Proteína
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Puede ser difícil comer suficiente de este importante combustible para tu cuerpo si eres vegetariano o vegano, especialmente si eres un atleta o muy activo. La soja, también llamada haba de soya, puede ayudar. A diferencia de la mayoría de las proteínas vegetales, la soja contiene los nueve aminoácidos esenciales que necesitas para tener músculos y huesos sanos. Tu cuerpo no puede fabricar esos compuestos por sí mismo, por lo que los no vegetarianos los obtienen principalmente de las proteínas animales como la carne de vacuno, el pollo y los huevos.
Dieta saludable para el corazón
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Sólo entre el 10% y el 15% de la grasa total de la soja es saturada. Otras fuentes de proteínas, como la carne picada o las chuletas de cerdo, tienen mucho más de este tipo de grasa, que suele volverse sólida a temperatura ambiente y que puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas. Cambiar tus platos de carne por productos de soja como el tofu puede beneficiar a tu garrapata.
Las grasas buenas
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La mayoría de las grasas de la soja son poliinsaturadas, incluyendo importantes grasas omega-6 y omega-3. Como parte de una dieta equilibrada, pueden ser buenas para el corazón y ayudar a reducir las posibilidades de padecer ciertas enfermedades. Otras fuentes de grasas buenas son los frutos secos, las semillas, el pescado y los aceites vegetales.
Cero colesterol
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Al igual que todas las verduras y los cereales, los alimentos de soja no contienen colesterol por naturaleza. Varios estudios parecen sugerir que la simple adición de proteína de soja a su dieta puede ayudar a reducir su colesterol LDL, o malo, entre un 4% y un 6%. Así que pruébala en lugar de las opciones menos saludables.
Más fibra
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La soja tiene unos 10 gramos de fibra por taza. Compárelo con los 0 gramos de las proteínas animales como el bistec, el pollo y el pescado. Además, el alto contenido de fibra de la soja puede ayudar a reducir el colesterol que se obtiene de otros alimentos. Y, por supuesto, la fibra le ayuda a hacer caca con regularidad.
Montones de potasio
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Una taza de soja tiene la friolera de 886 miligramos de potasio. Esto es el doble de lo que contiene un plátano de tamaño medio, y hasta un tercio de lo que el cuerpo necesita para todo el día. Esto podría ser importante porque muchos estadounidenses no consumen suficiente cantidad de este mineral, que el cuerpo necesita para casi todo, incluyendo el latido del corazón, el filtrado de residuos por los riñones y el funcionamiento de los nervios.
Hierro
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Los vegetarianos deben duplicar su consumo de hierro porque su cuerpo no lo absorbe tan bien de las fuentes vegetales. Una taza de soja contiene unos 9 miligramos de hierro, que, entre otras cosas, ayuda a la sangre a transportar el oxígeno a todo el cuerpo. Los hombres necesitan unos 8 miligramos de hierro al día, y las mujeres 18 miligramos.
Aliviar la presión arterial
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Hacer de la soja una parte habitual de tu dieta puede ayudarte a evitar la presión arterial alta, también conocida como hipertensión. Para empezar, la soja contiene muchas proteínas y pocos carbohidratos, una mezcla que parece ayudar a reducir la presión arterial. Además, la soja en sí misma podría ayudar a reducir la presión arterial sistólica -la cifra más alta- entre 2 y 5 puntos. Puede que no parezca mucho, pero podría reducir las probabilidades de sufrir un ictus hasta en un 14%.
Huesos más fuertes
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Algunas mujeres pueden perder mucha masa ósea después de la menopausia. Eso hace que sus huesos sean más frágiles y tengan más probabilidades de romperse. Los médicos suelen recetar estrógenos para tratar éste y otros síntomas de la menopausia. Las isoflavonas, una sustancia química vegetal común en los alimentos de soja, parecen imitar los efectos del estrógeno. Algunas investigaciones sugieren que las isoflavonas pueden ayudar a fortalecer los huesos de las mujeres que han tenido la menopausia.
OMG
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La soja es el cultivo número 1 del mundo de organismos genéticamente modificados (OGM). Eso significa que los científicos cambiaron algunos de los genes de la semilla, a menudo para aumentar los nutrientes o proteger la planta contra una enfermedad o un insecticida. Algunas personas se oponen a los alimentos transgénicos, en parte porque piensan que pueden no ser seguros. La FDA, que regula todos los alimentos modificados genéticamente, afirma que investigaciones creíbles han demostrado que son tan seguros como las plantas cultivadas de forma convencional.
Cáncer de mama
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La soja parece ayudar a proteger contra el cáncer de mama en las mujeres, sobre todo si se consume mucho en la infancia y la adolescencia. Eso puede reducir hasta la mitad las probabilidades de padecer cáncer de mama. Incluso algunas mujeres que comieron más soja sólo en la edad adulta tuvieron menos probabilidades de padecer cáncer de mama. Los científicos creen que la isoflavona, el fitonutriente de la soja, puede ayudar a reducir los tumores cancerosos.
Cáncer de próstata
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Es el segundo cáncer más frecuente en los hombres de todo el mundo. En Asia, donde la gente come mucha más soja, los hombres tienen menos probabilidades de padecer cáncer de próstata. Y sus probabilidades de padecer la enfermedad parecen disminuir cuanto más soja comen. Los científicos creen que las isoflavonas, principalmente dos llamadas genisteína y daidzeína, ralentizan o detienen el crecimiento de los tumores en la próstata.