Enfermedades autoinmunes y control de la natalidad

Tener una enfermedad autoinmune durante la edad fértil, como el lupus o la esclerosis múltiple (EM), aumenta los riesgos para la salud si te quedas embarazada. Es probable que puedas tener un embarazo seguro con la orientación de tu médico. Sin embargo, lo mejor es planificarlo. Esto significa que una anticoncepción eficaz es clave mientras tanto o si no quieres quedarte embarazada.

Riesgos del embarazo con una enfermedad autoinmune

Los síntomas de algunas enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoide (AR) o la esclerosis múltiple, a veces parecen mejorar durante el embarazo. Pero la mayoría no lo hacen. El embarazo también puede afectar a diferentes enfermedades autoinmunes -y a quienes las padecen- de distintas maneras. Algunas de ellas son:

  • Si tienes lupus, tendrás más posibilidades de tener un parto prematuro o muerte fetal que la población general. El asesoramiento previo al embarazo y el control a lo largo del mismo pueden ayudarte a tener un embarazo seguro.

  • El síndrome antifosfolípido, un raro trastorno de la coagulación de la sangre, puede provocar la muerte fetal o el aborto. También puede provocar preeclampsia -presión arterial alta causada por el embarazo- y un bebé más pequeño que la media.

  • La esclerodermia sistémica puede aumentar las posibilidades de tener preeclampsia, parto prematuro y problemas renales.

  • El síndrome de Sjogren está relacionado con un mayor riesgo de aborto. Ciertos autoanticuerpos que pueden acompañar a la enfermedad también pueden causar problemas cardíacos al bebé.

  • La miastenia gravis, que provoca debilidad muscular, puede intensificarse con el embarazo. Los anticuerpos que la acompañan también pueden atravesar la placenta.

  • Si tienes esclerosis múltiple, es posible que estés utilizando terapias modificadoras de la enfermedad, que están relacionadas con riesgos para el bebé. Es probable que tu equipo médico quiera eliminarlas de tu cuerpo antes de que te quedes embarazada.

  • Los síntomas de la AR pueden mejorar durante el embarazo, especialmente durante el segundo y tercer trimestre. Pero si la enfermedad ya ha dañado las articulaciones de la parte inferior de la columna y de la cadera, el parto puede ser más difícil.

La facilidad de uso de los anticonceptivos es clave

No importa lo eficaz que parezca un método anticonceptivo sobre el papel: si te cuesta utilizarlo, lo más probable es que no lo hagas o que tengas problemas para usarlo correctamente. Por ejemplo, si tienes esclerosis múltiple, puede que te cueste tragar las píldoras anticonceptivas o colocar los métodos de barrera o los anillos vaginales.

El método anticonceptivo más eficaz para su uso en el "mundo real" es el más sencillo para ti. Con los métodos LARC (anticoncepción reversible de acción prolongada), como un dispositivo intrauterino (DIU) o un implante, por ejemplo, una vez que el médico lo coloca, no tienes que hacer nada más para que funcione.

Riesgos de la anticoncepción

Es fundamental que hables con tu médico sobre el anticonceptivo adecuado para ti. Pensarán en tu enfermedad autoinmune y en cómo te afecta. Por ejemplo, algunas personas con lupus pueden tomar con seguridad anticonceptivos hormonales con estrógenos. Pero para quienes tienen riesgo de sufrir coágulos de sangre, el uso de estrógenos puede ser perjudicial.

Otros aspectos que tu médico tendrá en cuenta son la posible interacción de los anticonceptivos hormonales con los medicamentos que tomas para tu enfermedad. Si no puedes tomar estrógenos, la píldora con progestina o el DIU pueden ser una buena opción. Si tienes lupus y tomas warfarina, la progestina puede calmar las hemorragias abundantes durante el periodo.

Tu médico también puede realizar pruebas especiales para asegurarse de que el método que elijas sea seguro. Es posible que tengas que probar varios métodos diferentes antes de dar con el "adecuado".

Que sea seguro no siempre significa que funcione mejor

A veces un anticonceptivo puede ser seguro de usar -como los métodos de barrera- pero no funcionar tan bien como otros tipos de anticonceptivos. Por ejemplo, aunque los preservativos y los diafragmas pueden impedir que los espermatozoides lleguen al óvulo y proteger también contra las ETS, no son tan eficaces para prevenir el embarazo como otros métodos.

Corregir las mentalidades del pasado

Algunas creencias anteriores sobre los anticonceptivos y las enfermedades autoinmunes, como el temor a los estrógenos, se han estudiado más a fondo y se han modificado. Pero la información anticuada puede llevar a las personas a no utilizar métodos anticonceptivos eficaces.

Por ejemplo, una encuesta realizada a 86 mujeres con lupus mostró que el 22% no utilizaba métodos anticonceptivos de forma sistemática. Esto incluía a las que tomaban medicamentos que aumentaban las posibilidades de defectos de nacimiento. Mientras tanto, más de la mitad dependía de métodos de barrera menos fiables.

Los métodos LARC son los más eficaces

Hay dos tipos de LARC:

El DIU es un pequeño dispositivo de plástico con forma de "T". Su médico lo introduce en el útero. Permanece en su sitio hasta que quieras quedarte embarazada. El DIU hormonal alcanza el final de su eficacia entre 3 y 7 años. También te lo pueden quitar por otro motivo. El DIU hormonal libera progestina, una forma de la hormona progesterona. El DIU de cobre no tiene hormonas. Dura hasta 10 años.

El implante anticonceptivo es una varilla de plástico flexible del tamaño de una cerilla. El médico lo introducirá bajo la piel de la parte superior del brazo. Libera progestina y puede utilizarse hasta 3 años.

El CDC ha calificado a los LARC como la mejor opción anticonceptiva para aquellas personas que pueden tener embarazos de alto riesgo. Hay muchas razones para ello:

  • Los DIU y los implantes anticonceptivos duran mucho tiempo. Evitarán que te quedes embarazada durante al menos varios años.

  • Funcionan mejor que cualquier otro método anticonceptivo. Menos de 1 de cada 100 se quedará embarazada el primer año de uso de LARC.

  • Con el tiempo, LARC es 20 veces más eficaz que otros métodos, incluyendo la píldora, el parche o el anillo vaginal.

  • Se pueden retirar en cualquier momento si quieres quedarte embarazada o probar otro método.

  • Puedes usar un DIU de forma segura si tomas medicamentos inmunosupresores.

Los LARC pueden tener efectos secundarios, como manchado al principio o dolores de cabeza. Los riesgos son raros, pero pueden ocurrir. Por eso es clave discutir con tu médico la mejor opción para ti y tener en cuenta otras opciones.

Hot