Qué es el codo de golfista?
El codo de golfista es una forma de tendinitis que provoca dolor e inflamación en los tendones que conectan el antebrazo con el codo. El dolor se centra en la protuberancia ósea de la parte interior del codo y puede irradiarse al antebrazo. Suele mejorar con el reposo. El término médico es epicondilitis medial.
El codo de golfista no es tan conocido como el codo de tenista. Aunque ambos son formas de tendinitis del codo, el codo de tenista se debe a un daño en los tendones de la parte exterior del codo, mientras que el codo de golfista está causado por los tendones de la parte interior. El codo de golfista es menos frecuente.
Síntomas del codo de golfista
Con el codo de golfista, el dolor que tiene puede ocurrir de repente o con el tiempo. Si tienes codo de golfista, puedes tener:
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Rigidez en el codo
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Sensibilidad y dolor, por lo general en la cara interna del codo o en la cara interna del antebrazo, pero podría tener dolor con ciertos movimientos, como cerrar el puño o mover un palo de golf
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Hormigueo o entumecimiento en los dedos (normalmente en el anular y el meñique)
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Debilidad en las manos y las muñecas
Causas del codo de golfista
El codo de golfista suele estar causado por el uso excesivo de los músculos del antebrazo, que permiten agarrar, rotar el brazo y flexionar la muñeca. La flexión, el agarre o el balanceo repetitivos pueden provocar tirones o pequeños desgarros en los tendones.
A pesar de su nombre, esta enfermedad no sólo afecta a los golfistas. Cualquier movimiento de la mano, la muñeca o el antebrazo que se realice con frecuencia puede provocar el codo de golfista. Entre las cosas que pueden provocar el codo de golfista, además de jugar al golf, se incluyen:
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Deportes en los que se utiliza una raqueta, como el tenis. No usar las técnicas correctas al jugar o usarlas incorrectamente puede dañar tu tendón. Si usas una raqueta demasiado ligera o demasiado pesada, eso también puede causar el codo de golfista.
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Los deportes que dependen de muchos movimientos de lanzamiento, como el tiro con arco, el béisbol, los bolos, el fútbol, el lanzamiento de jabalina y el sóftbol. Lanzar una pelota de forma incorrecta, por ejemplo, también puede provocar el codo de golfista. De hecho, a veces se llama codo de lanzador.
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Movimientos repetitivos. Si eres carpintero, pintor, fontanero o trabajas en la construcción, puedes sufrir codo de golfista. Muchos movimientos enérgicos y repetitivos pueden causarlo.
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Entrenamiento con pesas. Si no utilizas la técnica adecuada para levantar pesas, puedes sobrecargar los tendones y los músculos del codo.
Las personas también pueden contraerla por utilizar herramientas como destornilladores y martillos, rastrillar o pintar.
Cómo tratar el codo de golfista
La mayoría de las veces, el codo de golfista desaparecerá sin ningún tratamiento especial. Pero debe manejarlo como cualquier otra lesión por sobreuso:
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Aplique hielo en el codo durante 15 o 20 minutos tres o cuatro veces al día.
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Descansar el codo lesionado de las actividades que lo agraven
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Para el dolor, el médico puede recomendar un AINE (antiinflamatorio no esteroideo) oral como la aspirina, el ibuprofeno o el naproxeno para reducir el dolor y la hinchazón. Un medicamento tópico también puede ayudar.
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También puede recibir una inyección de un corticoesteroide o un analgésico (como la lidocaína) en el codo. Esto puede aliviar el dolor y la hinchazón a corto plazo.
Si sigues teniendo dolor después de 3 a 6 meses, es posible que necesites una intervención quirúrgica. Estos procedimientos pueden eliminar las partes dañadas de un tendón, promover la curación y reducir el dolor. La recuperación total puede tardar de 3 a 6 meses.
Cómo prevenir el codo de golfista
La clave para prevenir el codo de golfista es evitar el uso excesivo. Si sientes algún dolor en el codo durante una actividad, detente antes de que empeore.
Los ejercicios de estiramiento y fortalecimiento pueden ayudar a que el codo de golfista desaparezca más rápido. También pueden ayudar a evitar que vuelva a aparecer.
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Los ejercicios excéntricos fortalecen el músculo mientras está relajado, no tenso.
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Los estiramientos ayudan a la movilidad.
Habla con tu médico o fisioterapeuta para elaborar un plan de ejercicios adecuado para ti.
