La sed excesiva y la sequedad de boca son signos reveladores de un nivel elevado de azúcar en sangre. Aprenda más sobre la sed diabética (polidipsia). Causas, síntomas, & lo que puede hacer.
La sed excesiva y la sequedad de boca son signos reveladores de un alto nivel de azúcar en sangre. Podría tener diabetes y no saberlo. Si ya le han diagnosticado la enfermedad, es posible que tenga que intensificar su tratamiento.
Hay otros problemas que también pueden causar sed excesiva. Pero es importante diagnosticar la diabetes a tiempo para reducir la posibilidad de complicaciones.
La sed en los distintos tipos de diabetes
La sed excesiva en la diabetes se denomina polidipsia. Es común tanto en la diabetes mellitus como en la diabetes insípida.
La diabetes mellitus, que incluye la diabetes de tipo 1 y la de tipo 2, se produce cuando el nivel de azúcar en sangre es demasiado alto. El tipo 1 es una enfermedad autoinmune que hace que el páncreas deje de producir insulina, una hormona que ayuda a que el azúcar llegue a las células. En el tipo 2, el cuerpo no produce suficiente insulina o no la utiliza bien.
La diabetes insípida no está relacionada con los niveles de azúcar en sangre. Es un trastorno poco frecuente que afecta a los riñones y a las hormonas que los hacen funcionar correctamente. La diabetes insípida hace que tu cuerpo produzca grandes cantidades de orina, haciéndote orinar mucho, lo que te deshidrata.
Tanto el alto nivel de azúcar en la sangre como la micción frecuente pueden provocar una sed constante e intensa.
La sed es un signo de advertencia de la diabetes
La insulina ayuda al cuerpo a utilizar el azúcar para obtener energía. Cuando no tienes suficiente insulina, el exceso de azúcar (glucosa) se acumula en la sangre.
Los riñones son su apoyo en este caso. Trabajan intensamente para absorber y filtrar ese exceso de azúcar.
También pueden eliminar parte de ese azúcar del cuerpo a través de la orina. Cuando esto ocurre, también se extraen líquidos de los tejidos. El proceso te deja deshidratado y sediento.
Es polidipsia o algo más?
Si tiene una sed que no desaparece por mucho que beba, o si orina una cantidad inusual cada día, podría tener polidipsia. Pero no saque conclusiones precipitadas sobre su estado de diabetes. Tenga en cuenta que muchos medicamentos pueden causar sed y sequedad de boca, entre ellos:
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Antipsicóticos
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Antidepresivos
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Anticonvulsivos
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Inhibidores del SGLT2 para la diabetes
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Esteroides
Además, la sequedad de boca es un rasgo distintivo de otras afecciones además de la diabetes, entre ellas:
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Enfermedades de las glándulas salivales
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Síndrome de Sjogrens
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VIH/SIDA
Riesgos de la polidipsia
La sed excesiva no es sólo molesta. Puede provocar graves problemas de salud.
Deshidratación. La deshidratación prolongada puede provocar náuseas, mareos, dolores de cabeza y desmayos. La deshidratación también hace que orines menos, lo que impide que tu cuerpo elimine el exceso de azúcar en sangre a través de la orina. Cuando esto ocurre, los niveles de azúcar en sangre se disparan demasiado rápido.
Niveles altos de azúcar en sangre no controlados. Tanto si se trata de una diabetes no diagnosticada como de una mal controlada, el alto nivel de azúcar en sangre pone en riesgo todo el organismo. Controlar la diabetes significa reducir el riesgo de complicaciones como:
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Enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares
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Daños en los nervios
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Enfermedad renal
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Enfermedad de los ojos
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Problemas sexuales y de la vejiga
Cómo tratar la sed excesiva
Si la diabetes es la causa de su sed excesiva, ponerla bajo control es el primer paso para aliviarla. Eso empieza con un diagnóstico, seguido de un plan de tratamiento de la diabetes.
Medicamentos para controlar el azúcar en sangre. Los distintos tipos de diabetes requieren tratamientos diferentes.
En el tipo 1, tendrá que administrarse insulina varias veces al día o utilizar una bomba de insulina, que suministra dosis constantes a lo largo del día. En el tipo 2, puede necesitar medicamentos si la dieta y el ejercicio no son suficientes. Los medicamentos para la diabetes de tipo 2 son, entre otros, la insulina y la metformina.
Cirugía. Si es usted obeso (con mucho sobrepeso) y tiene diabetes de tipo 2, puede plantearse la posibilidad de someterse a una intervención quirúrgica para perder peso. Puede ayudarle a perder mucho peso, a alcanzar un nivel normal de azúcar en sangre y, posiblemente, a dejar de tomar sus medicamentos para la diabetes.
Cambios en el estilo de vida. Comer alimentos saludables y hacer ejercicio cada día puede mejorar casi todos los aspectos de su salud, incluida la diabetes. Un dietista o educador en diabetes puede ayudarle a elaborar un plan de alimentación saludable que le ayude a controlar los hidratos de carbono, que tienen un mayor impacto en la glucemia que las proteínas o las grasas. Si fuma, haga de su abandono una prioridad.
Alivio de la sequedad de boca. Mientras trabajas para frenar tu diabetes, puedes probar estrategias a corto plazo para aliviar la sequedad de boca.
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Chupe un caramelo duro sin azúcar o mastique un chicle sin azúcar para ayudarle a producir más saliva.
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Reduzca el consumo de cafeína.
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No utilice enjuagues bucales con alcohol.
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Bebe agua a sorbos durante todo el día.
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Evita el uso de antihistamínicos y descongestionantes de venta libre (medicamentos para el resfriado y la alergia) porque pueden deshidratarte.
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Utiliza un humidificador en la habitación donde duermes para poner humedad en el aire.
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Prueba con sustitutos de la saliva de venta libre.
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No fume ni mastique tabaco.