La doctora ofrece una visión general de la anorexia nerviosa, un trastorno alimentario potencialmente mortal.
El término anorexia significa literalmente "pérdida de apetito". Sin embargo, esta definición es engañosa, ya que las personas con anorexia nerviosa suelen tener hambre pero rechazan la comida de todos modos. Las personas con anorexia nerviosa tienen un miedo intenso a engordar y se ven a sí mismas como gordas incluso cuando están muy delgadas. Estos individuos pueden intentar corregir este "defecto" percibido limitando estrictamente la ingesta de alimentos y haciendo ejercicio en exceso para perder peso.
Quién padece anorexia?
Los trastornos alimentarios como la anorexia son más comunes en las mujeres que en los hombres, aunque las tasas en los varones están aumentando. El riesgo de desarrollar un trastorno alimentario es mayor en actores, modelos, bailarines y atletas de deportes en los que la apariencia y/o el peso son importantes, como la lucha libre, el boxeo, la gimnasia y el patinaje artístico.
Las personas con anorexia tienden a tener un alto rendimiento, rindiendo mucho en la escuela, los deportes, el trabajo y otras actividades. Suelen ser perfeccionistas con síntomas obsesivos, ansiosos o depresivos. La anorexia nerviosa suele comenzar alrededor de la época de la pubertad, pero puede desarrollarse en cualquier momento.
¿Qué causa la anorexia?
No se conoce la causa exacta de la anorexia, pero las investigaciones sugieren que una combinación de ciertos rasgos de personalidad, emociones y patrones de pensamiento, así como factores biológicos y ambientales podrían ser los responsables.
Las personas con anorexia suelen utilizar la comida y la alimentación como una forma de obtener una sensación de control cuando otras áreas de su vida son muy estresantes o cuando se sienten abrumadas. Los sentimientos de inadecuación, baja autoestima, ansiedad, ira o soledad también pueden contribuir al desarrollo del trastorno. Además, las personas con trastornos alimentarios pueden tener relaciones problemáticas o tener un historial de burlas por su tamaño o peso. La presión de los compañeros y de una sociedad que equipara la delgadez y la apariencia física con la belleza también puede influir en el desarrollo de la anorexia.
Los trastornos alimentarios también pueden tener causas físicas. Los cambios en las hormonas que controlan la forma en que el cuerpo y la mente mantienen el estado de ánimo, el apetito, el pensamiento y la memoria pueden fomentar los trastornos alimentarios. El hecho de que la anorexia nerviosa tienda a darse en familias también sugiere que la susceptibilidad al trastorno podría ser parcialmente hereditaria.
Cuáles son los síntomas de la anorexia?
Los síntomas de la anorexia suelen ser los siguientes:
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Pérdida rápida de peso durante varias semanas o meses
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Continuación de la dieta/alimentación limitada incluso cuando se está delgado o cuando el peso es muy bajo
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Tener un interés inusual por la comida, las calorías, la nutrición o la cocina
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Miedo intenso a ganar peso
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Hábitos o rutinas alimenticias extrañas, como comer a escondidas
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Sentirse gordo, aunque esté por debajo de su peso.
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Incapacidad para evaluar de forma realista el propio peso corporal
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Buscar la perfección y ser muy autocrítico
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Influencia indebida del peso o la forma del cuerpo en la autoestima
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Depresión, ansiedad o irritabilidad
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Períodos menstruales infrecuentes o irregulares, o incluso ausencia de los mismos en las mujeres
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Uso de laxantes, diuréticos o pastillas para adelgazar
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Enfermedad frecuente
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Uso de ropa holgada para ocultar la pérdida de peso
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Hacer ejercicio de forma compulsiva
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Sentirse inútil o sin esperanza
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Retraimiento social
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Síntomas físicos que se desarrollan con el tiempo, incluyendo: baja tolerancia al frío, cabello y uñas quebradizas, piel seca o amarillenta, anemia, estreñimiento, articulaciones inflamadas, caries dental y un nuevo crecimiento de pelo fino por todo el cuerpo
Si no se trata, la anorexia nerviosa puede provocar:
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Órganos dañados, especialmente el corazón, el cerebro y los riñones
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Descenso de la presión arterial, del pulso y de la frecuencia respiratoria
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Pérdida de cabello
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Latidos irregulares del corazón
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Adelgazamiento de los huesos (osteoporosis)
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Desequilibrio entre fluidos y electrolitos
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Muerte por inanición o suicidio
Cómo se diagnostica la anorexia?
Identificar la anorexia puede ser un reto. El secreto, la vergüenza y la negación son características del trastorno. Como resultado, la enfermedad puede pasar desapercibida durante largos períodos de tiempo.
Si los síntomas están presentes, el médico comenzará una evaluación realizando una historia clínica completa y un examen físico. Aunque no existen pruebas de laboratorio para diagnosticar específicamente la anorexia, el médico puede utilizar varias pruebas de diagnóstico, como análisis de sangre, para descartar que la causa de la pérdida de peso sea una enfermedad física, así como para evaluar los efectos de la pérdida de peso en los órganos del cuerpo.
Si no se encuentra ninguna enfermedad física, la persona puede ser remitida a un psiquiatra o a un psicólogo, profesionales de la salud especialmente formados para diagnosticar y tratar enfermedades mentales. Los psiquiatras y psicólogos pueden utilizar herramientas de entrevista y evaluación especialmente diseñadas para evaluar a una persona en busca de un trastorno alimentario.
Cuál es el tratamiento para la anorexia?
La atención de emergencia para la anorexia puede ser necesaria en algunos casos extremos en los que la deshidratación, la desnutrición, la insuficiencia renal o un ritmo cardíaco irregular pueden suponer un riesgo inminente para la vida.
Sea o no de urgencia, el tratamiento de la anorexia es un reto porque la mayoría de las personas que padecen este trastorno niegan tener un problema, o están tan aterrorizadas de tener sobrepeso que pueden oponerse a los esfuerzos para ayudarles a ganar un peso normal. Como todos los trastornos alimentarios, la anorexia requiere un plan de tratamiento integral que se ajuste a las necesidades de cada paciente.
Los objetivos del tratamiento incluyen restablecer el peso saludable de la persona, tratar problemas emocionales como la baja autoestima, corregir patrones de pensamiento distorsionados y desarrollar cambios de comportamiento a largo plazo. El tratamiento suele incluir una combinación de los siguientes métodos de tratamiento:
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Psicoterapia:
Es un tipo de asesoramiento individual que se centra en cambiar el pensamiento (terapia cognitiva) y el comportamiento (terapia conductual) de una persona con un trastorno alimentario. El tratamiento incluye técnicas prácticas para desarrollar actitudes saludables hacia la comida y el peso, así como enfoques para cambiar la forma en que la persona responde a situaciones difíciles.
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Medicación:
Algunos medicamentos antidepresivos, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), podrían utilizarse para ayudar a controlar la ansiedad y la depresión asociadas a un trastorno alimentario. Algunos antidepresivos también pueden ayudar a conciliar el sueño y estimular el apetito. También se pueden ofrecer otros tipos de medicamentos para ayudar a controlar la ansiedad y/o las actitudes distorsionadas hacia la alimentación y la imagen corporal.
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Asesoramiento en materia de nutrición:
Esta estrategia está diseñada para enseñar un enfoque saludable de la comida y el peso, para ayudar a restaurar los patrones normales de alimentación, y para enseñar la importancia de la nutrición y de seguir una dieta equilibrada.
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Terapia de grupo y/o familiar:
El apoyo familiar es muy importante para el éxito del tratamiento. Es importante que los miembros de la familia entiendan el trastorno alimentario y reconozcan sus signos y síntomas. Las personas con trastornos alimentarios podrían beneficiarse de la terapia de grupo, donde pueden encontrar apoyo y discutir abiertamente sus sentimientos y preocupaciones con otras personas que comparten experiencias y problemas comunes.
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Hospitalización:
Como se ha mencionado anteriormente, la hospitalización podría ser necesaria para tratar la pérdida de peso severa que ha provocado desnutrición y otras complicaciones graves de salud mental o física, como trastornos cardíacos, depresión grave y riesgo de suicidio. En algunos casos, puede ser necesario alimentar al paciente a través de una sonda de alimentación o por vía intravenosa.
Cuál es el pronóstico para las personas con anorexia?
La anorexia, al igual que otros trastornos alimentarios, empeora cuanto más tiempo se deja sin tratar. Cuanto antes se diagnostique y trate el trastorno, mejor será el resultado. La anorexia puede ser tratada, permitiendo a la persona volver a un peso saludable; aunque, muchas personas con anorexia niegan tener un problema y rechazan el tratamiento.
Aunque el tratamiento es posible, el riesgo de recaída es alto. La recuperación de la anorexia suele requerir un tratamiento a largo plazo, así como un fuerte compromiso por parte de la persona. El apoyo de los familiares y otros seres queridos puede ayudar a garantizar que la persona reciba el tratamiento necesario.
Se puede prevenir la anorexia?
Aunque quizá no sea posible prevenir todos los casos de anorexia, es útil iniciar el tratamiento en las personas en cuanto empiezan a tener síntomas. Además, enseñar y fomentar hábitos alimentarios saludables y actitudes realistas sobre la comida y la imagen corporal también podría ser útil para prevenir el desarrollo o el empeoramiento de los trastornos alimentarios.
Cuándo debo buscar ayuda para la anorexia?
Si sospecha que usted o alguien que conoce tiene anorexia u otro trastorno alimentario, busque ayuda inmediatamente. Los trastornos alimentarios pueden ser cada vez más peligrosos cuanto más tiempo pasen sin ser tratados. En los casos más graves, los efectos en el cuerpo causados por los trastornos alimentarios pueden ser mortales.
