Información nutricional
Tamaño de la ración 1 cucharada Calorías 25 % del valor diario* Grasas totales 1 g 2% Grasas saturadas 0 g 0% Grasas trans 0 g Colesterol 0 mg 0% Sodio 57 mg 2% Potasio 0 mg 0% Carbohidratos totales 2 g 1% Fibra dietética 1 g 4% Azúcar 0 g Proteínas 1 g 2%
*Los valores diarios porcentuales se basan en una dieta de 2.000 calorías. Sus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de sus necesidades calóricas.
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Vitamina C 0%
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Hierro 0%.
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Vitamina B6 0%
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Magnesio 0%
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Calcio 1%.
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Vitamina D 0%.
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Cobalamina 0%
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Vitamina A 0%
El humus, ese cremoso dip que procede de Oriente Medio, tiene fama de ser un alimento limpio y saludable. Y lo merece.
Todos los ingredientes principales son superalimentos por derecho propio. Lleva garbanzos, pasta de sésamo (tahini), ajo y aceite de oliva en la mayoría de las versiones tradicionales.
Lo hecho en casa es un éxito
Es cómodo comprar un envase de plástico de hummus en la tienda, pero te sorprenderá lo fácil que es prepararlo en casa. Te ahorrarás unos cuantos dólares y sabrás exactamente qué contiene tu hummus.
Sólo tienes que combinar 1 lata de garbanzos, 1/4 de taza de tahini, ajo al gusto (prueba con 1 ó 2 dientes), 2 cucharadas de aceite de oliva y el zumo de medio limón en un procesador de alimentos o una batidora, y batir hasta que quede suave.
Consejo:
Puedes ajustar las proporciones de los ingredientes al gusto, dependiendo de lo fuerte que quieras que sea el sabor y de lo espeso que te guste el hummus. Empieza con menos líquido del que creas que vas a necesitar. Siempre puedes añadir más a medida que lo mezcles, pero si añades demasiado, tendrás una salsa, no un dip.
Ingredientes saludables
Los garbanzos, ingrediente principal del hummuss, te aportan proteínas, carbohidratos buenos para la salud y fibra. Al igual que otros miembros de la familia de las legumbres, suelen encabezar las listas de los alimentos más saludables del mundo.
Comer más alimentos vegetales es bueno. Las personas que lo convierten en un hábito son menos propensas a contraer ciertas enfermedades. Por supuesto, hay muchas cosas que afectan a la salud -no hay alimentos milagrosos-, pero un poco de humus no hace daño.
El ajo y el aceite de oliva son dos de los ingredientes más conocidos y estudiados. Ambos forman parte de la famosa dieta mediterránea. Estos sabrosos condimentos le dan al hummus su gran sabor.
Control de las porciones
Hay un montón de bondades nutricionales en cada cucharada de hummus. También hay muchas calorías: 408 por taza.
No te vas a comer una taza entera de hummus, ¿verdad? Como todo lo demás, hay que vigilar el tamaño de la porción. Puedes tomar demasiado de algo bueno.
Sé un mejor cazo
El compañero clásico del hummus es el pan de pita, normalmente en cuñas hechas de harina blanca.
En su lugar, acompañe su salsa con un pan de pita 100% integral. Añadirás fibra y vitaminas a tu almuerzo.
Y aún mejor: Acompaña tu hummus con verduras como rodajas de pepino, zanahorias y pimientos rojos. Obtendrás aún más nutrientes sin añadir tantas calorías como el pan, las patatas fritas o las galletas.
Evita un derrame de aceite
Si pides hummus en un restaurante, es probable que esté aderezado con aceite de oliva, lo que añade otras 124 calorías por cucharada. Un hummus bien hecho es lo suficientemente rico y delicioso como para valerse por sí mismo. Pídele a tu camarero que te guarde lo más resbaladizo.
Muévete, Mayo
El humus no es solo para mojar. También es un buen producto para untar en los sándwiches.
Pruébalo en lugar de la mayonesa. Obtendrás más proteínas y fibra por la mitad de las calorías que te aportaría la mayonesa.
El humus añade 1 gramo de grasa a tu fiambrera, frente a los 5 gramos de la mayonesa normal.