Vivir lo mejor posible con la PQRAD
Medically Reviewed by Neha Pathak, MD on December 09, 2021 1 / 12
Vivir mejor con la PQRAD
La poliquistosis renal autosómica dominante, o PQRAD, provoca quistes renales dolorosos. Puedes tener dolor de espalda, dolores de cabeza, sangre en la orina, presión arterial alta e infecciones y cálculos renales. Hay buenas noticias: Una dieta saludable y un estilo de vida activo pueden marcar una gran diferencia en cómo te sientes cada día.
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Haz ejercicio y mantente en forma
Con la PQRAD, el ejercicio regular aumenta la fuerza y la resistencia muscular. También te ayuda a controlar la presión arterial. Intenta caminar, montar en bicicleta o nadar durante unos 30 minutos la mayoría de los días de la semana. Bebe mucha agua. Evita los deportes de contacto y cosas como la equitación. Una caída o un golpe brusco podrían dañar tus riñones.
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Mantente hidratado
Bebe agua u otros líquidos durante todo el día para disminuir el riesgo de cálculos renales. El agua mantiene el buen funcionamiento de los riñones. También disminuye la vasopresina, una hormona que favorece el crecimiento de los quistes renales. Lo mejor es el agua, pero cualquier líquido bajo en sal, sin cafeína ni azúcar, debería mantenerte bien hidratado.
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Come alimentos saludables
Lo que comas no evitará los quistes renales. Pero una buena nutrición te ayuda a combatir las infecciones y a procesar los desechos a través de los riñones. Consigue mucha fibra en verduras frescas, frutas y cereales integrales. Reduzca el azúcar, los alimentos salados y las carnes rojas. Elige las grasas saludables de las nueces, el aceite de oliva, las semillas de lino o el pescado de agua fría como el salmón.
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Consigue una unidad TENS para el dolor
Tiene dolor crónico de espalda o de costado por quistes renales? La estimulación nerviosa eléctrica transcutánea, o TENS, es un tratamiento que puedes hacer en casa. Te aplicas unas pequeñas almohadillas en la piel y el aparato envía una leve señal eléctrica a la zona que te duele. Puede aliviar tus dolores sin apenas efectos secundarios.
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Prueba con compresas de calor o frío
Las compresas de calor o frío pueden aliviar un brote de dolor repentino que podría aparecer con la PQRAD. Aplique frío con bolsas de hielo, una bolsa de guisantes congelados o un paño empapado en agua fría. Si el calor te alivia el dolor, utiliza una almohadilla térmica o una toalla húmeda y caliente. No utilices ninguno de los dos durante más de 15 minutos seguidos.
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No fumes
Fumar tabaco eleva la presión arterial. Los fumadores con PQRAD tienen más posibilidades de sufrir un ataque al corazón o un ictus. Fumar también aumenta la cantidad de proteínas en la orina, lo que puede empeorar el daño renal. Si fumas, pide ayuda para dejar el hábito.
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Duerme mucho
Dormir al menos 7 u 8 horas cada noche te ayudará a sentirte mejor en general. El sueño le ayuda a controlar el peso, la presión arterial y el azúcar en la sangre. Puede mejorar su estado de ánimo y su perspectiva. Cuando has dormido bien, piensas con más claridad. Esto te ayuda a evitar resbalones o accidentes que podrían causar una dolorosa lesión.
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Manténgase en un peso saludable
Con el tiempo, la PQRAD puede causar daño renal y enfermedad renal. Esto puede ocurrir antes si tienes sobrepeso u obesidad. Esto se debe a que los kilos de más hacen que los riñones trabajen más. La obesidad también eleva la presión arterial, lo que aumenta el esfuerzo de los riñones. Adelgaza hasta alcanzar un peso saludable para proteger tus riñones.
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Controla el estrés
Todo el mundo tiene estrés de vez en cuando. Pero si nunca deja de serlo, su presión arterial podría dispararse. La presión arterial alta es una complicación común de la PQRAD. Puede provocar daños en los riñones. El yoga y el tai chi son excelentes formas de controlar el estrés.
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Disfruta del sexo
La PQRAD puede afectar a tu vida sexual. Puede tener dolor, sentirse cansado, preocuparse por una lesión durante el sexo o encontrarlo incómodo. Hable con su médico. Los tratamientos y el asesoramiento pueden ayudar con la mayoría de los problemas sexuales causados por la PQRAD. El sexo también es una buena forma de controlar el estrés que supone vivir con una enfermedad crónica.
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Háblalo
La PQRAD puede provocarte ansiedad, depresión o miedo sobre tu futuro. Hable con un profesional para aprender a manejar sus sentimientos sobre la enfermedad. Puede hablar de ellos con su médico o pedir que le remitan a un consejero o terapeuta. Los grupos de apoyo a pacientes también pueden ayudar. Te ponen en contacto con otras personas que tienen PQRAD.