El médico explica los síntomas de la enfermedad de Alzheimer y cómo cambian esos síntomas a medida que la persona con Alzheimer pasa por las etapas leve, moderada y grave de la enfermedad.
Hay tres fases principales del Alzheimer: leve, moderada y grave. Cada fase tiene su propio conjunto de síntomas.
Alzheimer leve
La primera etapa suele durar de 2 a 4 años. Los síntomas incluyen:
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Tener menos energía y ganas de hacer cosas
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Menos interés por el trabajo y las actividades sociales y pasar más tiempo simplemente sentado, viendo la televisión o durmiendo
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Pérdida de recuerdos recientes, como olvidar conversaciones y acontecimientos que acaban de ocurrir
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Problemas de lenguaje, como problemas para poner sus pensamientos en palabras o para entender a los demás
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Problemas leves de coordinación, como problemas para escribir o utilizar objetos familiares.
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Dificultad para realizar las tareas cotidianas, como seguir una receta o hacer el balance de la chequera.
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Cambios de humor que implican depresión o falta de interés
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Problemas para conducir, como perderse en rutas conocidas
Cuando una persona tiene uno o varios de estos problemas, no significa necesariamente que tenga... Alzheimer. Hay otras condiciones médicas que pueden causar los mismos problemas, tales como:
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Condiciones que afectan al metabolismo, como un problema de tiroides
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Abuso de drogas
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Tomar medicamentos que no funcionan bien juntos
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Enfermedad de Parkinson
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Estrés
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Depresión
Un médico puede comprobar estos síntomas y hacer pruebas para saber si una persona tiene Alzheimer o algo más.
Alzheimer moderado
Es cuando la pérdida de memoria empeora y empieza a causar problemas en la vida diaria. Esta etapa puede durar de 2 a 10 años.
Una persona con Alzheimer moderado puede empezar a olvidar detalles de su vida, como dónde fue al instituto o cuándo se casó. Puede que no reconozca o recuerde a sus familiares y amigos. También pueden olvidar dónde dejan las cosas y no pueden volver sobre sus pasos para encontrarlas.
Otros síntomas en esta etapa pueden ser:
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Habla incoherente
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Problemas para dar con las palabras correctas y usar las incorrectas
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Dificultad para planificar o resolver problemas
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Confusión sobre el tiempo o el lugar. Pueden perderse en lugares en los que han estado antes. Una vez que están allí, pueden no saber cómo o por qué llegaron a ese lugar.
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No vestirse en función del tiempo
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Enfadarse o molestarse con facilidad, a veces arremetiendo contra la familia o los cuidadores
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Problemas para dormir
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Vagabundeo
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Delirios, como pensar que un cuidador está tratando de hacerles daño
Algunas personas con alzhéimer moderado también son más conscientes de que están perdiendo el control de sus vidas, lo que puede hacer que se sientan aún más frustradas o deprimidas.
Alzheimer grave
La tercera etapa, también conocida como Alzheimer tardío, es la más grave. Suele durar de 1 a 3 años.
Las personas que se encuentran en esta fase pueden presentar algunos o todos estos síntomas:
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Gran confusión sobre lo que está en el pasado y lo que sucede ahora
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No pueden expresarse, recordar o procesar la información
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Problemas para tragar y controlar su vejiga y sus intestinos
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Pérdida de peso, convulsiones, infecciones de la piel y otras enfermedades
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Cambios de humor extremos
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Ver, oír o sentir cosas que realmente están ahí, llamadas alucinaciones
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No pueden moverse fácilmente por sí mismos
Alzheimer o envejecimiento normal?
Casi todo el mundo tiene pequeños fallos de memoria al envejecer. Si alguien olvida un nombre o por qué entró en la cocina, no significa que tenga Alzheimer.
El principal problema que define a la enfermedad es la dificultad para planificar y realizar las tareas cotidianas, como pagar las facturas, gestionar la chequera o utilizar los electrodomésticos familiares de la casa.
Lo que puede hacer
Si crees que notas los signos del alzhéimer en ti o en un ser querido, lo mejor es que hables con un médico. Ellos pueden informarle de lo que significan los síntomas y de las opciones que tiene para tratarlos. Existen nuevos avances que pueden ayudar a la detección temprana y al tratamiento. Uno de ellos es tan sencillo como un análisis de sangre para determinar la presencia o ausencia de proteínas que pueden indicar que hay placas asociadas al Alzheimer en el cerebro.