¿Qué es?
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Es posible que también oigas que se llama la dieta del "hombre de las cavernas". Cuando sigues este plan, intentas imitar lo que comían los humanos durante el Paleolítico, que comenzó hace unos 2,6 millones de años. Comerás los tipos de alimentos que nuestros antepasados podrían haber cazado, pescado y recolectado, y evitarás los alimentos que no eran comunes hasta que comenzó la agricultura. También beberás mucha agua e intentarás estar activo todos los días.
La premisa paleo
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La idea que subyace a la paleo es que los alimentos altamente procesados de hoy en día no son buenos para el ser humano y conducen a la obesidad, la diabetes y los problemas cardíacos. Hay pruebas de que una dieta más sencilla, como la que llevaban los primeros humanos, podría ser mejor para la salud...
Qué comer
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Lo que la gente comía durante el Paleolítico tenía que ver con el lugar en el que vivían, así que no hay un único plan de comidas detallado que vayas a seguir. En general, intentarás ceñirte a productos locales, orgánicos y no transgénicos, como frutas, verduras, frutos secos y semillas, además de pescado y carne de vacuno alimentado con pasto. Todo ello se traduce en una dieta rica en proteínas y fibra, que contiene una cantidad media de grasa y es baja en carbohidratos.
Alimentos aptos para Paleo
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Una dieta paleo puede ser muy diferente de cómo comes ahora. Por ejemplo, la carne, el pescado y los productos que comas deben ser frescos en lugar de congelados o enlatados. Otros alimentos que están bien son los huevos, el aceite de coco, el aguacate, las aceitunas y algunos tubérculos ricos en nutrientes, como los boniatos. También se permiten pequeñas cantidades de miel.
Alimentos que hay que evitar
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Tienes que mantenerte alejado de los productos lácteos y de los granos de cereales como el trigo y la avena. Pero eso no es todo. Debes mantenerte alejado de las patatas y las legumbres como las judías, los cacahuetes y los guisantes. También están prohibidos el azúcar refinado, la sal y los alimentos muy procesados.
Un refuerzo del sistema inmunitario
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Una dieta con mucha fruta y verdura puede reducir las probabilidades de padecer enfermedades del corazón, incluidos el infarto y el ictus. Puede ser una buena fuente de fibra, que puede ayudar a reducir las probabilidades de padecer obesidad o diabetes tipo 2. Además, se obtienen más vitaminas A, C y E. Estos nutrientes refuerzan el sistema inmunitario -la defensa del cuerpo contra los gérmenes- y pueden ayudar a prevenir el cáncer y otras enfermedades.
Pérdida de peso
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Pásate a la dieta paleo y puede que te resulte más fácil bajar los kilos de más. Los tipos de alimentos que comas te llenarán y te harán sentir menos hambre a lo largo del día. Se necesitan más estudios para ver cómo la dieta paleo se compara con otras a largo plazo.
Ayuda para el corazón
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La sal está prohibida en la dieta paleo. Los estudios demuestran que reducir el sodio puede disminuir la presión arterial. Además, cuando renuncias a los carbohidratos refinados, también ayudas a proteger tu corazón a largo plazo. Comer demasiados carbohidratos simples, como los que se encuentran en el azúcar, la pasta y el pan blanco, está relacionado con las enfermedades del corazón.
Control del azúcar en la sangre
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Una dieta paleo podría ayudar a prevenir la diabetes. Si ya la tienes, los tipos de alimentos que comerás podrían controlar mejor tu azúcar en sangre y mejorar la forma en que tu cuerpo responde a la insulina. Algunas investigaciones demuestran que ayuda más que una dieta baja en sal y en grasas que incluya cereales integrales y legumbres. Podrías ver estos beneficios después de tan sólo 3 meses. Pero consulta siempre con tu médico antes de hacer un cambio drástico en tus hábitos alimentarios.
¿Demasiadas grasas saturadas?
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La dieta paleo favorece las proteínas, la mayoría de las cuales provienen de productos animales. Si no te ciñes a los cortes magros de carne, podrías ingerir demasiadas grasas saturadas. Eso puede provocar problemas de corazón. Si tienes un problema de salud, como una enfermedad renal, y necesitas vigilar la cantidad de proteínas que consumes, una dieta paleo puede no ser segura.
Baja energía
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Los carbohidratos son la principal fuente de combustible de tu cuerpo... Una dieta paleo restringe tus carbohidratos a alrededor del 23% de tu dieta total, en comparación con el 45% al 65% que sugieren los expertos. Si llevas un estilo de vida activo, esta disminución extrema de los carbohidratos puede cansarte.
Proteja sus huesos
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El calcio y la vitamina D son nutrientes que pueden ser difíciles de obtener en una dieta paleo. Los necesitas para prevenir enfermedades como la osteoporosis, el raquitismo y las fracturas óseas. Algunas investigaciones también demuestran que los productos lácteos bajos en grasa, que no puedes comer en la dieta paleo, ayudan a reducir la cantidad de inflamación en tu cuerpo. Si te decides por la dieta paleo, habla con tu médico sobre la conveniencia de empezar a tomar suplementos.
Desafíos de una dieta paleo
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A algunas personas les resulta difícil seguirla durante mucho tiempo. Muchos alimentos comunes como la tarta de cumpleaños, la pizza o incluso un sándwich de mantequilla de cacahuete no están permitidos. Es posible que te encuentres diciendo "no, gracias" muchas veces cuando visitas a tus amigos. Y algunos alimentos saludables para el corazón, como los cereales integrales, están prohibidos.
Parcialmente Paleo
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Te gusta la idea de la paleo pero no quieres comprometerte con el plan completo? Hay formas de hacer que algunos aspectos de esta dieta formen parte de tu vida diaria. Por ejemplo, puedes intentar tomar proteínas y un poco de grasa en cada comida o tentempié. También puedes incluir más verduras y frutas de colores y limitar la cantidad de alimentos precocinados y tentempiés que comes.