De los archivos del médico
¿Se ha propuesto el 1 de enero "comer bien", sea lo que sea? Deje de intentar revisar toda su dieta en un día. Resuélvase a pensar en lo pequeño y podrá alcanzar cualquier objetivo dietético, un paso a la vez. ¿Por qué no empezar con estos sencillos consejos?
Propósito dietético de año nuevo nº 1: ir despacio
Te has propuesto introducir más fibra en tu dieta este año? Tal vez más pescado o fruta fresca? Cualquier cambio en la dieta es más fácil si das pasos lentos y pequeños. Por ejemplo:
Comprométete a añadir una pieza de producto a tu bolsa de comida diaria.
Designa un día como día del pescado.
Envasa una sola porción de tu cereal integral favorito y tómala como tu merienda de media mañana.
Propósito dietético de año nuevo nº 2: agua, agua, en todas partes
Agua: Es barata, no tiene grasa y le da a tu cuerpo un impulso saciante. ¿Te parece desalentadora la idea de tomar ocho vasos al día? Piensa en pequeño:
Bebe un vaso a primera hora de la mañana, antes de lavarte los dientes.
Te sientes tentado por más refresco? Otro vaso de vino? Bebe primero un vaso de agua con un chorrito de tu bebida favorita.
Resuélvete a beber hoy un vaso de agua más de los que tomaste ayer.
Propósito dietético de año nuevo nº 3: ir a por el oro... y el rojo... y el morado
Los productos de colores están repletos de compuestos vegetales que combaten las enfermedades, así que cuando hagas la compra, busca el arco iris.
Designa un color al día. Quizá los lunes sean amarillos, con pomelo, manzanas doradas o maíz como protagonistas de las comidas, mientras que los martes sean morados, con ciruela y berenjena.
Involucra a los niños y apuesta por una temática: Prepara una pizza verde con pimientos esmeralda y alcachofas, o un chili con productos rojos.
Varía el arco iris: coge una fruta o verdura nueva para ti la próxima vez que hagas la compra.
Propósito dietético de año nuevo nº 4: hacer frente al consumo de alimentos sin sentido
Estás charlando con tus amigos en la mesa o viendo un DVD... y no paras de picar. Prueba estos consejos para refrenar los antojos:
Métete en la boca un chicle o un caramelo de menta sin azúcar.
Cepíllate los dientes o utiliza el hilo dental.
Presta atención... mira cada pieza de comida que piensas comer.
Ocupa tus manos con un vaso de agua, una taza de té o limpiando la mesa.
Propósito dietético de año nuevo nº 5: apilar las probabilidades a tu favor
No te olvides de ayudarte a ti mismo a tener éxito, y de pedir ayuda cuando la necesites.
Hazte amigo de un amigo o familiar con propósitos de dieta y pérdida de peso. Luego compartid vuestras ideas, planes y éxitos con regularidad.
Deja las tentaciones -helados, patatas fritas, refrescos- en el supermercado. Prométete a ti mismo que vas a satisfacer los antojos sólo fuera de casa, en porciones de una sola ración.
Socializa con eventos no alimentarios. Reúne a tus amigos en el parque, de excursión o en el cine.
Propósito extra de la dieta de año nuevo: Cuida tu cuerpo
Prevención: Es mucho menos desalentador que tratar una enfermedad crónica, así que haz las pequeñas cosas que mantienen tu cuerpo próspero.
Ponte en movimiento 30 minutos al día la mayoría de los días. Salga a pasear, dé un buen repaso al coche, vaya de excursión. ¡Cualquier cosa que haga bombear la sangre es válida!
Hazte esas pruebas que sabes que necesitas. Controles de colesterol, exámenes de próstata, pruebas de Papanicolaou... adelántate al juego manteniéndote sano.
Duerme todo lo que necesites. El sueño ayuda a que el cuerpo y el alma se recarguen, se mantengan sanos y hagan frente al estrés.
Da suficientes pasos y alcanzarás cualquier objetivo. Resuélvete a hacer algunos pequeños propósitos dietéticos este año y luego sólo tienes que ver lo lejos que llegarás.