Obtenga más información sobre la terapia, los medicamentos y la cirugía, y sobre cómo usted y su médico pueden decidir el curso correcto.
Su médico hablará con usted sobre los objetivos del tratamiento antes de decidir cómo avanzar. Existen varias opciones de tratamiento:
Tratamientos no farmacológicos
Los médicos suelen probar un tratamiento no farmacológico antes de la medicación o la cirugía. Su médico podría sugerir:
-
Fisioterapia. Durante las sesiones regulares, aprenderá formas de posicionarse para evitar desencadenar su espasticidad. También aprenderás estiramientos y ejercicios para evitar que tus músculos se contraigan.
-
Terapia ocupacional. Un terapeuta ocupacional puede ayudarte a hacer cambios en tu casa y a modificar ciertas actividades diarias en casa y en el trabajo para ayudarte a funcionar mejor. También pueden trabajar contigo en el habla y los movimientos de las manos.
-
Masaje. Un terapeuta de masajes con licencia puede ayudar a relajar sus músculos y mejorar su rango de movimiento.
-
Férulas o corsés. Estos pueden ayudar a evitar que tus músculos tengan espasmos y se tensen involuntariamente.
-
Terapia de temperatura. La aplicación de frío (hielo, agua fría o sprays químicos) en los músculos, especialmente antes de la fisioterapia, puede ayudar a calmar la espasticidad. El calor, por su parte, relaja los músculos temporalmente para aliviar los espasmos.
-
Estimulación eléctrica. Los pulsos eléctricos pueden ayudar a fortalecer los músculos débiles para contrarrestar los espásticos.
-
Biorretroalimentación. Un monitor eléctrico te envía señales cada vez que tu músculo tiene espasmos. El proceso debería entrenarte para relajar tus músculos conscientemente cuando tengan espasmos.
Medicación
Si las opciones no farmacológicas no suponen un alivio, su médico puede sugerirle que añada medicamentos a su tratamiento. Estas son algunas de sus opciones:
Medicamentos orales
Su médico puede recetarle un medicamento que relaje sus músculos, como:
-
Baclofeno (Lioresal)
-
Dantroleno sódico (Dantrium)
-
Tizanidina (Zanaflex)
O un sedante, como:
-
Clonazepam (Klonopin)
-
Diazepam (Valium)
Su médico también podría sugerirle medicamentos anticonvulsivos/dolorosos para los nervios, como la gabapentina (Neurontin).
Cualquiera de estos medicamentos puede ayudar a relajar grupos enteros de músculos grandes a la vez. Pero también pueden causar algunos efectos secundarios, como mareos, debilidad y somnolencia.
Las inyecciones de toxina botulínica (Botox) son otra forma de relajar los músculos. Los médicos inyectan Botox en el músculo específico que necesita relajarse. Se tarda entre 7 y 10 días en notar los efectos, que pueden durar hasta 6 meses.
Cirugía
Si las píldoras o el Botox no funcionan lo suficientemente bien, su médico puede querer probar la cirugía. Estas son algunas opciones:
Terapia de baclofeno intratecal (ITB). Un cirujano te implanta una bomba en el vientre que envía baclofeno líquido, un medicamento que relaja los músculos, al líquido cefalorraquídeo. La bomba hace llegar a la médula espinal más cantidad de medicamento que las pastillas. Esto significa que no hay que tomar tanta cantidad y que habrá menos efectos secundarios. La bomba puede permanecer instalada durante unos 7 años.
Cirugía ortopédica. Es posible que necesite una intervención quirúrgica en los músculos, los huesos o el tejido conjuntivo para ayudarle a moverse. La cirugía ortopédica puede alargar y liberar los músculos y tendones contraídos que son demasiado cortos.
Neurocirugía. En algunos casos, el médico puede querer operar el cerebro, la médula espinal o los nervios para ayudar a aliviar la espasticidad. En un procedimiento llamado rizotomía, un neurocirujano separa ciertos nervios a lo largo de la columna vertebral que indican a los músculos que se contraigan. El cirujano los corta para aliviar la espasticidad de esos músculos.