De los archivos del médico
Ahora que tiene hijos, su idea de unas vacaciones relajantes probablemente ha cambiado. Atrás quedaron las visiones de una playa tropical y piña colada en la mano. En su lugar, muchos padres quieren un destino que mantenga a los niños activos y comprometidos. El mejor tipo de diversión veraniega para una familia preocupada por su salud implica una combinación equilibrada de actividad al aire libre y ejercicio.
"Las excursiones activas en familia, ya sean excursiones de un día, escapadas de fin de semana o vacaciones largas, ayudan a los niños a aprender a amar el ejercicio", dice la directora de fitness Jennifer Shook. Shook trabaja en el Pritkin Longevity Center and Spa de Miami. "Los niños activos se convierten en adultos activos y es mucho menos probable que sufran algunas de las condiciones de salud prevenibles causadas por el estilo de vida sedentario".
Además, las vacaciones activas crean recuerdos inolvidables y ayudan a las familias a crear vínculos. "Dentro de unos años, nadie recordará haber almorzado en la playa, pero sí la excursión que hicieron por el Gran Cañón o lo bien que se lo pasaron en bicicleta de montaña", dice Shook.
Y si los niños pueden aprender algo de sus vacaciones de verano, aún mejor.
Lo más importante a la hora de buscar unas vacaciones activas en familia es que sean aptas para niños. "Evite los centros turísticos que se adaptan más a los gustos de los adultos y ofrecen excursiones tipo spa", dice Shook.
Con los objetivos de ejercicio y compromiso en mente, aquí hay cinco sugerencias para grandes actividades de diversión de verano:
1.
Pasa una semana en un bosque o pradera nacional.
Tanto si eliges pasarla mal en una tienda de campaña como si te retiras a la comodidad de un hotel al final del día, una semana en un bosque nacional ofrece infinitas posibilidades de diversión en verano. "Puedes ir de excursión, escalar rocas, flotar en un río, ir en bicicleta de montaña por un bosque antiguo, construir un castillo de arena o montar a caballo... la lista es interminable", dice Suzi Dow, coautora de la Guía de Campings de los Bosques Nacionales de Estados Unidos. "El aire fresco y el desafío físico promueven una buena noche de sueño, por lo que te despiertas listo para hacerlo todo de nuevo... o algo diferente", dice.
2. Haz un recorrido educativo a pie o en bicicleta por una ciudad.
Qué hay de las actividades de verano que incorporan experiencias de aprendizaje para los niños? Jasmine Kim, directora general y vicepresidenta de TravelTicker.com, sugiere paseos por ciudades y pueblos ricos en historia. "Para que los niños se involucren, hay que relacionar las cosas que estudian en la escuela; tener un punto de referencia les ayuda a recordar los lugares que visitan y la historia que hay detrás de esos lugares", dice. Para despertar aún más el interés de los niños antes del viaje, Kim recomienda mostrarles una película o un libro que presente la ciudad que se piensa visitar.
3. Busca comida.
Para incorporar el ejercicio y los alimentos saludables, lleva a tu familia a una excursión para recoger fruta o verdura como actividad de verano o como parte de unas vacaciones activas. A continuación, lleva tu cosecha a casa y utilízala en una receta que hagáis juntos en familia. ¿Recogiendo fresas o manzanas? Prepara un pan integral de fresas y plátano o un pollo relleno de manzana. "Es bueno que los niños sepan de dónde vienen sus alimentos y que participen en la preparación de una comida saludable", dice la consultora de bienestar de Manhattan Bárbara Méndez. Para encontrar una granja de recogida de alimentos cerca de ti, consulta en Internet las granjas locales.
Si no tienes una granja cerca, busca un mercado de agricultores en tu ciudad. "Los mercados de agricultores se están convirtiendo en destinos increíblemente populares, especialmente para las familias activas; son una combinación perfecta de ejercicio y buena comida", dice Kim. En la mayoría de las ciudades, los mercados de agricultores son lugares seguros y animados para pasear en familia. Además, enseñan a los niños a conocer las frutas, las verduras y otros alimentos frescos y la artesanía de la zona. "Los niños pueden escoger algunas frutas y verduras saludables para llevárselas a la habitación del hotel en lugar de la comida basura que suelen comer en vacaciones", dice.
4. Activa unas vacaciones relajantes.
Si lo que le apetece a su familia es el sol y el surf, puede crear el equilibrio perfecto entre la relajación y la actividad veraniega. Las propiedades de alquiler vacacional suelen proporcionar bicicletas, kayaks y otros equipos para mantener a la familia activa. Algunas empresas de gestión de alquileres llegan a ofrecer servicios gratuitos, como el acceso a centros recreativos y el voluntariado para ayudar a proteger a las tortugas marinas. Y hay muchos complejos turísticos con todo incluido en el Caribe que incluyen deportes acuáticos y terrestres, gimnasios, clases de fitness y actividades para niños. Habla con un agente de viajes sobre cómo seleccionar unas vacaciones relajantes que ofrezcan el máximo acceso a las actividades de verano.
5. Busca la aventura a nivel local.
Busca actividades de verano divertidas para hacer con tus hijos que sean locales en tu zona. Si vives cerca de la playa, da un paseo por la orilla y comprueba quién encuentra la concha marina más singular. O bien, haz una excursión por un parque local y trata de detectar los animales autóctonos de tu zona por el camino. ¿Sólo tienes unas horas? Coja a los niños y dé un paseo en bicicleta para ir a comer tacos o helados. Las vacaciones son un estado de ánimo, y cualquier diversión veraniega que pueda ponerte temporalmente en él es buena para toda la familia.