Descubra cómo el tabaco, el radón, el amianto y otras cosas pueden causar cáncer, y qué puede hacer para reducir su riesgo.
Probablemente haya oído la palabra "carcinógeno" en las noticias y se haya preguntado qué significa para su vida cotidiana. Un carcinógeno es algo que puede provocar cáncer. Puede ser una sustancia presente en el aire, un producto que usted utiliza o una sustancia química presente en alimentos y bebidas.
El hecho de que haya estado en contacto con un carcinógeno no significa que vaya a padecer cáncer. Su probabilidad de enfermar depende de muchas cosas. El grado de exposición es una de ellas. Los genes también influyen.
Los investigadores utilizan diferentes métodos para decidir si algo debe denominarse carcinógeno. Se pueden administrar grandes dosis de una sustancia a animales de laboratorio para ver si contraen cáncer. Los científicos también estudian los resultados de muchos estudios.
Tabaco
No importa si eres fumador o respiras el humo de otra persona. Se sabe que al menos 70 sustancias químicas del tabaco causan cáncer al dañar tu ADN.
El tabaco sin humo puede parecer más seguro, pero también puede provocar cáncer. Incluso fumar poco aumenta el riesgo, así que habla con tu médico sobre las formas de dejarlo.
Radón
Este gas se produce en pequeñas cantidades en la naturaleza, donde es inofensivo. Pero si se acumula en el interior y se respira, el radón descompone el revestimiento de los pulmones.
Es la primera causa de cáncer de pulmón en los no fumadores. No se puede ver ni oler el radón, pero una prueba especial puede comprobar los niveles en su casa. Algunas oficinas estatales de radón ofrecen kits gratuitos.
Amianto
Las resistentes y diminutas fibras del amianto contribuyen a reforzar productos como las tejas de los tejados, las baldosas de los techos y las piezas de los coches. Sin embargo, si estas fibras se desprenden y se respiran, pueden quedar alojadas dentro de los pulmones.
Los estudios realizados en personas y animales han demostrado que el amianto es un carcinógeno. Si entras en contacto con él en tu trabajo, usa equipo de protección. Si está en tu casa y hay que eliminarlo, contrata a un experto.
Alimentos crujientes y marrones
Cuando algunas verduras, como las patatas, se calientan a altas temperaturas, pueden desprender una sustancia química llamada acrilamida. Los estudios demuestran que las ratas que ingirieron acrilamida en el agua que bebían contrajeron cáncer, por lo que los investigadores creen que los humanos también podrían hacerlo.
Puedes reducir la cantidad que comes horneando, asando, friendo y tostando los alimentos hasta que tengan un color tostado en lugar de dorado o marrón intenso... La acrilamida también se encuentra en muchos productos que compras, así como en el humo del tabaco.
Formaldehído
Desde la madera contrachapada hasta algunos tejidos, esta sustancia química se utiliza en muchos productos domésticos. Los estudios realizados en ratas de laboratorio y en personas que están en contacto con el formaldehído en sus trabajos demuestran que puede causar cáncer.
Antes de comprar productos de madera o muebles para tu casa, averigua si contienen formaldehído. Ventila tu casa todos los días y mantén los niveles de humedad bajos con un aire acondicionado o deshumidificador.
Rayos ultravioleta
Los estudios demuestran que los rayos ultravioleta (UV), ya sean del sol o de una cama de bronceado, son absorbidos por la piel y dañan las células de la misma. La mayoría de los casos de cáncer de piel se deben a los rayos UV.
La contaminación y el cambio climático hacen que estos rayos sean más fuertes. Para estar a salvo, protégete la piel con crema solar, usa sombrero y gafas de sol y evita los salones de bronceado.
Alcohol
Cuanto más alcohol beba, mayores serán sus probabilidades de padecer ciertos tipos de cáncer, como:
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Cabeza y cuello
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Esófago
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Mama
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Hígado
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Colorrectal
Una de las razones puede ser las sustancias químicas cancerígenas que se producen cuando se elaboran la cerveza, el vino y los licores fuertes. Los expertos sugieren que las mujeres no tomen más de una copa al día y los hombres no más de dos.
Carne procesada
Tocino, salchichón, pepperoni, salchichas... cualquier carne que haya sido conservada o aromatizada puede aumentar... las posibilidades de padecer cáncer de colon. Los expertos han llegado a esta conclusión tras analizar más de 800 estudios.
Comer un perrito caliente de vez en cuando está bien, pero limite al máximo la cantidad de carne procesada... Intente limitar los alimentos que hayan sido salados, fermentados, curados o ahumados.
Escape del motor
Los camiones, autobuses, trenes e incluso algunos coches funcionan con gasóleo. Se cree que el gas y el hollín de los gases de escape de los motores diésel causan cáncer de pulmón y otros tipos de cáncer.
Siempre que pueda, evite estar al ralentí en el tráfico o pasar tiempo junto a vehículos que funcionan con diésel. Si forma parte de su trabajo, siga las directrices de seguridad en el lugar de trabajo para proteger su salud.
Contaminación
Además de los gases de escape, el aire exterior contaminado contiene polvo y restos de metales y disolventes que pueden provocar cáncer. Los expertos lo saben tras analizar los datos de más de 1,2 millones de personas en todo Estados Unidos.
No puedes evitar la contaminación, pero puedes poner de tu parte para no contribuir a ella caminando o montando en bicicleta en lugar de conducir. Siga las advertencias de salud pública locales y quédese en casa los días en que la calidad del aire sea mala.