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Llevamos unos años viendo en nuestro centro a chicos que abusan de los medicamentos de venta libre para la tos, más o menos al mismo tiempo que los medios de comunicación empezaron a hablar mucho de ello. Cuando trabajamos en red en los colegios, nos enteramos por los consejeros de asistencia al estudiante de que se estaba convirtiendo en un problema.
Cuando un chico acude a nosotros, suele consumir también otras drogas, pero ésta suele ser la primera que prueba. Muchos de los consumidores de medicamentos para la tos son más jóvenes y todavía están en fase de experimentación.
Los consumidores de medicamentos para la tos son de tan solo 12 o 13 años
¡No piense que su hijo nunca tomaría pastillas o jarabe para la tos de su botiquín sólo porque tiene 12 o 13 años! Los estudios demuestran que la mayoría de los niños que abusan de los medicamentos para la tos tienen entre 12 y 17 años.
El medicamento para la tos es un fármaco que se toma de boca en boca. Suele tomarse a raudales periódicamente, pero no con frecuencia, para potenciar los efectos de otras drogas principales como la marihuana o el alcohol. Se compra fácilmente y se transfiere con facilidad de un niño a otro. La tomarán en casa, en su habitación, después de que los padres se vayan a la cama. Creen que están en el ordenador y que están tomando jarabe para la tos.
Los niños creen que porque está en el botiquín o en la farmacia no debe ser tan malo. Dicen: "¿Cuál es el problema? Sólo es un jarabe para la tos". Pero el hecho es que beber un frasco entero puede hacerles daño en términos de producir alucinaciones, somnolencia y severos cambios de comportamiento.
Recientemente hemos tenido dos visitas a urgencias en las que los niños tenían alucinaciones y parecían estar psicóticos. No saben dónde están ni quiénes son, y los padres están aterrorizados y no tienen ni idea de lo que está pasando.
Hay muchos cambios de humor, comportamiento, actitud y emociones.
Con los medicamentos para la tos, los niños saben que no darán positivo en una droga ilegal
A menudo, esa es la razón por la que los niños deciden abusar de los medicamentos para la tos. Creen que es algo que sus padres o cualquier otra persona con autoridad no podrá detectar. Y siempre pueden decir que estaban resfriados y que no se sentían bien, y que por eso lo tomaron.
Aconsejo a los padres que eviten el síndrome de "no es mi hijo". Es meter la cabeza en la arena. Los niños están muy influenciados por otros niños, incluso ese niño al que nunca se le ocurriría hacerlo. Si quieren pertenecer, y alguien de su grupo lo hace y se lo ofrecen, es muy común que lo hagan... sólo para formar parte del grupo.
Prepare a su hijo. Enséñele habilidades de rechazo. Comuníquese todo el tiempo, sobre todo, no sólo sobre las drogas. Involúcrese más en preguntar a su hijo cómo se siente y por qué está pasando. Tenga la puerta abierta para cualquier cosa.