Los residentes de Shanghái, la capital financiera y la ciudad más poblada de China, han acudido a Internet para exponer sus quejas sobre la estrategia gubernamental de cero COVID, que ha mantenido a muchos de ellos encerrados en sus residencias durante un mes.
Los residentes de Shanghái se quejan de los encierros de COVID
Por Ralph Ellis
30 de abril de 2022 -- Los residentes de Shanghái, la capital financiera y la ciudad más poblada de China, han acudido a Internet para expresar sus quejas sobre la estrategia gubernamental de cero COVID, que ha mantenido a muchos de ellos encerrados en sus residencias durante un mes.
Han acudido a notas de WeChat y Weibo, la versión china de Twitter, para decir que están atrapados dentro, enfrentándose a la falta de alimentos, transporte y acceso a la atención médica. En China se tolera poco la disidencia, y las denuncias están siendo rápidamente retiradas por los censores del gobierno, aunque siguen circulando copias en otras plataformas de medios sociales.
El virus no nos matará, pero el hambre sí, dice un hombre en un vídeo ahora bloqueado titulado Voces de abril en el que varios residentes de Shanghai expresan su desesperación, informó Al Jazeera.
¿Puede darme un antitérmico, por favor? Mi hijo tiene mucha fiebre, pero los hospitales no nos dan antipiréticos, decía una mujer en el vídeo.
Mientras que otros países intentan convivir con el COVID y gestionarlo al tiempo que abren sus economías, China ha empleado una estrategia de COVID cero, que consiste en redoblar los esfuerzos con herramientas como el rastreo de contactos, las pruebas masivas y los cierres para reducir las cifras de COVID-19 a cero.
La estrategia se ha utilizado de forma agresiva en Shangai, una ciudad de unos 25 millones de habitantes, después de que el número de casos se disparara debido a la subvariante Omicron, altamente transmisible. El gobierno dividió la ciudad en secciones y aplicó medidas de control basadas en el riesgo de transmisión.
El viernes, las autoridades afirmaron que el recuento de casos y las muertes por COVID están disminuyendo en general y que aproximadamente la mitad de la población de la ciudad vive ahora en zonas de bajo riesgo y puede salir de sus casas, informó Reuters.
Sin embargo, muchas personas siguen encerradas. El sábado, las autoridades afirmaron que Shanghái seguía teniendo alrededor de 16.000 zonas selladas en las que 4 millones de personas no podían salir de sus casas, informó Reuters. En otras zonas, 5,4 millones de personas no podían salir de sus recintos.
"El control de la epidemia y de la prevención en la ciudad sigue estando en un estado crítico, y la tendencia sigue siendo que hay que reforzar los controles", dijo Zhao Dandan, subdirector de la comisión de salud de Shanghai, según Reuters.
Una de las medidas más llamativas para controlar la circulación son las vallas de alambre y las chapas metálicas que se instalan para bloquear las carreteras y las entradas de las comunidades residenciales y, en ocasiones, incluso las entradas de los edificios de apartamentos, informó The Associated Press. Las barreras suelen dejar sólo una pequeña entrada que se puede vigilar fácilmente.
Las barreras han enfurecido a las personas que se encuentran atrapadas en sus edificios o barrios. Según Associated Press, un vídeo mostraba a los residentes de un edificio de apartamentos derribando una valla y buscando después al guardia de seguridad que creían que la había colocado.
Las barreras se están utilizando en otras ciudades en cierta medida y también se instalaron durante los primeros días de la pandemia en Wuhan, donde COVID apareció por primera vez a finales de 2019.
