Cuando corres o haces ejercicio, a veces puedes sentir un dolor agudo en el borde inferior de la caja torácica. Se trata de una puntada lateral, también conocida como dolor abdominal transitorio relacionado con el ejercicio. ¡Las puntadas laterales son muy comunes y normalmente no son significativas ni dañinas!
¿Qué es una puntada lateral?
Qué es una puntada lateral? Las puntadas laterales pueden ocurrir cuando estás haciendo cardio, entrenamiento de fuerza, practicando deportes o incluso subiendo un largo tramo de escaleras. Este dolor persistente y preciso lo sentirás como si estuviera justo debajo de tus costillas o clavándose en tu costado.
Si eres una persona físicamente activa, es probable que hayas tenido alguna vez una puntada lateral. Hay algunas teorías diferentes sobre lo que son los puntos laterales. Por ejemplo:
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Una idea sugiere que las puntadas laterales son simplemente espasmos del diafragma.
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Otra escuela de pensamiento afirma que cuando la sangre se desvía del diafragma, que necesita sangre durante el ejercicio, se produce un calambre en la zona, - una puntada lateral.
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Una teoría afirma que los puntos laterales se producen cuando los ligamentos que conectan tus órganos internos con el diafragma se estiran en exceso.
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Se cree que la fricción entre las capas de tejido del peritoneo parietal y visceral de su abdomen es lo que conocemos como puntada lateral.
Los síntomas de la puntada lateral son muy sencillos: sentirás un dolor agudo, un calambre, un tirón o un dolor en uno o ambos lados del cuerpo, en la zona donde termina la caja torácica. A veces sentirás un dolor familiar en la parte superior del hombro. El dolor suele ser tan intenso que es necesario ralentizar o dejar de hacer lo que se está haciendo. Si dejas de hacer una actividad, el dolor lateral puede durar uno o dos minutos. Si se trata de un calambre especialmente intenso, es posible que te duela durante unos días.
Causas de la puntada lateral
Como se ha comentado anteriormente, hay algunas posibles causas de las agujetas laterales. Comer demasiado cerca de un entrenamiento puede desencadenar una puntada lateral. Si no calculas bien tus comidas y si consumes las cosas equivocadas demasiado cerca de un entrenamiento, es más probable que tengas un punto lateral. Si tienes comida en el estómago, tu cuerpo bombea naturalmente más sangre a esa zona como parte del proceso de digestión. Esto significa menos sangre en el diafragma y una mayor probabilidad de sufrir calambres en el diafragma.
Otra posible causa es el estiramiento de los ligamentos. Cuando corres, por ejemplo, el movimiento de sacudida sin parar, combinado con la respiración dificultosa, pone mucha tensión en los ligamentos entre el diafragma y algunos de tus órganos. Esta tensión suele provocar espasmos, que es la puntada aguda que sientes en el costado.
Es posible que un desequilibrio de sodio, potasio y calcio en la sangre aumente la probabilidad de sufrir puntadas en el costado.
En pocas palabras, las puntadas laterales pueden ser causadas por cualquier tipo de ejercicio. Es más probable que se produzcan cuando haces cosas que requieren que gires o muevas el torso, como nadar, correr, esprintar y actividades similares.
Tratamientos de puntadas laterales
Cuando te da una puntada a mitad del entrenamiento, hay algunos tratamientos para las puntadas laterales que puedes probar, como:
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Reducir la velocidad, sin importar lo que estés haciendo
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Respirar profundamente
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Presionar o masajear la zona dolorida
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Estirar el diafragma inclinándose hacia delante
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Flexionar los músculos del estómago
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Gruñir fuertemente al inhalar y exhalar.
Cómo prevenir los puntos laterales
Hay una serie de consejos y trucos que puede probar para la prevención de las puntadas laterales, incluyendo:
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No comer durante 2 ó 3 horas antes de realizar una actividad física
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Evitar los alimentos y bebidas con alto contenido en azúcares concentrados, como los zumos de frutas, antes de hacer ejercicio
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Estirar los costados antes de hacer ejercicio inclinándose hacia ambos lados mientras se levantan los brazos
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Regulando la respiración
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Calentar antes de empezar a hacer ejercicio
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Probar con entrenamientos más largos y de menor intensidad
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Hacer ejercicios de fuerza para reforzar los músculos abdominales y el diafragma
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Prestar atención a tu postura
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Aumentando tu resistencia y tu capacidad aeróbica
Una de las cosas más importantes que puedes hacer es mantenerte bien hidratado. Tanto si tienes un evento importante próximamente como si realizas una actividad constante, asegúrate de beber mucha agua en las 12 horas previas al ejercicio. Una vez que falten unas horas, reduce la cantidad de agua que bebes para mantenerte hidratado pero no hinchado.
Si notas que tienes constantemente puntos laterales durante la misma actividad, intenta cambiar tu rutina. Si tienes muchos calambres laterales mientras corres, intenta añadir la bicicleta o la natación a tu régimen de ejercicios.
Buscar atención médica
Es importante conocer la diferencia entre los puntos laterales y los dolores en el pecho debidos a la falta de oxígeno, ya que ambos suelen confundirse. Los dolores torácicos se diferencian en que el dolor estará debajo del esternón, no de la caja torácica; te costará coger aire y tendrás una sensación de dolor en el brazo izquierdo. El dolor torácico también puede producirse como consecuencia de la actividad física.
Deje de hacer lo que está haciendo y preste atención a sus síntomas. Si la sensación es diferente a la de una puntada en el costado, podrías tener una condición más seria como un ataque al corazón. Busca ayuda médica lo antes posible y consulta con un profesional sanitario para saber qué pasos debes dar.