El GcMAF, un tipo de inmunoterapia, no está aprobado para tratar el cáncer, pero algunos científicos están investigando para ver si podría ayudar.
En 2008, un grupo de estudios apareció en revistas médicas afirmando que un tratamiento llamado GcMAF había eliminado los cánceres de mama, colorrectal y de próstata en pequeños grupos de personas. Pero más de una década después, los científicos han planteado dudas sobre la investigación, y tres de los estudios se han retractado.
El GcMAF no está aprobado para el cáncer, pero algunos investigadores siguen estudiándolo como posible tratamiento.
¿Qué es el GcMAF?
GcMAF es la abreviatura de "factor activador de macrófagos derivado de la proteína Gc". Es un tipo de inmunoterapia, un tratamiento que reactiva el sistema inmunitario -la defensa de tu cuerpo contra los gérmenes- para eliminar el cáncer.
Los macrófagos son glóbulos blancos que el sistema inmunitario envía para engullir células extrañas como las bacterias y el cáncer. Nuestro cuerpo fabrica la proteína GcMAF para activar los macrófagos. Pero se cree que las células cancerosas liberan una enzima llamada nagalasa que bloquea la producción de GcMAF para protegerse del ataque.
El tratamiento con GcMAF pretende activar más macrófagos para que puedan combatir el cáncer.
Investigación sobre el GcMAF
Un estudio de 1997 probó el GcMAF en ratones con cáncer. Descubrió que el GcMAF mejoraba su supervivencia de 16 a 32 días.
Unos años después, los investigadores probaron el tratamiento en personas con cáncer de mama, colorrectal y de próstata. Les administraron inyecciones de una pequeña cantidad de GcMAF una vez a la semana. Al cabo de unos meses, todos los pacientes estaban curados, según los estudios. Entre cuatro y siete años después, sus cánceres no habían vuelto a aparecer.
Estos resultados parecen impresionantes, pero los estudios presentaban algunos problemas importantes. En primer lugar, eran muy pequeños, de ocho a 16 personas cada uno. Todos los participantes en los estudios ya habían recibido tratamientos estándar contra el cáncer, como cirugía, quimioterapia o radiación. Por tanto, era difícil saber si estos tratamientos, o el GcMAF, provocaban la reducción de los cánceres.
Además, los médicos suelen utilizar pruebas de imagen y de laboratorio para clasificar los cánceres, es decir, para ver el tamaño del cáncer y si se ha extendido. Los investigadores no hicieron esto. En su lugar, realizaron análisis de sangre para comprobar los niveles de nagalasa, que no es una forma probada de comprobar si hay cáncer o si se ha reducido.
Por último, los investigadores nunca probaron si el GcMAF realmente activaba los macrófagos en la sangre de los pacientes. Por lo tanto, no podían estar seguros de que el tratamiento funcionara en absoluto.
Tres médicos del Anticancer Fund, un grupo sin ánimo de lucro que promueve la investigación sobre el cáncer, publicaron una carta en 2014 en la que exponían muchos de los problemas de los estudios. Encontraron varios errores en las afirmaciones de los estudios y dijeron que sus conclusiones "no tienen sentido."
El futuro de la GcMAF
Algunos investigadores siguen investigando el GcMAF como posible tratamiento del cáncer. Algunos estudios iniciales sugieren que podría ser útil para personas con cánceres en fase avanzada.
Es difícil saber si el GcMAF funciona. Los estudios que se han realizado hasta ahora analizaron un número muy reducido de personas. Algunos de ellos sólo incluían a una persona. Se necesitan estudios más amplios para demostrar que este tratamiento funciona en el cáncer y que es seguro.
Los macrófagos pueden seguir siendo prometedores. Los investigadores están tratando de averiguar si los anticuerpos monoclonales u otros fármacos podrían ayudar a los macrófagos a eliminar las células cancerosas.
Hasta que sepamos más, los médicos se decantan por otras inmunoterapias, como los inhibidores de los puntos de control, que tienen más pruebas que los respaldan. Si tiene preguntas sobre el GcMAF o cualquier otro tratamiento contra el cáncer que haya leído en Internet, su médico oncólogo es la persona más indicada para responderlas.