El diente de león es mucho más que una simple hierba que crece en el jardín. De hecho, se ha cultivado por sus beneficios culinarios y medicinales durante siglos, y la ciencia moderna incluso ha empezado a corroborar algunas de las afirmaciones que tradicionalmente se hacían sobre el diente de león.
El diente de león es muy común en Norteamérica y la mayoría de la gente lo reconoce a primera vista. Es una planta resistente, que crece fácilmente en zonas con poca luz solar donde otras tienen dificultades. Las flores, las hojas y la raíz del diente de león se pueden utilizar para hacer un té de diente de león. En algunas partes de Europa y Asia, se conoce como un remedio popular para:
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Infecciones del tracto urinario
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Inflamación
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Desintoxicación del cuerpo
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El resfriado común
Sin embargo, aunque la ciencia moderna ha prestado cierto apoyo a estas y otras afirmaciones de la medicina tradicional sobre el té de diente de león, se necesita mucha más investigación.
Información nutricional
Una taza de diente de león crudo contiene:
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Calorías: 25
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Proteínas: 1,5 gramos
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Grasa: 0,4 gramos
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Carbohidratos: 5,1 gramos
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Fibra: 1,9 gramos
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Azúcar: 0,4 gramos
El diente de león es una buena fuente de:
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Betacaroteno
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Magnesio
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Calcio
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Hierro
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Zinc
El diente de león también es una excelente fuente de vitamina A. Los estudios han demostrado que la vitamina A puede reducir el riesgo de afecciones como las cataratas, la diarrea, el sarampión y el cáncer de mama.
Posibles beneficios para la salud del té de diente de león
El diente de león es una rica fuente de vitaminas y minerales. Sin embargo, lo mismo que hace que el diente de león sea tan potente también puede crear complicaciones para las personas con ciertas condiciones médicas.
Las investigaciones han encontrado una serie de beneficios potenciales para la salud al beber té de diente de león:
Efectos antiinflamatorios
El diente de león contiene taraxasterol, un compuesto conocido por tener importantes propiedades antioxidantes que combaten la inflamación. El taraxasterol puede ayudar a regular los glóbulos blancos y evitar que desencadenen una inflamación innecesaria.
Reduce la presión arterial
El té de diente de león es una excelente fuente de potasio, un mineral y electrolito que estimula los latidos del corazón. El potasio puede ayudar al riñón a filtrar las toxinas con mayor eficacia y mejorar el flujo sanguíneo.
Mejora de la salud del hígado
Se sabe que los polisacáridos del diente de león reducen el estrés del hígado y favorecen su capacidad de producir bilis. También ayudan al hígado a filtrar las sustancias químicas potencialmente dañinas de los alimentos.
Apoyo al sistema inmunológico
El diente de león es también una buena fuente de vitamina C, una de las vitaminas más útiles para el sistema inmunitario. La presencia de vitamina C puede explicar su eficacia contra los resfriados estacionales.
Posibles riesgos del té de diente de león
Debido a que el té de diente de león tiene ingredientes tan potentes, debe consultar con su médico antes de tomarlo o de tomar cualquier otro suplemento. Tenga en cuenta lo siguiente antes de preparar o beber el té de diente de león:
Alergias al diente de león
Si eres alérgico a otras plantas de la familia de las margaritas -como las margaritas, las caléndulas o los crisantemos- también serás alérgico al diente de león.
Preocupación por el embarazo
Los efectos del té de diente de león en una persona embarazada o en período de lactancia no son concluyentes. Si está embarazada o amamantando a un bebé, es mejor que busque una alternativa.
Interferencia con la medicación
Evite el té de diente de león si ya está tomando un diurético, ya que sus acciones pueden verse agravadas. Dado que el diente de león tiene propiedades diuréticas naturales, puede interferir con la acción del litio y otros medicamentos similares.
El té de diente de león también debe evitarse si está tomando antibióticos como Cipro, Levaquin, Noroxin y otros.
Función hepática y renal
Si está en tratamiento por problemas hepáticos o renales, debe evitar el consumo de diente de león o de té de diente de león, salvo con la autorización de su médico. El diente de león podría aumentar el riesgo de complicaciones para alguien que tenga una enfermedad renal, en particular.
Presión arterial y coagulación
Dado que el potasio del diente de león puede afectar al flujo sanguíneo y a la coagulación, es mejor evitar el té de diente de león si se está tomando medicación anticoagulante.
Por la misma razón, alguien que esté tomando medicamentos para la presión arterial debe evitar el té de diente de león.
