Todas las verrugas tienen la misma causa: el virus del papiloma humano, o VPH. Y puedes tomar medidas para evitarlo.
Puedes contraer el VPH de otra persona o de algo que haya tocado alguien que tenga el VPH. Es más fácil que el virus entre en tu cuerpo si tienes cortes o rasguños.
Estos pasos ayudan:
Lávate las manos, sobre todo después de tocar una verruga que ya tengas. Y mantén las manos secas, ya que a las verrugas les gusta la humedad.
Utiliza zapatillas de ducha, tangas o zapatos de goma para nadar siempre que vayas a una piscina pública, a un vestuario o utilices una ducha que también utilicen otras personas.
Lávate bien los pies con un jabón desinfectante después de estar en una zona en la que se pueda propagar el virus.
No toques la verruga de otra persona. Y no te toques tus propias verrugas.
Si te haces la pedicura, asegúrate de que tu pedicurista no utiliza en ti las mismas herramientas que en otras personas.
No te afeites, cepilles o recortes las zonas que tienen verrugas.
Ya tienes una verruga en el pie? Manténgala seca para evitar que se extienda.