La kombucha, también conocida como té de hongos, es una bebida fermentada con supuestos beneficios para la salud. Conozca más sobre los beneficios para la salud de la kombucha.
La kombucha es una bebida efervescente agridulce hecha con té. Mucha gente dice que ayuda a aliviar o prevenir diversos problemas de salud, desde la caída del cabello hasta el cáncer y el sida. Hay pocas pruebas científicas que respalden estas afirmaciones, pero algunos elementos de la bebida pueden ser buenos para usted.
La kombucha existe desde hace casi 2.000 años. Se elaboró por primera vez en China y luego se extendió a Japón y Rusia. Se hizo popular en Europa a principios del siglo XX. Las ventas en Estados Unidos están en alza por su fama de bebida saludable y energética.
Ingredientes del Kombucha
Los ingredientes básicos de la kombucha son la levadura, el azúcar y el té negro. La mezcla se aparta durante una semana o más. Durante ese tiempo, se forman bacterias y ácidos en la bebida, así como una pequeña cantidad de alcohol. Este proceso se conoce como fermentación, y es similar a la forma en que la col se conserva como chucrut o kimchi, o cómo la leche se convierte en yogur.
Estas bacterias y ácidos forman una película sobre el líquido llamada SCOBY (colonia simbiótica de bacterias y levaduras). Puedes utilizar una SCOBY para fermentar más kombucha.
Las bacterias del kombucha incluyen bacterias de ácido láctico, que pueden funcionar como probióticos. El kombucha también contiene una dosis saludable de vitaminas B.
Beneficios del Kombucha para la salud
Sus defensores dicen que ayuda a tu digestión, libera a tu cuerpo de toxinas y aumenta tu energía. También se dice que refuerza el sistema inmunitario, ayuda a perder peso, evita la hipertensión y las enfermedades cardíacas y previene el cáncer. Pero no hay muchas pruebas que respalden estas afirmaciones.
Las afirmaciones sobre el poder de las kombuchas para facilitar la digestión provienen del hecho de que la fermentación produce probióticos. Los probióticos ayudan a combatir la diarrea y el síndrome del intestino irritable (SII), e incluso pueden reforzar el sistema inmunitario.
Cuando la kombucha se elabora con té verde, también se obtienen sus beneficios. Esto incluye compuestos bioactivos, como los polifenoles, que actúan como antioxidantes. Los antioxidantes protegen tus células del daño.
El té verde también puede ayudarte a quemar grasa y protegerte de las enfermedades del corazón. Los estudios realizados en animales demuestran que esta bebida reduce, entre otras cosas, los niveles de colesterol y azúcar en sangre. Pero las investigaciones no han demostrado que tenga los mismos efectos en las personas.
Riesgos de la kombucha
Hacer kombucha implica dejar que las bacterias crezcan en un líquido que vas a beber. Muchas de las bacterias se consideran probióticas, pero si no se prepara adecuadamente, pueden crecer bacterias dañinas o moho.
Desde mediados de la década de 1990, se han registrado varios casos de enfermedad y al menos una muerte en personas que bebían kombucha. Las dolencias incluyen problemas hepáticos, acidosis láctica (acumulación de ácido láctico en el cuerpo), reacciones alérgicas y náuseas.
El grupo de investigación de productos sin ánimo de lucro Consumer Reports desaconseja su consumo por el riesgo de contaminación y las escasas pruebas de sus beneficios.
Pero la FDA dice que la kombucha es segura cuando se prepara adecuadamente. Si la preparas en casa, los expertos recomiendan utilizar recipientes de vidrio, acero inoxidable o plástico. Mantenga todo higiénico, incluyendo el equipo y sus manos.