El programa infantil comparte un mensaje positivo de inclusión al dar la bienvenida al elenco a Julia, un muppet con autismo.
'Barrio Sésamo' presenta su primer personaje con autismo
Por Locke Hughes Revisado médicamente por Arefa Cassoobhoy, MD, MPH De los archivos del doctor
Durante casi 50 años, los Teleñecos de Barrio Sésamo han enseñado a los niños diversos temas, desde el alfabeto hasta importantes cuestiones sociales como el acoso escolar, la inseguridad alimentaria y el divorcio. Ahora, el programa está abriendo nuevos caminos al introducir un personaje con autismo, un Muppet llamado Julia.
Aunque Julia ha aparecido en un libro de cuentos online de Barrio Sésamo, ésta será la primera vez que su personaje aparezca en el programa de televisión. Los productores del programa trabajaron con psicólogos infantiles y organizaciones de autismo para encontrar la mejor manera de representar el autismo. Su objetivo: ayudar a todos los niños a entender por qué alguien con esta enfermedad actúa como lo hace, que puede ser diferente de lo esperado.
Por ejemplo, cuando se le presenta a Julia el Gran Pájaro, no responde. Como explicó Elmo en 60 Minutes, no es algo personal: es que Julia tiene autismo. Así que a veces le cuesta un poco más hacer las cosas. Sin embargo, el autismo no siempre es igual para todos, así que es importante saber que los niños con autismo pueden hacer las cosas de forma diferente.
Dado que el autismo afecta a 1 de cada 68 niños... hoy en día, existe la posibilidad de que muchos niños se crucen con alguien del espectro autista. Y es de esperar que el papel de Julias en Barrio Sésamo les ayude a saber qué esperar. Es maravilloso que se presente un personaje autista. Sin duda, esto beneficiará a todos los niños, ya que aprenderán a hacerse amigos y a entender a los niños que son diferentes, dice la doctora Hansa Bhargava, editora médica y pediatra experta...
Además, la condición de Julias está cerca de casa para su titiritera, Stacey Gordon. Ella tiene un hijo con autismo. Como dice a 60 Minutos, si los amigos de mi hijo hubieran estado expuestos a sus comportamientos a través de algo que hubieran visto en la televisión antes de experimentarlos en el aula, quizá no se hubieran asustado. No se habrían preocupado cuando lloraba. Habrían sabido que juega de una manera diferente y que eso está bien.