Melanoma uveal: ¿se ha extendido?

Después de que le hayan diagnosticado un melanoma uveal (también llamado melanoma ocular), es importante que tome nota de su estado de salud para detectar signos de que el cáncer pueda haberse extendido (metastatizado) más allá del ojo. Algunas personas tienen mayor riesgo de padecer un melanoma uveal metastásico que otras. Hay algunos indicios que podrían indicar que usted tiene un mayor riesgo de padecer un melanoma uveal metastásico, entre ellos:

  • El tamaño del tumor. Cuanto más grande sea el tumor en el ojo, más probable es que se extienda. Por cada 1 milímetro de aumento de tamaño, hay un 5% más de riesgo. Cuanto antes se detecte el tumor, más pequeño será, mejorando sus posibilidades de que el cáncer no se extienda.

  • Suministro de sangre al tumor. Los tumores muy vascularizados tienen una mayor probabilidad de diseminarse. Eso significa que tienen muchos vasos sanguíneos que proporcionan nutrientes al tumor.

  • Un pigmento anaranjado que recubre el tumor

  • Su edad en el momento del diagnóstico. Cuanto más joven sea en el momento del diagnóstico, menor será la probabilidad de que el cáncer se extienda.

Nuevas investigaciones demuestran que las mutaciones genéticas y los cambios en los cromosomas también pueden predecir si su cáncer se extenderá.

Seguimiento después del tratamiento del cáncer

Una vez finalizado el tratamiento del cáncer, tendrá citas de seguimiento con su oncólogo (médico especialista en cáncer) o con el equipo de oncología para asegurarse de que el cáncer no ha reaparecido. También buscarán encontrar cualquier propagación lo antes posible. No existe un plan establecido para el seguimiento después del tratamiento del melanoma uveal. Los oncólogos vigilan a sus pacientes según su propia experiencia y preferencias.

Lo más frecuente es que usted vuelva a hacerse análisis de sangre cada 6-9 meses aproximadamente. Estos análisis de sangre pueden buscar niveles de ciertas sustancias que pueden ser más altos si tiene un melanoma uveal metastásico. Otro análisis de sangre, una prueba de la función hepática, puede mostrar si su hígado está dañado, lo que podría significar que hay tumores en el hígado.

Las pruebas de imagen también forman parte del seguimiento del tratamiento. Dado que la mayoría de los melanomas uveales metastásicos afectan al hígado, las imágenes pueden detectar los tumores antes de que haya síntomas de daño hepático. Estas pruebas pueden realizarse una o dos veces al año durante un máximo de 5 años, aunque su oncólogo puede querer que continúe con las exploraciones durante más tiempo. Las pruebas podrían incluir:

  • Ecografía

  • Tomografía computarizada

  • RESONANCIA MAGNÉTICA

  • Exploración por TEP

Las ecografías pueden detectar masas, pero no las pequeñas -las que tienen un tamaño inferior a 10 mm-. Las resonancias magnéticas parecen ofrecer los mejores resultados.

Si el melanoma uveal se ha extendido al hígado, suele haber varias masas, no sólo una o dos.

Cómo se diagnostica la diseminación?

Aunque el hígado es el órgano más frecuentemente afectado por la diseminación del melanoma uveal, también puede ir a los pulmones, la piel o los huesos. Si experimenta algún síntoma que le preocupe, podría significar que su cáncer se ha extendido. Su oncólogo le enviará a hacerse otras pruebas.

Los síntomas más comunes de que el cáncer puede haberse extendido al pulmón son:

  • Toser

  • Toser con sangre

  • Tener falta de aire

  • Dolor en el pecho

  • Tener líquido alrededor de los pulmones

  • No tener apetito

  • Perder peso de forma involuntaria

Las pruebas para diagnosticar las metástasis pulmonares incluyen:

  • Análisis de sangre

  • Radiografía de tórax y otras pruebas de imagen

  • Mediastinoscopia, un procedimiento quirúrgico que permite al cirujano introducir un tubo para observar el interior del tórax y tomar muestras de tejido para realizar biopsias

Los síntomas más comunes de las metástasis óseas son:

  • Dolor

  • Se rompen fácilmente los huesos

  • Compresión de la columna vertebral, que podría provocar:

    • Adormecimiento o debilidad en las piernas.

    • Dolor de espalda

    • Pérdida de control de la vejiga o los intestinos

  • Niveles altos de calcio en la sangre, que podrían causar:

    • Somnolencia o pereza.

    • Debilidad o dolores musculares

    • Orinar mucho

    • Estreñimiento

    • Confusión

    • Sentirse extremadamente sediento y beber mucho

Para diagnosticar la propagación a los huesos, su oncólogo puede recomendar:

  • Radiografías y otras pruebas de imagen.

  • Gammagrafía ósea

  • Biopsia

Y en el caso de las metástasis cutáneas, la prueba habitual es una biopsia de piel. El aspecto de las lesiones puede variar bastante. Algunas pueden ser manchas rojas o rosadas, otras de color carne. Algunas son bultos lisos y otras rugosos. Las zonas afectadas suelen ser las:

  • El cuero cabelludo

  • Abdomen, tronco y tórax

  • Brazos y piernas

  • Cara

  • Cuello

Se puede predecir la propagación del melanoma ocular?

Dado que no hay muchas pruebas para comprobar la existencia de un melanoma uveal metastásico, los oncólogos se basan en pruebas que indican su riesgo de propagación.

Biopsias: Aunque las biopsias no son habituales en los cánceres oculares, es posible que su oncólogo quiera hacerle una para comprobar si hay cambios genéticos que puedan aumentar el riesgo de que el cáncer se extienda. Los resultados de la biopsia también pueden orientar a su médico hacia los fármacos adecuados si usted tiene esas mutaciones.

Hay varios tipos de biopsias que pueden realizarse para los cánceres oculares:

  • La aspiración con aguja fina consiste en que el médico introduzca una aguja muy fina en el ojo para extraer una muestra de líquido gelatinoso, el humor acuoso, que se encuentra entre la córnea y el cristalino. Este líquido se envía para su análisis.

  • La biopsia con aguja fina es similar a la aspiración, pero la aguja se introduce directamente en el propio tumor y se extraen células para analizarlas.

  • Las biopsias por incisión o escisión permiten al cirujano cortar una parte o la totalidad del tumor para analizarlo.

  • Las biopsias líquidas son análisis de sangre que se realizan para buscar células tumorales en la sangre. Este tipo de prueba aún no está ampliamente disponible debido al equipo necesario. Pero la Sociedad Americana del Cáncer dice que las biopsias líquidas pueden ayudar a predecir el riesgo de que el cáncer vuelva a aparecer.

Hot