Por Sharon Liao
Si tienes cáncer, comer bien puede darte la fuerza que necesitas. Los batidos son una forma de obtener los nutrientes que el cuerpo utiliza para combatir la enfermedad y manejar los efectos del tratamiento.
Los batidos son una buena opción si su tratamiento le produce efectos secundarios. Los batidos también son fríos, lo que puede aliviar el dolor de boca y garganta. Si estás demasiado cansado para comer o no tienes apetito, beber tus calorías puede ser una alternativa fácil.
Cada persona tiene unas necesidades nutricionales diferentes. Tu equipo médico puede ayudarte a determinar las tuyas. Una vez que las conozcas, puedes utilizar estas pautas para preparar un batido nutritivo y delicioso cuando comer te parezca demasiado.
Empieza por la fruta.
La fruta aporta dulzor y fibra -que ayudan a tu salud digestiva- y antioxidantes que combaten las enfermedades. Prueba a mezclar diferentes frutas para obtener una mezcla de nutrientes y sabores.
Si te duele la boca, evita las frutas con semillas pequeñas, como las bayas. Las semillas pueden hacer que te duela más la boca.
Puedes utilizar fruta fresca o congelada. Si quieres una textura más gruesa, elige la congelada.
Hay muchas buenas opciones de fruta. Los plátanos tienen un alto contenido en potasio, un mineral que tu cuerpo necesita para que tus nervios y músculos funcionen bien. Las peras tienen mucha fibra, que puede ayudar a aliviar el estreñimiento. Los mangos contienen vitaminas A y C, que ayudan a fortalecer el sistema inmunitario. La sandía puede ayudarte a hidratarte, y además tiene licopeno, un potente antioxidante. Las cerezas y otras frutas de color oscuro tienen compuestos químicos llamados fitoquímicos, que pueden ayudar a combatir tu cáncer.
Ten en cuenta que el tratamiento del cáncer puede hacer que tus batidos tengan un sabor demasiado dulce. Si ese es el caso, prueba con arándanos congelados, que añaden acidez.
Ponle mucha verdura.
Las verduras son una buena fuente de nutrientes y fibra. También son bajas en azúcar. Eso puede ayudar a mantener el azúcar en la sangre bajo control. Considere añadir:
Verduras de hoja verde, que proporcionan vitaminas B y hierro. El cuerpo las utiliza para producir células sanguíneas. Las espinacas, la col rizada y la lechuga romana son buenas opciones.La zanahoria y la calabaza son frutas naturalmente dulces que tienen un alto contenido de vitamina A.
El aguacate, que técnicamente es una fruta, tiene un alto contenido en grasas saludables para el corazón. También es una buena manera de añadir algunas calorías.
Añade algo de proteína.
Tu cuerpo la utiliza para reparar los tejidos y fortalecer tu sistema inmunitario. Muchas veces, las personas con cáncer necesitan más proteínas que las que no lo tienen. Ayuda a curar los tejidos y a combatir las infecciones durante y después de tratamientos como la cirugía y la quimioterapia.
Las buenas fuentes de proteínas incluyen:
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Mantequilla de frutos secos o nueces enteras
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Yogur griego sin azúcar
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Proteína en polvo
Busca proteínas en polvo bajas en azúcar, con cosas como suero de leche, cáñamo, arroz o cacahuete. Una opción económica es la leche desnatada en polvo. No te pases con las proteínas. Tu cuerpo no puede procesar más de 30 gramos de una vez.
Vierte un poco de líquido.
Los batidos pueden ayudarte a mantenerte hidratado. Eso es especialmente importante si tienes náuseas o diarrea.
El agua filtrada añade líquido sin calorías. También crea un batido de sabor más suave. El agua de coco contiene sodio y potasio, por lo que puede reponer los electrolitos. La leche baja en grasa es una buena opción si quieres añadir cremosidad y calcio a tu batido. Las leches de origen vegetal, como la de almendras, soja, avena y arroz, también son opciones. Elige las versiones sin azúcar y las fortificadas con vitamina D y calcio. Los zumos son una gran opción si necesitas obtener más calorías. Busca variedades con 100% de zumo.
Dale un empujón.
Considera la posibilidad de añadir semillas, especias o hierbas a tu batido para darle más sabor y nutrición.
El jengibre o la menta pueden calmar el malestar estomacal. La canela, la cúrcuma y el cardamomo tienen compuestos antiinflamatorios. La harina de lino es rica en fibra. También contiene grasas omega-3 saludables. Las semillas de chía contienen proteínas, fibra, calcio y grasas omega-3.
Omite los azúcares añadidos. Es un mito que el azúcar hace que el cáncer crezca más rápido. Pero el azúcar añadido aporta calorías adicionales sin mucha nutrición. Evita el azúcar de mesa, la miel, el jarabe de arce y el agave. La fruta le da a tu batido un dulzor natural.
Practica la seguridad alimentaria. El cáncer y ciertos tratamientos pueden debilitar tu sistema inmunitario. Esto hace que sea más difícil luchar contra las bacterias causantes de enfermedades que se encuentran en los alimentos contaminados. Por eso es importante manipular y preparar los alimentos con cuidado.
Asegúrese de:
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Lavarse bien las manos.
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Utiliza una tabla de cortar reservada para frutas y verduras.
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Compruebe que los zumos y las leches están pasteurizados.
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Frote todas las frutas y verduras crudas con un cepillo y agua antes de cortarlas, pelarlas o comerlas. Esto incluye las que tienen cáscara dura, como las naranjas y los aguacates.
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Remoja en agua las bayas frescas y las frutas y verduras congeladas.
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Poner inmediatamente en la nevera el batido que haya sobrado.
Prueba estas mezclas.
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1 taza de agua filtrada ½ plátano congelado ½ pera madura ½ manzana Granny Smith 2,5 tazas de espinacas Zumo de ¼ de limón
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2 tazas de arándanos congelados sin azúcar ½ taza de zumo de naranja fortificado con calcio ¾ de taza de yogur de vainilla descremado o bajo en grasa ½ plátano mediano congelado ½ cucharadita de extracto puro de vainilla
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1 mango, pelado y cortado en trozos ½ naranja, pelada y cortada en cuartos 1 zanahoria, cortada en trozos 1½ tazas de leche de soja sin azúcar 1 pulgada de jengibre, pelado 6 cubitos de hielo
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1 taza de leche de almendras de vainilla sin azúcar ½ taza de té verde elaborado 1½ cucharadas de semillas de lino o chía molidas ½ cucharadita de jengibre fresco picado ¼ cucharadita de canela 1 cucharada de zumo de limón ½ taza de bayas ½ taza de plátano o mango 2 tazas de espinacas o col rizada 1 cucharada de mantequilla de almendras