¿Cómo saber si su hijo tiene una urgencia médica? El médico ofrece una guía sobre las afecciones que requieren atención inmediata.
Aquí tienes algunas pautas para 7 de las emergencias médicas más comunes en los niños:
1. Dificultad respiratoria
La dificultad respiratoria se refiere a la dificultad para respirar y tomar suficiente oxígeno. Las causas pueden ser asfixia, asma, una infección o neumonía. Los signos de dificultad respiratoria son la tos, las sibilancias, la respiración dificultosa (especialmente el aleteo de la nariz y el uso de los músculos del pecho y del cuello para ayudar a la respiración), los gruñidos, la incapacidad para hablar o ponerse azul.
Cuándo llamar al 911:
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La frecuencia respiratoria es mayor de 50 a 60 respiraciones por minuto.
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El niño se pone azul alrededor de la boca.
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La condición está empeorando en lugar de mejorar.
Si se presentan estos signos, no intente meter a su hijo en el coche: llame a una ambulancia. Los paramédicos pueden suministrar oxígeno y llevar a su hijo de forma segura al hospital.
2. Huesos rotos
Las fracturas de huesos son emergencias infantiles comunes. Aunque estas lesiones no suelen poner en peligro la vida del niño, hay que llevarlo a un hospital o a un centro de atención urgente para que lo evalúen. En general, los padres pueden llevar ellos mismos a los niños con huesos rotos al hospital.
Cuándo llamar al 911:
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La rotura es tan grave que no puedes controlar el dolor.
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El hueso sobresale de la piel.
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El accidente implica un traumatismo en la cabeza o el cuello.
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El accidente ha provocado un estado de alteración de la conciencia.
3. Vómitos y/o diarrea
Los vómitos y/o la diarrea pueden requerir atención de urgencia si el niño se deshidrata. Si su hijo no puede retener nada o tiene una diarrea severa, esté atento a los signos de deshidratación como ojos hundidos, membranas mucosas secas y cantidades anormalmente bajas de orina. Si aparece alguno de ellos su hijo debe ser evaluado por el médico
Cuándo llamar al 911:
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El niño no responde.
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Hay calambres intensos y un dolor abdominal incesante. Esto podría indicar apendicitis o cálculos renales, por ejemplo.
4. Convulsiones febriles
En los bebés y niños pequeños, un rápido aumento de la temperatura puede provocar una convulsión febril. La mayoría de las convulsiones asociadas a la fiebre terminan rápidamente y no son necesariamente emergencias. Sin embargo, cualquier niño que tenga nuevas convulsiones debe ser visto por un médico lo antes posible. Después de que un médico haya evaluado a su hijo por las convulsiones, cualquier convulsión recurrente debe ser informada por teléfono al médico para asegurarse de que no está ocurriendo nada más grave que requiera una evaluación adicional.
Cuándo llamar al 911:
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La convulsión no se detiene después de tres a cinco minutos.
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El niño tiene una respiración dificultosa o se pone azul.
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El estado mental normal de su hijo no regresa después de la convulsión.
5. Cataratas
Las caídas desde una altura considerable pueden lesionar la cabeza, la columna vertebral o los órganos internos. Si sospecha que hay una lesión en la cabeza, hable con su hijo y asegúrese de que responde a las preguntas de forma adecuada.
Cuándo llamar al 911:
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El niño vomita más de una vez.
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Pierden el conocimiento.
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El niño se queja de entumecimiento u hormigueo.
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Sospecha de lesiones internas.
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Sospecha una lesión en el cuello o la columna vertebral.
En el caso de una posible lesión en el cuello o la columna vertebral, no intente mover a su hijo. Los paramédicos inmovilizarán la columna vertebral antes de llevar a su hijo al hospital.
6. Cortes/sangrado
Si su hijo sangra, aplique presión sobre la herida y evalúe la magnitud del daño. Los niños que necesitan puntos de sutura normalmente pueden ser llevados al hospital o al centro de atención urgente en coche.
Cuándo llamar al 911:
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Existe un trastorno hemorrágico conocido.
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Es incapaz de detener la hemorragia.
7. Posible envenenamiento
Es un escenario aterrador: su hijo se ha metido en el botiquín o en su suministro de limpiadores domésticos. Lo primero que hay que hacer es llamar al Servicio de Toxicología: 1-800-222-1222. Los expertos del Centro de Intoxicaciones pueden evaluar la situación y aconsejar rápidamente.
Cuándo llamar al 911:
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El niño no responde.
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Control de Intoxicaciones lo aconseja.
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