La neuropatía periférica es una lesión nerviosa causada por la diabetes y un nivel de azúcar en sangre crónicamente elevado. Produce entumecimiento, pérdida de sensibilidad y, a veces, dolor en los pies, las piernas o las manos. Es la complicación más común de la diabetes.
Entre el 60% y el 70% de los diabéticos acaban desarrollando una neuropatía periférica, aunque no todos sufren dolor. Sin embargo, este daño nervioso no es inevitable. Los estudios han demostrado que las personas con diabetes pueden reducir el riesgo de desarrollar daños en los nervios si mantienen sus niveles de azúcar en sangre lo más cerca posible de lo normal.
¿Qué causa la neuropatía periférica? Los niveles crónicamente elevados de azúcar en sangre dañan los nervios no sólo de las extremidades, sino también de otras partes del cuerpo. Estos nervios dañados no pueden transportar eficazmente los mensajes entre el cerebro y otras partes del cuerpo.
Esto significa que puede no sentir calor, frío o dolor en los pies, las piernas o las manos. Si se produce un corte o una llaga en el pie, es posible que no lo sepa, y por eso es tan importante inspeccionar los pies a diario. Si un zapato no le queda bien, podría incluso desarrollar una úlcera en el pie y no saberlo.
Las consecuencias pueden ser mortales. Una infección que no se cura debido a un flujo sanguíneo deficiente provoca el riesgo de desarrollar úlceras y puede llevar a la amputación, incluso a la muerte.
Este daño nervioso se manifiesta de forma diferente en cada persona. Algunas personas sienten un hormigueo, y más tarde sienten dolor. Otras personas pierden la sensibilidad en los dedos de las manos y de los pies; tienen entumecimiento. Estos cambios se producen lentamente a lo largo de un periodo de años, por lo que es posible que ni siquiera lo notes.
Como los cambios son sutiles y ocurren a medida que se envejece, la gente tiende a ignorar los signos de daño nervioso, pensando que es sólo parte del envejecimiento.
Pero hay tratamientos que pueden ayudar a ralentizar la progresión de esta enfermedad y limitar el daño. Habla con tus médicos sobre las opciones que tienes y no ignores los signos porque con el tiempo puede empeorar.
Síntomas de los daños nerviosos causados por la diabetes
El entumecimiento es el síntoma más común y preocupante del daño nervioso debido a la diabetes. La pérdida de sensibilidad es una preocupación especial. Las personas que pierden la sensibilidad son las que tienen más probabilidades de sufrir úlceras en los pies y de acabar necesitando amputaciones.
La gente describe los primeros síntomas de la neuropatía periférica de muchas maneras:
-
Entumecimiento
-
Hormigueo
-
Alfileres y agujas
-
Prickling
-
Ardiendo
-
Frío
-
Pellizco
-
Zumbido
-
Agudo
-
Puñaladas profundas
Otros describen un dolor agudo, calambres, hormigueos, pinchazos, una sensación de ardor. Y otros tienen una sensibilidad exagerada al tacto.
Los síntomas suelen empeorar por la noche. Esté atento a estos cambios en su forma de sentir:
-
Sensibilidad al tacto. Puede experimentar una mayor sensibilidad al tacto, o un hormigueo o entumecimiento en los dedos de los pies, las piernas o las manos.
-
Debilidad muscular. Los niveles crónicamente elevados de azúcar en sangre también pueden dañar los nervios que indican a los músculos cómo moverse. Esto puede provocar debilidad muscular. Puede tener dificultad para caminar o levantarse de una silla. Puede tener dificultad para agarrar cosas o llevarlas con las manos.
-
Problemas de equilibrio. Puede sentirse más inestable de lo habitual y descoordinado al caminar. Esto ocurre cuando el cuerpo se adapta a los cambios provocados por el daño muscular.
Dado que las personas con diabetes tipo 2 pueden tener múltiples problemas de salud, los médicos no siempre diagnostican la neuropatía periférica cuando aparecen los primeros síntomas. Debe ser consciente de que su dolor puede confundirse con otros problemas.
Asegúrese de que su dolor se toma en serio.