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Cuando un día en la consulta significa realizar 15 exámenes rectales o atender a pacientes con infecciones vaginales furiosas, hay que preguntarse: ¿cómo se afronta la situación?
¿Quién no se ha preguntado (y preocupado) por lo que pasa por la mente de los médicos mientras realizan un examen exhaustivo? Al fin y al cabo, los médicos a menudo miran por debajo del capó las zonas del cuerpo que la mayoría de nosotros nos esforzamos por mantener ocultas.
Por qué es difícil escandalizar a un médico
Puedes dejar de lado tu ansiedad, dice el doctor Jeff Goldman, agastroenterólogo del Advocate South Suburban Hospital de Hazel Crest, Illinois. "Tras quince años de carrera y después de haberme formado en la ciudad de Nueva York, haría falta algo realmente extraordinario para escandalizarme."
La Dra. Elizabeth Houser, uróloga de Austin (Texas), que ejerce en su consulta privada, está de acuerdo. "Es parte del trabajo", dice sobre algunos de los aspectos más desagradables de su trabajo. "Es como si fueras mecánico y tuvieras que limpiar un carburador. Es simplemente lo que haces".
Según Houser, cualquiera que haya pasado por un programa de residencia ha visto cosas peores que las que pueden pasar por la mesa de examen de un médico en la práctica privada: Como estudiante de medicina de tercer año, Goldman fue enviado a tratar a alguien que no había defecado en casi dos semanas.
"Tuve que usar mi dedo y 'desimpactar' manualmente al paciente", explica. "Aquel día superé mi aprensión a hacer un examen rectal".
A veces este tipo de incidentes dejan a los nuevos médicos inseguros, dice el doctor Roshini Rajapaksa, profesor adjunto de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York. Pero lo normal es que se recuperen rápidamente. "El desmayo suele ser un fenómeno de primera vez".
Aun así, ninguna experiencia puede insensibilizar a un médico a todo, explica Rajapaksa. "Que estés acostumbrado a las cosas asquerosas dentro de tu campo de la medicina no significa que no te den asco otras cosas".
Por qué es difícil escandalizar a un médico
Es común sentirse ansioso cuando se visita al médico para un examen invasivo.¿La mejor manera de afrontarlo? Intenta relajarte y recuerda:
Reírse de ello.
El sentido del humor durante un examen puede aligerar el estado de ánimoy hacer que transcurra con mayor facilidad. "Me ayuda a tranquilizarme y a sentir que puedo hacer un examen más exhaustivo si es necesario, porque no estoy forzando nada ni haciendo [al paciente] sentir que estoy siendo invasivo en su cuerpo", dice Goldman.
Mantén la concentración.
Recuerda que la prueba o el examen al que te sometes se hace porque lo necesitas. Manténgase centrado en su salud y en cómo sutratamiento contribuye a ella.
Busca la comodidad.
Busca un médico que te haga sentir cómodo. Si no está a gusto con su médico, coméntelo con él o busque uno nuevo.