La quimioterapia es un grupo de potentes medicamentos que pueden ayudar a frenar o detener algunos tipos de cáncer. Pero la quimioterapia también puede afectar a las células sanas del cuerpo, como las que recubren el interior de la boca y las que producen la saliva. El resultado puede ser sequedad, sensibilidad y úlceras en el interior de la boca que dificultan la alimentación e incluso el habla.
Suelen ser peores a los 7 días del tratamiento y suelen desaparecer entre 10 y 14 días después de terminar el tratamiento. Pero hay algunas cosas que puedes hacer para prevenir las llagas y controlarlas cuando las tengas:
Utiliza un cepillo de dientes de cerdas suaves: Es importante ser cuidadoso con el delicado tejido de las encías. Puedes hacer que las cerdas sean aún más suaves pasándolas por agua caliente. O puedes ir un paso más allá y limpiarte los dientes con simples bastoncillos de algodón o esponjas hechas especialmente para tu boca.
Cepíllate a menudo, pero con suavidad: Cepíllate o límpiate los dientes después de cada comida y a la hora de acostarte. Tanto si utilizas un cepillo de dientes suave como cualquier otra cosa, procura hacerlo con suavidad para no dañar el delicado tejido interior.
Utiliza el hilo dental todos los días: Ayuda a mantener la boca limpia y evita la acumulación de bacterias que pueden provocar infecciones. Al igual que con el cepillado de los dientes, hazlo con suavidad para no dañar las encías ni provocar un sangrado. Es mejor evitar las zonas que sangran o duelen, pero sigue siendo importante utilizar el hilo dental en las demás zonas.
Enjuágate la boca: Hay diferentes soluciones que pueden ayudar. Pregúntale a tu médico qué debes usar si no estás seguro. Puedes mezclar ¼ de cucharadita de bicarbonato de sodio y ⅛ de cucharadita de sal en 1 taza de agua tibia. O utilizar partes iguales de peróxido de hidrógeno y agua. Enjuágate varias veces al día para mantener la boca limpia y reducir las llagas. Es una buena idea enjuagarse después con agua corriente.
Vaya al dentista antes de la quimioterapia: Es una buena idea visitar a tu dentista antes de empezar el tratamiento para solucionar cualquier problema como la enfermedad de las encías o las caries. Informa a tu dentista sobre tu tratamiento contra el cáncer, incluida la radiación, que también puede causar llagas en la boca, y sobre si has tenido llagas antes. Es posible que le recete una medicación que le ayude.
Mantenga la boca húmeda: Bebe mucha agua. Puedes chupar trozos de hielo para mantenerte hidratado, y el frío puede ayudar a aliviar parte del dolor de las llagas bucales. También puede ayudar chupar caramelos sin azúcar o masticar chicles sin azúcar.
Prueba una pajita: Para algunas personas, beber líquidos a través de una pajita ayuda a mantener los líquidos alejados del revestimiento de la boca, donde podrían irritar las llagas bucales. Puedes utilizarla tanto para las sopas como para las bebidas.
Protege tus labios: Utiliza vaselina, manteca de cacao u otro bálsamo labial suave para mantener los labios húmedos. Considera la posibilidad de usar algo con protección solar si vas a pasar tiempo al sol.
Come los alimentos adecuados:
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Los alimentos fríos, como las paletas de hielo, el yogur congelado y el helado, son más fáciles de digerir y pueden incluso aliviar las encías doloridas.
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Los alimentos blandos y suaves, como el puré de patatas, la avena y los huevos revueltos, son menos propensos a dañar la boca.
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Los alimentos a temperatura ambiente, o sólo ligeramente tibios, en lugar de calientes, son mejores para su tierna boca durante la quimioterapia.
Evita otros alimentos:
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Artículos duros, crujientes y secos, como las tostadas, las patatas fritas y los pretzels
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Opciones azucaradas, picantes o saladas como barras de caramelo, salsa o queso procesado
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Alimentos ácidos como frutas y zumos (pomelo, naranja, tomate)
Utilizar medicamentos: Hay varios medicamentos de venta libre y con receta que ayudan a adormecer las llagas de la boca. Otros medicamentos vienen en forma de enjuague que recubre y protege el interior de la boca antes de comer o beber. Incluso puedes preguntar a tu médico si un fármaco como la palifermina (Kepivance), que ayuda a cultivar las células del interior de la boca, podría ser una buena opción para ti.