula biliar se llama colecistectomía. Las incisiones realizadas para extirpar la vesícula biliar son muy pequeñas. La cirugía se considera generalmente de bajo riesgo, y muchos pacientes se van a casa el mismo día después del procedimiento. Si es necesaria una incisión más grande, su curación puede ser prolongada.