Si tienes calambres dolorosos en las piernas, no estás sola. Muchas mujeres embarazadas los tienen en el segundo o tercer trimestre, a menudo por la noche. Nadie sabe con certeza por qué las mujeres tienen más calambres en las piernas durante el embarazo. Es posible que tengan que ver con los cambios en la circulación sanguínea y la tensión que sufren los músculos de las piernas por el peso adicional. El crecimiento del bebé también ejerce presión sobre los nervios y los vasos sanguíneos que van a las piernas. Además, algunos médicos afirman que la falta de calcio, o un cambio en la forma en que el cuerpo procesa el calcio, puede provocar calambres. Los calambres en las piernas suelen desaparecer a los pocos minutos.
Llame al médico si:
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Tiene hinchazón, sensibilidad, enrojecimiento o calor en la pierna.
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El dolor no desaparece.
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Tienes problemas para caminar.
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Cree que necesita tomar suplementos de calcio.
Cuidados paso a paso:
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Haz estiramientos de pantorrillas. Estira con los talones flexionados. Estira antes de acostarte si tienes calambres por la noche.
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Si tienes un calambre, endereza la pierna, primero el talón, y mueve los dedos del pie. Masajea suavemente la pantorrilla para relajar el músculo.
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Evita estar sentado o de pie en una misma posición durante mucho tiempo. Muévete de un lado a otro. No te sientes con las piernas cruzadas o de otras formas que puedan dificultar el flujo sanguíneo.
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Salga a caminar todos los días o haga otro tipo de ejercicio regular para prevenir los calambres, con el visto bueno de su médico.
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Bebe mucho líquido para mantener tus músculos hidratados.
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Si tienes calambres por la noche, date un baño antes de acostarte para relajar los músculos de las piernas.
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Cuando tengas un calambre, pon una toalla caliente o una bolsa de agua caliente en la zona.
