Infórmese sobre las pruebas que pedirá su médico para diagnosticar el liposarcoma, un tipo de cáncer que se origina en las células grasas. Y conozca los estadios de la enfermedad y lo que le indican sobre la velocidad de crecimiento de su cáncer.
Pruebas y diagnóstico del liposarcoma
Un bulto nuevo o creciente bajo la piel puede ser un síntoma de liposarcoma, un tipo de cáncer que se inicia en las células grasas. Aunque el bulto puede no ser nada grave, es conveniente que te lo examine tu médico. ?
Si tienes un liposarcoma, cuanto antes recibas el diagnóstico, antes podrás empezar el tratamiento.
Cómo hacerse un examen
En tu visita, el médico te preguntará primero por tus síntomas. Luego repasará su historial de salud.
Es posible que le pregunten si tiene algún miembro de la familia con enfermedades como la neurofibromatosis, que puede aumentar las posibilidades de padecer un liposarcoma.
Durante el examen, el médico observará y tocará el bulto. Un bulto bajo la piel de más de 5 cm puede ser un signo de liposarcoma.
Pruebas de imagen
El siguiente paso es someterse a pruebas de imagen, que buscan un tumor dentro de su cuerpo. Pueden mostrar a su médico dónde está el cáncer y hasta dónde se ha extendido.
Algunas pruebas que pueden hacerse son:
Rayos X. Utiliza la radiación en dosis bajas para obtener imágenes del interior de su cuerpo. Puede revelar tumores y otros crecimientos.
TAC. Es una potente radiografía que hace imágenes detalladas y tridimensionales de las estructuras de su cuerpo. Un TAC de tórax puede mostrar si el cáncer se ha extendido a los pulmones.
RESONANCIA MAGNÉTICA. Esta prueba utiliza potentes imanes y ondas de radio para obtener imágenes del interior del cuerpo que ayudan a distinguir entre un cáncer y un tumor no canceroso.
Exploración PET. Para esta prueba, un técnico inyecta una pequeña cantidad de material radiactivo en el cuerpo. Este material actúa como un "rastreador" revelando las células cancerosas en las imágenes.
Ecografía. Utiliza ondas sonoras para crear imágenes de órganos y tejidos.
Un radiólogo revisará las exploraciones e informará a su médico si los crecimientos parecen cáncer. Para realizar más pruebas y tratamientos, acudirá a un oncólogo, un especialista que trata el liposarcoma y otros tipos de cáncer.
Biopsia
Una biopsia es la única forma de saber con seguridad que tiene un liposarcoma. Durante esta prueba, su médico extrae un pequeño trozo de tejido del bulto. Esto puede hacerse de una de las dos maneras siguientes:
Biopsia con aguja. El médico introduce una aguja en el bulto y extrae un trozo de tejido. Dado que el liposarcoma suele estar en lo más profundo del cuerpo, una ecografía puede ayudar al médico a colocar la aguja en el lugar adecuado.
Biopsia quirúrgica. El médico hace un corte en la piel y extrae un pequeño trozo del tumor. La muestra va al laboratorio, donde un técnico examina las células al microscopio para ver si parecen cancerosas.
La muestra puede someterse a pruebas más avanzadas, incluidas las pruebas genéticas, para ayudar a su médico a determinar las opciones de tratamiento. Las pruebas genéticas buscan cambios en genes individuales, cromosomas o trozos cortos de ADN en el cáncer.
Su diagnóstico
Su médico utilizará los resultados de estas pruebas para confirmar si tiene un liposarcoma y en qué parte del cuerpo se encuentra. Le darán a su cáncer un grado y un estadio en función de su aspecto diferente al de las células normales, de su rapidez de crecimiento y de si se ha extendido.
Por ejemplo, su médico puede decirle que su liposarcoma tiene uno de estos grados
Grado bajo. El cáncer se parece mucho a las células normales y crece lentamente.
Grado intermedio. El cáncer tiene un aspecto más anormal que otras células y crece un poco más rápido.
Grado alto. El cáncer crece rápidamente y es más probable que se extienda.
El liposarcoma tiene cuatro estadios:
Estadio I. Un cáncer pequeño, de bajo grado y que no se ha extendido a otras partes del cuerpo.
Estadio II. Suele ser más grande y de crecimiento más rápido que el estadio II, pero no se ha extendido.
Estadio III. Un cáncer de alto grado que no se ha extendido.
Estadio IV. El cáncer puede ser de cualquier grado o tamaño, pero se ha extendido a otras zonas del cuerpo.
Según el grado y el estadio de su cáncer, su médico le dirá qué puede esperar y creará un plan de tratamiento personalizado. Pídale a su médico que le explique su diagnóstico y le haga saber lo que significa para su tratamiento.