Consejos para el control de la diabetes y la prevención de complicaciones

Realice una exploración rápida del cuerpo

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Después de tu ducha diaria, revisa tu cuerpo de pies a cabeza. Busca cortes, llagas, ampollas y uñas encarnadas. No te olvides de los lugares donde puede esconderse la humedad y crecer los gérmenes. Revisa debajo de los brazos y los pechos, y entre las piernas y los dedos de los pies. Fíjate bien en los pies. Utiliza un espejo para ayudarte a ver todo. Si tienes cortes o rasguños, trátalos rápidamente. Además, tómate un momento para hidratar la piel seca.

Poner los zapatos junto a la puerta

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Haz que sea fácil ponértelos, para que no tengas la tentación de salir a la calle descalzo. Asegúrate también de tener a mano tus zapatillas o zapatos de casa. Incluso dentro de casa, tienes que proteger tus pies. Antes de ponerte los zapatos, comprueba que no hay nada en ellos que no esperes, como una piedrecita que podría hacerte una muesca en la piel. También puedes cambiar de zapatos durante el día para aliviar los puntos de presión en los pies.

Prepara paquetes de aperitivos de emergencia

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Coloca unas cuantas pastillas de glucosa, o cinco o seis caramelos duros, en bolsitas. Lleva siempre unas cuantas cuando salgas por si te da un bajón de azúcar, también llamado hipoglucemia. Cuando el nivel de azúcar en sangre desciende por debajo de 70 mg/dL, puedes sentirte mareado, hambriento o tembloroso. Puede ocurrir cuando te saltas una comida, tomas demasiados medicamentos para la diabetes o haces más ejercicio del habitual sin comer.

Comprueba tu nivel de azúcar en sangre

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Tu médico te dirá con qué frecuencia debes medir la tuya en función de tu enfermedad, el tratamiento y otras cosas. Si te dicen que te controles a primera hora de la mañana, pon el medidor de glucosa en tu mesilla de noche para recordártelo.

Cuando te despiertes, tu nivel de azúcar en sangre debe estar entre 80 mg/dL y 130 mg/dL. Una o dos horas después de empezar a comer, su objetivo debe ser inferior a 180 mg/dL.

Ponga una etiqueta en su bolsa de deporte

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Dice tu médico que debes comprobar tu nivel de azúcar en sangre cuando haces ejercicio? Hazte un recordatorio. Para saber cómo afecta el ejercicio a tus niveles, haz la prueba antes y después de entrenar. Estos controles pueden facilitar que se eviten bajadas peligrosas.

Haz que la insulina se adapte a tu estilo de vida

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Informe a su médico si está siempre de viaje y no come a horas regulares. Es posible que te recomienden una insulina de acción rápida o una bomba de insulina que suministre insulina de acción rápida. Suele empezar a afectar a tu nivel de azúcar en sangre en 5 o 15 minutos. Puede facilitar las cosas. Puedes administrar este tipo de insulina justo antes de comer. O puede ajustar la bomba antes de las comidas o del ejercicio.

Potencie su dieta

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Imprime la lista de la Asociación Americana de la Diabetes de 10 superalimentos. Estos tienen un índice glucémico bajo, lo que significa que es menos probable que afecten a su azúcar en sangre que el pan u otros alimentos. Coloca la lista en tu nevera para que la veas cuando hagas la lista de la compra, planifiques las comidas o busques en la nevera algo para comer.

Tome un sorbo

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Un nivel alto de azúcar en la sangre hace que su cuerpo pierda líquido, y su piel puede resecarse. Bebe mucha agua y otros líquidos para ayudar a tu piel a mantenerse flexible y saludable.

Haz ejercicio a rachas

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Es importante hacer al menos 30 minutos de ejercicio al día para ayudar a controlar la diabetes. ¿Estás muy ocupado? Divídelo en tres rachas más cortas. Prueba a hacer 10 minutos de entrenamiento de fuerza por la mañana. Juegue a un juego activo con la familia durante el día, o dé un paseo a paso ligero a la hora de comer. Luego, pasea a tu perro por la noche. Esta combinación puede ayudar a mejorar el control del azúcar en la sangre y hacer que las enfermedades del corazón sean menos probables.

Prepara un botiquín de primeros auxilios

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La diabetes puede convertir una lesión menor en un problema mayor. Dedica unos minutos a reunir estos suministros:

  • Crema triplemente antibiótica para curar cortes y raspones

  • Gasas estériles para cubrir las heridas

Si tienes problemas de circulación o problemas nerviosos relacionados con la diabetes (neuropatía periférica), es posible que necesites acudir a un médico o a un centro de atención de heridas. Ten a mano sus números de teléfono.

Lleve sus joyas de alerta médica

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Coloque su pulsera o colgante de alerta médica cerca de su reloj, anillos u otras joyas que use a diario. Esto puede ayudarle a recordar que debe llevarla. O guárdela cerca de su cepillo de dientes o de sus llaves. Es inteligente llevarlo para que la gente sepa que tienes diabetes, por si necesitas atención médica de urgencia.

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