Obtenga más información del médico sobre la ablación por radiofrecuencia, un procedimiento utilizado para tratar el dolor de la artritis.
Qué afecciones se tratan con la ablación por radiofrecuencia?
La ARF puede utilizarse para ayudar a los pacientes con dolor lumbar y cervical crónico (de larga duración) y con dolor relacionado con la degeneración de las articulaciones por la artritis.
Cuánto dura el alivio del dolor de la ablación por radiofrecuencia?
El grado de alivio del dolor varía, dependiendo de la causa y la localización del dolor. El alivio del dolor de la ARF puede durar de seis a 12 meses y, en algunos casos, el alivio puede durar años. Más del 70% de los pacientes tratados con ARF experimentan un alivio del dolor.
Es segura la ablación por radiofrecuencia?
La ARF ha demostrado ser una forma segura y eficaz de tratar algunas formas de dolor. También es generalmente bien tolerada, con muy pocas complicaciones asociadas. Existe un ligero riesgo de infección y sangrado en el lugar de inserción. Su médico puede aconsejarle sobre su riesgo particular.
Cuáles son los efectos secundarios de la ablación por radiofrecuencia?
El principal efecto secundario de la ARF es una cierta molestia, que incluye hinchazón y hematomas en el lugar del tratamiento, pero generalmente desaparece al cabo de unos días.
Quién no debe someterse a la ablación por radiofrecuencia?
Como ocurre con cualquier procedimiento médico, la ARF no es adecuada para todo el mundo. Por ejemplo, la ablación por radiofrecuencia no se recomienda a las personas que tienen infecciones activas o problemas de sangrado. Su médico puede decirle si no debe someterse a la ARF.
Cómo me preparo para la ablación por radiofrecuencia?
Para prepararse para el tratamiento de ablación por radiofrecuencia, debe tomar algunas precauciones, entre ellas:
-
No coma en las seis horas previas a su cita; sin embargo, puede tomar líquidos claros hasta dos horas antes del procedimiento.
-
Si tiene diabetes y usa insulina, deberá ajustar la dosis de insulina el día de la intervención. Su médico de cabecera le ayudará con este ajuste. Traiga su medicación para la diabetes para poder tomarla después del procedimiento.
-
Continúe tomando todos los demás medicamentos con un pequeño sorbo de agua. Lleve consigo toda la medicación para poder tomarla después del procedimiento. Tenga en cuenta: no suspenda ninguna medicación sin consultar antes con su médico de cabecera o de referencia.
-
Deberá llevar a alguien con usted para que le lleve a casa después del procedimiento. No debe conducir ni manejar maquinaria durante al menos 24 horas después del procedimiento.
Qué ocurre durante la ablación por radiofrecuencia?
Se reunirá con un médico para una evaluación. Si se recomienda la ablación por radiofrecuencia, un médico le explicará el procedimiento en detalle, incluyendo las posibles complicaciones y efectos secundarios.
El médico también responderá a cualquier pregunta que pueda tener.
Es posible que se le coloque una vía intravenosa en una vena del brazo antes del procedimiento y que se utilice un anestésico local y un sedante suave para reducir las molestias durante la ARF. Es posible que esté despierto durante el proceso para ayudar a evaluar adecuadamente el procedimiento. Pregunte a su médico sobre los detalles de antemano.
Una vez administrada la anestesia local (estará despierto pero no sentirá ningún dolor), el médico introducirá una pequeña aguja en la zona general en la que siente dolor. Mediante rayos X, el médico guiará la aguja hasta la zona exacta. A continuación, se introduce un microelectrodo a través de la aguja para iniciar el proceso de estimulación.
Durante el procedimiento, el médico le preguntará si puede sentir una sensación de hormigueo. El objetivo del proceso de estimulación es ayudar al médico a determinar si el electrodo está en la zona óptima para el tratamiento.
Una vez verificada la colocación de la aguja y el electrodo, se envía una pequeña corriente de radiofrecuencia a través del electrodo al tejido circundante, lo que hace que el tejido se caliente. No debería sentir molestias durante la parte del calentamiento del procedimiento.
Qué ocurre después de la ablación por radiofrecuencia?
Tras la ablación por radiofrecuencia:
-
Permanecerá en una sala de recuperación para su observación, donde una enfermera le tomará la tensión arterial y el pulso.
-
Se colocará un vendaje sobre el lugar de la inyección.
-
La enfermera le dará una bebida y revisará con usted las instrucciones de alta.
-
Alguien debe llevarle a casa.
Puedo retomar mis actividades normales después de la ablación por radiofrecuencia?
Tendrá algunas restricciones inmediatamente después de la ablación por radiofrecuencia:
-
No conduzca ni maneje maquinaria durante al menos 24 horas después del procedimiento.
-
Puede retomar su dieta normal.
-
No realice ninguna actividad extenuante durante las primeras 24 horas después del procedimiento.
-
No se bañe durante uno o dos días después del procedimiento; puede ducharse.
-
Puede quitarse los vendajes por la noche antes de acostarse.
Qué efectos secundarios puedo tener después de la ablación por radiofrecuencia?
Puede experimentar los siguientes efectos después de la ARF:
-
Adormecimiento de las piernas:
Si tiene algún entumecimiento de las piernas, camine sólo con ayuda. Esto debería durar sólo unas horas y se debe a la anestesia local administrada durante el procedimiento.
-
Ligeras molestias en la espalda:
Esto puede ocurrir cuando desaparece el efecto de la anestesia local y suele durar dos o tres días. Aplique hielo en la zona el día de la intervención y calor húmedo el día siguiente si las molestias persisten. También puede utilizar sus medicamentos habituales para el dolor.
Advertencia de RFA
Si siente un dolor intenso en el lugar de la inyección y nota hinchazón y enrojecimiento, o un aumento de la debilidad en las piernas, haga que alguien le lleve al servicio de urgencias más cercano o llame al 911. Diga al personal de la sala de emergencias que acaba de recibir la RFA. Un médico debe evaluarle para ver si hay hemorragias y complicaciones de la inyección.