Un Komondor es un perro grande y blanco con raíces húngaras. Son guardianes del ganado con un distintivo pelaje largo y acordonado. El plural de Komondor es "komondorok" en húngaro, pero no es un término comúnmente utilizado por los angloparlantes.
Debido a su largo pelaje y a su cuerpo peludo, a menudo se les llama "perros fregona".
Los komondors son perros protectores y vigilantes. También son perros amistosos, sociales y entrenables, con grandes necesidades de aseo.
Características de un Komondor
Los komondor son perros grandes con profusos cordones de color blanco que adornan su cuerpo. Su tamaño y complexión los convierten en populares perros protectores. El tamaño medio del Komondor para los machos es de 27,5 o más pulgadas de altura y 25,5 pulgadas para las hembras.
Los Komondor machos pesan alrededor de 100 libras o más, y las hembras 80 libras o más. La vida útil estimada del Komondor es de 10 a 12 años.
Físico
Los Komondor tienen un cuerpo poderoso, ya que solían ser los guardianes de los rebaños húngaros. Su gran cuerpo está cubierto de largas cuerdas blancas. También se les puede identificar por su pesada estructura ósea, su pecho profundo y sus numerosos músculos.
Los komondors son ligeros y ágiles a pesar de su tamaño.
Sus cordones blancos les hacen destacar entre otras razas de perros. Lo bueno es que su pelaje se desprende mucho menos, pero tienen grandes necesidades de aseo.
Los cordones blancos y fríos de estos perros no son sólo para aparentar. Estos cordones protegen a los Komondor de las duras condiciones climáticas y de los depredadores con dientes afilados. Sus cordones también les ayudan a mezclarse con un rebaño de ovejas para sorprender a los depredadores cuando atacan.
Social
Los komondors son cariñosos con sus dueños, pero pueden no ser demasiado amistosos con los niños y otros perros. Son perros juguetones con niveles de adaptabilidad moderados.
Su Komondor tiene un alto nivel de energía, por lo que debe entrenarlo frecuentemente con diferentes ejercicios.
Son perros súper vigilantes y valientes que no rehúyen atacar a razas de perros grandes.
El cuidado de los komondors
Los komondors tienen grandes necesidades de aseo, ya que tienen un pelaje largo y acordonado. Se espera que su pelaje se agrupe o forme placas cada 9 o 10 meses, por lo que hay que separar estos mechones o placas. Los mechones se convierten en cordones.
Los cordones de los Komondors pueden ensuciarse u oler mal. Por lo tanto, debe bañar a su mascota con champú para perros para mantenerlos limpios. Al final de cada baño, retire el champú adecuadamente y seque los cordones apretándolos con una toalla.
También puedes dejar a tu Komondor bajo el ventilador durante la noche. El secado de su pelaje es esencial, ya que de lo contrario puede oler mal y decolorarse.
Los Komondors también requieren una rutina de corte de uñas. También se recomienda cepillar los dientes del perro a diario para prevenir cualquier tipo de problema dental. Asegúrese de utilizar un cepillo de dientes suave y pasta de dientes para perros.
Tu Komondor también puede infestarse de pulgas y gusanos del corazón, lo que puede provocar varias enfermedades. El Companion Animal Parasite Council recomienda la prevención de garrapatas, gusanos del corazón y pulgas durante todo el año.
Vacunación
Su Komondor necesitará un conjunto básico de vacunas para mantenerse a salvo de enfermedades como la rabia y la DHPP (moquillo, hepatitis, parainfluenza y parvovirus). También pueden necesitar vacunas no esenciales para enfermedades como la leptospirosis, la enfermedad de Lyme, la tos de las perreras, etc.
Recuerde que el calendario de estas vacunas varía en función de la edad de su perro, por lo que debe concertar citas periódicas con su veterinario.
Ejercicio
Los komondors son perros atléticos que necesitan hacer ejercicio regularmente para mantenerse sanos y felices. Puede sacarlos a pasear en un patio vallado. También les gusta jugar con otros perros de la casa. Los paseos regulares mantienen a los komondors en forma.
Es mejor no llevar a su Komondor a un parque público o de perros. Esto se debe a que estos perros son muy vigilantes y pueden reaccionar mal ante perros extraños. También tienen un alto instinto de protección que puede hacer que vean a otro grupo de perros como una amenaza.
Adiestramiento
Los komondors necesitan una socialización temprana y clases de adiestramiento adecuadas, como el entrenamiento de obediencia, cuando son jóvenes. Necesitan entender que usted es su dueño y que tiene que hacerle caso.
En caso de un adiestramiento inadecuado, el cachorro de Komondor puede volverse excesivamente protector y comportarse de forma agresiva o volverse demasiado necesitado.
Nutrición
Los Komondor tienen poco apetito, por lo que no comen mucho. A estos perros les gusta todo tipo de comida para perros, pero asegúrese de que es de alta calidad y apropiada para la edad de su Komondor.
Es mejor evitar dar a su Komondor huesos cocidos y comidas ricas en grasas.
Consulta siempre a tu veterinario para planificar una dieta bien equilibrada para tu perro en función de la edad y las necesidades nutricionales diarias.
Problemas de salud a tener en cuenta con los komondors
Los komondors son una raza de perro fuerte y saludable con pocos o ningún problema de salud, pero al igual que otros perros, son susceptibles de sufrir hinchazón (o dilatación gástrica-volvulus), displasia de cadera, problemas oculares como entropión y cataratas, e infecciones por parásitos y hongos.
Displasia de cadera
Se trata de una afección de la cadera común en los perros que se refiere al desplazamiento de la articulación de la cadera. Cuando la articulación se desplaza, ambos huesos se rozan y rechinan entre sí, lo que provoca un fuerte dolor.
La displasia de cadera puede empeorar con el tiempo. Si no se trata a tiempo, puede dañar toda la articulación de la cadera de su perro. Los síntomas comunes de la displasia de cadera incluyen:
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Baja productividad
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Dificultad para moverse
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Rigidez
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Dolor extremo, especialmente cuando el perro se sienta
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Reducción de la masa muscular del muslo
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Aumento de la musculatura de los hombros
Entropión
El entropión es una condición ocular común en las mascotas en la que el párpado del perro se vuelve hacia adentro. Como resultado, la pestaña y la zona que cubre el iris (córnea) se rozan. El entropión puede ser heredado o desarrollarse a medida que el perro envejece.
El diagnóstico temprano del entropión puede evitar problemas oculares graves. Su proveedor de atención médica puede sugerir la reparación quirúrgica después del diagnóstico.
Su Komondor con entropión puede mostrar los siguientes síntomas:
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Párpado invertido
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Aumento de la producción de lágrimas
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Manchado
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Secreción ocular frecuente
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Ojos rojos
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Estrechamiento del ojo
Dilatación gástrica-vólvulo (GDV)
Los komondors tienen un alto riesgo de desarrollar condiciones de hinchazón, como el vólvulo-dilatación gástrica (GDV). En esta enfermedad, el estómago del perro se llena de aire y se retuerce. Como resultado, la sangre del estómago del perro no circula.
La GDV es una afección potencialmente mortal. Si no se trata en una o dos horas, su Komondor puede entrar en un shock repentino. Su ritmo cardíaco aumentará y su pulso se debilitará, lo que le llevará a la muerte.
Los síntomas comunes de la GDV incluyen:
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Agrandamiento del abdomen
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Arcadas (movimiento inverso del estómago y el esófago que no termina en vómito)
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Salivación
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Inquietud
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Gemidos dolorosos cuando se presiona el vientre del perro
Cataratas
Las cataratas son una condición ocular genética en los Komondors que también puede desarrollarse con el tiempo. En esta condición, aparece una película turbia en la retina del perro. La retina es el tejido más interno del ojo que envía señales eléctricas neuronales al cerebro para crear imágenes.
A medida que el perro envejece, esta película turbia cubre todo el cristalino del ojo, provocando una ceguera total. Algunas condiciones de salud, como la diabetes mellitus, pueden causar cataratas en su Komondor.
Consideraciones especiales para los komondors
Los komondors tienen necesidades especiales de aseo porque tienen un pelaje largo y acordonado que suele enredarse cada 9 o 10 meses. Hay que bañarlos regularmente.
Utiliza champú para perros para limpiar sus cordones y sécalos siempre por completo. Dejarlos mojados puede atraer a las pulgas o a los parásitos, lo que provoca diversas alergias e infecciones.
No olvide practicar el adiestramiento de obediencia con su Komondor cuando sea un cachorro.
Al igual que otras razas de perros, los Komondor también son susceptibles de sufrir diferentes problemas de salud. Por lo tanto, manténgase en contacto con su veterinario para asegurar la salud de su Komondor y diagnosticar cualquier condición subyacente.
No le dé nunca a su perro ningún tipo de alimento para humanos sin la indicación de su veterinario. Algunos propietarios de mascotas han observado problemas de salud en sus Komondors después de consumir alimentos humanos.
Historia de los Komondors
Los komondors han sido el líder de los rebaños húngaros durante muchos siglos. Se han utilizado para proteger a las ovejas en los pastos. Las características del komondor y su musculatura hacen que estos perros sean lo suficientemente intimidantes para los lobos y otros depredadores.
La historia del komondor se remonta a 1544, cuando los cumanos (komanos) trajeron estos perros a Europa. En ese mismo año, estos perros fueron mencionados en el códice húngaro.
Hoy en día, los komondors son populares en Hungría y en todo el mundo. Se cree que un número considerable de komondors fueron asesinados durante la Segunda Guerra Mundial. Esto se debe principalmente a la naturaleza vigilante de estos perros. Los soldados tenían que matar a los komondors para capturar u ocupar una granja o una propiedad vigilada por estos perros.
Los komondors son excelentes mascotas, pero deben visitar al veterinario con regularidad para garantizar una salud óptima.