Los expectorantes naturales ayudan al cuerpo a expulsar el exceso de mucosidad. A continuación le presentamos algunos expectorantes naturales y cómo utilizarlos para obtener alivio.
Cómo funciona un expectorante
Los expectorantes aunque son una clase de medicamento que se utiliza para tratar la tos no evitan la tos, pero ayudan a impedir que se acumule la mucosidad en su sistema respiratorio. Esto es importante porque la tos con mucosidad es la forma que tiene el cuerpo de eliminar los microorganismos, los cuerpos extraños y el exceso de mucosidad de las vías respiratorias.?
Así que, finalmente, proporcionan un alivio más sostenido. También se utilizan como tratamiento de apoyo con otros medicamentos para ayudarle a recuperarse de la tos?
Hay varios expectorantes disponibles como medicamentos de venta libre, pero algunos expectorantes y remedios para la tos... también se producen de forma natural...
Algunos remedios naturales
Los expectorantes naturales y los remedios para la tos incluyen varias hierbas y otras sustancias naturales que ayudan a despejar las vías respiratorias... Otros tratamientos naturales ayudan a aliviar los síntomas causados por la inflamación de las vías respiratorias superiores... Cuando se infectan o se irritan por la tos o el dolor de garganta, las células de la garganta o de las vías respiratorias superiores desencadenan el sistema inmunitario para ayudar a combatirlas. Puedes aliviar los síntomas trabajando para reducir la inflamación. Estas son algunas formas naturales que pueden ser efectivas para ayudar a tratar la tos:
El agua aumenta la humedad de la mucosidad y facilita su expulsión. Puedes utilizar el agua como expectorante bebiendo mucha cantidad sola o en forma de infusión o haciendo gárgaras con agua salada. También puedes conseguir sus efectos utilizando un humidificador o mediante la inhalación de vapor.
Miel... La miel se ha utilizado durante mucho tiempo para aliviar la tos y la congestión, y los estudios han demostrado que es un expectorante eficaz. Para utilizar la miel como expectorante, disuelva una cucharada de miel en un vaso de agua caliente. Bebe la mezcla a lo largo del día.
Sin embargo, no se debe dar miel a los niños menores de un año porque puede ponerlos muy enfermos...
El jengibre se obtiene de las raíces de la planta del jengibre. Se utiliza mucho como medicina y alimento. El jengibre alivia la congestión y actúa como expectorante. Para utilizarlo, se machaca el bulbo de jengibre y se hierve en un cazo con agua durante unos minutos. Bebe a sorbos durante todo el día. Pero, antes de consumir jengibre, recuerda que:?
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Puede provocar molestias en el aparato digestivo, ardor de estómago y náuseas?
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No debe usarse si está tomando anticoagulantes.
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Disminuye la presión arterial en dosis altas, por lo que hay que evitarlo si se está tomando medicación antihipertensiva.
El ajo tiene muchos usos y se cultiva en todo el mundo. Contiene una sustancia química llamada alicina, que tiene propiedades medicinales. El ajo puede ayudar a aliviar la tos si lo machacas y luego lo añades al agua caliente, que puedes utilizar durante la inhalación de vapor. También puedes machacar el ajo, mezclarlo con miel y tomar una cucharada tres veces al día. Pero evite consumir ajo como medicamento si está tomando anticoagulantes.
La albahaca santa, también conocida como tulsi, es una hierba que ayuda a diluir la mucosidad. Para utilizarla como expectorante, hay que hervir unas 10 hojas de albahaca santa con cinco clavos de olor en una taza de agua durante 10 minutos. Deja que la mezcla se enfríe y bébela tres veces al día. También puede añadir unas gotas de aceite de albahaca santa al agua hirviendo y utilizarla para inhalar vapor.
Sin embargo, debe evitar el uso de la albahaca santa si está embarazada o intentando quedarse embarazada o si tiene diabetes o hipotiroidismo.
El regaliz es una hierba medicinal originaria de algunas partes de Europa y Asia. Contiene sustancias químicas que pueden diluir las secreciones mucosas y reducir la incidencia del dolor de garganta después de algunas intervenciones quirúrgicas.
Coloca media cucharadita de regaliz en una taza de agua y hiérvela durante 10 minutos. Después, bebe esta infusión. También puede hacer gárgaras con media cucharadita de regaliz en una taza de agua tibia tres veces al día o comer un caramelo de regaliz.
Sin embargo, evite el uso de regaliz si tiene la presión arterial alta.
Menta: La menta contiene mentol, que puede aliviar los síntomas de las infecciones de garganta y pecho. El aceite de menta también es un antiespasmódico, es decir, alivia o detiene los espasmos musculares de las vías respiratorias. Para utilizarlo como expectorante, ponga una gota de aceite de menta en agua caliente y utilícela para inhalar vapor. También puedes beber té de menta. Pero, recuerda que:?
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La menta puede causar acidez y vómitos.
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La aromaterapia con menta puede ser tóxica para niños y mujeres?
Eucalipto... El eucalipto se utiliza en muchas pastillas para la tos, inhalantes y vaporizadores para aflojar la mucosidad y aliviar la congestión. Puede utilizarlo poniendo dos gotas de aceite de eucalipto en agua y utilizándolo para la inhalación de vapor. Sin embargo, el aceite de eucalipto es tóxico cuando se consume por vía oral.
Mentol. El mentol se utiliza por sus propiedades anestésicas, así como por su capacidad para contrarrestar las irritaciones. Puede aliviar tanto la tos como el dolor de garganta.
Aloe vera. El aloe tiene propiedades antiinflamatorias y ayuda a calmar y reducir la irritación de las vías respiratorias.
Hoja de hiedra... Las hojas de la planta Hedera helix son un expectorante eficaz. Actúan ensanchando las vías respiratorias y estimulando la secreción de líquidos, es decir, la expulsión de flemas. Esta hierba y sus extractos deben tomarse por vía oral para obtener sus efectos expectorantes.
Asegúrate de que los extractos de hoja de hiedra no se administran a niños menores de dos años. Además, la hoja de hiedra puede provocar molestias en el sistema digestivo y reacciones alérgicas, así que utilízala con cuidado.
Aspirina: busca productos de venta libre que contengan dosis muy bajas de aspirina. Cuando se aplica a los tejidos inflamados causados por una infección de las vías respiratorias superiores, ayuda a reducir los síntomas del dolor de garganta.
