Los gofres son deliciosos, pero no son el alimento más saludable. Afortunadamente, con unos sencillos ajustes, puede seguir disfrutando de ellos de vez en cuando, incluso si tiene diabetes de tipo 2.
La respuesta es breve: Sí, si está dispuesto a hacer algunos cambios para que los gofres encajen en una dieta adecuada para la diabetes.
Problemas con los gofres
Tanto si tienes diabetes como si no, te costará encontrar a algún experto en nutrición que clasifique los gofres como saludables. Esto se debe a que la mayoría de las recetas de gofres no contienen muchos ingredientes beneficiosos para la salud. Una receta clásica de Betty Crocker, por ejemplo, requiere harina para todo uso, azúcar, sal, leche, aceite vegetal o mantequilla derretida y huevos.
¿El problema de estos ingredientes? Los alimentos elaborados con harina blanca suelen tener una alta carga glucémica, lo que significa que pueden provocar picos en los niveles de azúcar en sangre. Los estudios han revelado que comer demasiados de estos alimentos puede aumentar el riesgo de padecer diabetes de tipo 2 y hacer que se dispare el nivel de azúcar en sangre si ya se padece la enfermedad.
También preocupan la mantequilla, los lácteos y los huevos. El problema es la grasa saturada, que puede obstruir las arterias. Y los aderezos que la mayoría de la gente echa a sus gofres, como la mantequilla y el sirope de arce, no ayudan. Una cucharada de sirope de arce tiene 13,4 gramos de carbohidratos, un poco más que el azúcar blanco (12,6 gramos de carbohidratos por cucharada).
Si eres de los que optan por el pollo y los gofres -quizá incluso con tocino y queso añadidos-, estarás consumiendo aún más grasas saturadas. Un plato de pollo, bacon y gofres con queso cheddar de un restaurante nacional contiene más de 1.700 calorías, 700 de las cuales proceden de la grasa. Eso incluye 77 gramos de grasa saturada. Además, 3.100 miligramos de sodio. Esto seguro que está fuera del rango de una alimentación saludable. Así que si el pollo con gofres es lo tuyo, y estás pidiendo el plato en un restaurante donde no puedes pedir cambios para hacerlo mejor para ti, querrás comprobar la información nutricional antes de pedirlo para saber lo que vas a obtener y decidir si se ajusta a tus objetivos.
Dale a tus gofres un cambio de imagen saludable
Afortunadamente, sin embargo, los gofres no tienen que estar totalmente fuera del menú si tienes diabetes - siempre y cuando hagas algunos ajustes en tus recetas de gofres. Pruebe estos consejos:
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Sustituye la harina blanca por harina integral.
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Cambia los aderezos ricos como la mantequilla y el sirope (y cualquier otro elemento azucarado que suelas utilizar) por frutas como las fresas o los arándanos.
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En lugar de huevos, utilice huevos de lino: una mezcla de linaza y agua.
Si no te apetece eso y sigues queriendo tus gofres como estás acostumbrado, trátalo como cualquier otro capricho: sólo de vez en cuando y en cantidades limitadas.
