Si tiene diabetes, llegar a la consulta del médico puede ser un reto durante la pandemia de coronavirus. Tener diabetes puede debilitar su sistema inmunológico. Eso puede hacer que las complicaciones graves sean más probables si se enferma de infecciones como la del COVID-19.
La telemedicina es una buena manera de limitar el riesgo mientras se mantiene al día con su atención médica.
¿Qué es la telemedicina?
También llamada telesalud o e-salud, la telemedicina permite a las personas interactuar con sus equipos de atención médica utilizando un ordenador, una tableta o un teléfono inteligente.
Puedes reunirte con tu equipo de salud por videochat o por teléfono, igual que harías con una cita. Puedes hablar de cosas como:
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Su nivel de azúcar en la sangre
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Cualquier cambio en sus síntomas
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Cualquier pregunta sobre la medicación
Los portales de pacientes en línea están disponibles para que usted:
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Programar citas
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Ver los resultados de las pruebas
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Solicitar reposiciones de medicamentos
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Enviar un correo electrónico a su médico
También puede utilizar su teléfono móvil o tableta para llevar un registro de su nivel de azúcar en sangre y luego enviar la información a su médico. Estos dispositivos también pueden:
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Llevar un registro de su dieta y ejercicio, y luego, a través de una app, estimar la cantidad de insulina que necesita
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Ofrecerte recordatorios por correo electrónico o por mensaje de texto cuando tengas citas o necesites reponer medicamentos
Cómo puede prepararse para su cita
Cuando llame a la consulta de su médico o utilice su sitio web para concertar su cita, asegúrese de que está bien que sea una visita de telemedicina. Muchos médicos utilizan la telesalud para las citas de seguimiento. En algunos casos, y en la mayoría de los nuevos, las citas deben ser presenciales.
Si la telemedicina es la opción adecuada para usted, hay algunas cosas que puede hacer para aprovechar al máximo su visita virtual:
Conozca su tecnología. Comprueba la cámara y el sonido de tu ordenador, teléfono o tableta para asegurarte de que puedes ver y oír a la gente y de que la persona con la que te reúnes puede verte y oírte a ti. Un amigo puede ser tu probador. También:
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Asegúrate de tener acceso al programa que tu médico quiere que uses para la llamada. La oficina de su médico puede ayudar con esto.
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Ten tu dispositivo cargado o enchufado, y asegúrate de tener un lugar tranquilo y bien iluminado para la visita.
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Pide a los familiares que no te interrumpan.
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Utiliza el lugar de tu casa en el que el Wi-Fi sea más potente o en el que tengas el mejor servicio de telefonía móvil. Esto le dará a su audio y video la mejor calidad.
Llama a tu seguro para ver si la telemedicina está cubierta. Si lo está, pregunte si su copago será el mismo. Si no lo está, pregunte a su médico cuál sería su coste.
Planifique su visita virtual de la misma manera que lo haría para una cita médica en persona. Anote cualquier síntoma o pregunta que quiera hacer. Ten cerca tus medicamentos y sube tus cifras de glucosa o cualquier otro dato antes de empezar.
Durante y después de su cita
Hay un par de cosas importantes que debes hacer mientras se desarrolla tu cita y después de que termine.
Tomar notas. No recibirás una copia impresa de las instrucciones o una receta física después de tu visita. Pero es posible que puedas imprimirlas. Esto depende del programa de telemedicina que utilice tu médico. También puede anotar las indicaciones de su médico para recordarlas. Si tiene preguntas más tarde, puede enviarlas por correo electrónico a través del portal del paciente.
También debes saber que tu médico puede enviar tus recetas directamente a tu farmacia a través de su programa de telemedicina.
Da tu opinión. Después de su visita, es posible que reciba una llamada de seguimiento preguntándole cómo le fue. Hazle saber a tu equipo si las cosas han ido bien y si hay algo que pueda facilitarte las futuras visitas.
Cuando la telemedicina no es la respuesta
A veces, tu médico puede querer verte en la consulta. Quizá necesite un análisis de sangre o sea su primera visita a la consulta. El médico puede querer verte si tienes ciertos síntomas o si cree que necesita examinarte en persona.
En esos casos, asegúrate de tomar precauciones adicionales. En la consulta del médico es probable que las sillas estén más separadas, que te pidan que lleves una mascarilla de tela y que te tomen la temperatura cuando llegues. Intente no tocar ninguna superficie cuando esté allí, y mantenga las manos alejadas de la boca, los ojos y la nariz. Lávate las manos o utiliza un desinfectante de manos en cuanto salgas de la consulta.