El asma eosinofílica es una forma poco común de asma que se produce cuando se tiene un exceso de un tipo de glóbulos blancos llamado eosinófilo. El mejor lugar para comprobar la presencia de eosinófilos es el esputo, la mugre que se expulsa de los pulmones al toser.
¿Qué son los eosinófilos?
Son unos glóbulos blancos especiales, que ayudan a tu sistema inmunitario a combatir las infecciones y otros invasores extraños. Una de las formas en que lo hacen es controlando la inflamación. Las sustancias químicas de los glóbulos blancos convergen en el lugar de la lesión para ayudar a su curación, lo que hincha y enrojece temporalmente la zona.
Pero un exceso de inflamación puede dañar el tejido sano. Cuando los eosinófilos se vuelven demasiado activos o hay demasiados, estas células pueden provocar alergias, asma y otras enfermedades.
Los eosinófilos y otras células sanguíneas se originan en la médula ósea. A continuación, pasan al torrente sanguíneo y acaban aterrizando en los tejidos, incluidos los pulmones. Una vez allí, los eosinófilos pueden permanecer en el órgano durante un par de semanas.
Qué es la eosinofilia de esputo?
Cuando hay demasiados eosinófilos en la sangre o en los tejidos, se trata de una enfermedad llamada eosinofilia. Si tiene asma eosinofílica, tiene demasiadas células inmunitarias en la sangre y, lo que es más preocupante, en los pulmones.
Esas células inmunitarias extra dañinas en sus pulmones aparecerán en su esputo. Si su médico le dice que tiene eosinofilia en el esputo, eso es lo que quiere decir. Esos eosinófilos sobrantes pueden ser difíciles de expulsar, incluso con tratamiento.
Cómo vigilar los recuentos de esputo
Saber que su asma está relacionada con la eosinofilia del esputo puede ayudarle a comprender su enfermedad. Su médico puede vigilar las células de su esputo para ayudar a decidir la mejor manera de tratar su asma.
Normalmente, los eosinófilos no deben constituir más del 2%-3% de todos los tipos de células de su esputo. Si los niveles son superiores a eso, usted tiene asma eosinofílica.
El número de eosinófilos en los pulmones y en el esputo aumentará y disminuirá en función del estado de su asma. Y los estudios demuestran que sus niveles de eosinófilos suelen seguir de cerca la gravedad de sus síntomas de asma. El número de esas células también puede ser un indicio de lo bien que está funcionando su tratamiento.
Pregunte a su médico si le recomienda hacer un seguimiento de sus recuentos de esputo con regularidad. Es una forma de ayudar a mantener el asma bajo control.