De los archivos del doctor
Se le ha llamado tanto el adolescente más viejo del mundo como uno de los filántropos más generosos del país. T. Denny Sanford, que empezó a trabajar a los 8 años, alcanzó el suficiente éxito personal y financiero en los negocios como para figurar durante varios años en la lista de Forbes de los estadounidenses más ricos. Ahora, con 75 años, lleva seis años dedicando su energía y su ética de trabajo a una causa diferente: la salud.
La donación de 400 millones de dólares que Sanford hizo en 2007 a lo que ahora se llama Sanford Health fue la mayor donación hecha a un sistema sanitario estadounidense (Sanford Health es patrocinador del médico). Además de convertir a Sanford en el mayor sistema sanitario sin ánimo de lucro del país, Sanford tiene la vista puesta en una serie de problemas de salud que afectan a los niños.
Una de esas iniciativas es el Proyecto Sanford. Su objetivo es encontrar una cura para la diabetes de tipo 1 en vida de Sanford. "Ves a estos niños que se pinchan 15 veces al día con una aguja y el dolor que padecen", dice Sanford, "y puedes identificarte con ello. La diabetes es, por desgracia, una de esas situaciones que no reconocemos porque, por lo demás, las personas actúan con normalidad. Pero eso es sólo si reciben la atención adecuada y toman los medicamentos apropiados".
Sanford también está trabajando con el médico en un proyecto conjunto para enseñar a los niños sobre alimentación y fitness, llamado Fit Kids. El sitio está dirigido a niños de tres grupos de edad y ayudará a los niños y adolescentes a aprender sobre la alimentación, la forma física, el estado de ánimo y la recarga. "Los niños pueden tener un efecto muy positivo en toda su familia", dice Sanford. "Así que eso es realmente lo que el médico y Sanford Health pueden poner en común".
El interés de Sanford por la salud fue motivado en parte por su familia. A los 4 años, perdió a su madre por un cáncer de mama, y cuando tenía 21 años, su padre murió de una enfermedad cardíaca. "Creo que la salud es un área en la que se puede marcar la mayor diferencia, y eso es lo que intento hacer", dice.
Sanford Health está construyendo ahora una red de Clínicas Infantiles Sanford en todo el mundo en comunidades que carecen de atención pediátrica. A Sanford también le entusiasma la idea de ayudar a curar la diabetes de tipo 2, porque puede estar causada por condiciones ambientales (mala alimentación y falta de ejercicio) y, por tanto, puede curarse con condiciones ambientales (más ejercicio y mejor alimentación). "Es mucho más fácil de curar", dice. "Podemos ocuparnos de ello en un abrir y cerrar de ojos".
Sanford dice que al principio se involucró en la atención sanitaria infantil "por los niños". Pero cuando conoces al personal de pediatría en los hospitales y en las escuelas [te das cuenta] de que no es sólo un trabajo para ellos, es una pasión salvar vidas y ayudar a estos pequeños. Los niños no tienen voz y nosotros intentamos dársela".
Sus numerosas donaciones le hicieron entrar en otra lista de Forbes en 2010: la de los donantes más generosos del país, en la que ocupó el puesto número 3.
