Fuente de la imagen
El cuello uterino es un cuello de tejido en forma de cilindro que conecta la vagina y el útero. Situado en la porción más baja del útero, el cuello uterino está compuesto principalmente por tejido fibromuscular. Hay dos porciones principales del cuello uterino:
-
La parte del cuello uterino que puede verse desde el interior de la vagina durante un examen ginecológico se conoce como ectocérvix. Una abertura en el centro del ectocérvix, conocida como orificio externo, se abre para permitir el paso entre el útero y la vagina.
-
El endocérvix, o canal endocervical, es un túnel que atraviesa el cuello uterino, desde el orificio externo hasta el útero?
El límite superpuesto entre el endocérvix y el ectocérvix se denomina zona de transformación.
El cuello uterino produce un moco cervical que cambia de consistencia durante el ciclo menstrual para prevenir o favorecer el embarazo.
Durante el parto, el cuello uterino se dilata ampliamente para permitir el paso del bebé. Durante la menstruación, el cuello uterino se abre un poco para permitir el paso del flujo menstrual.
Condiciones del cérvix
-
Cáncer de cuello de útero: La mayoría de los cánceres de cuello uterino están causados por la infección del virus del papiloma humano (VPH). Las pruebas periódicas de Papanicolaou pueden prevenir el cáncer de cuello uterino en la mayoría de las mujeres.
-
Incompetencia cervical: Apertura temprana, o dilatación, del cuello uterino durante el embarazo que puede provocar un parto prematuro. Los procedimientos previos en el cuello del útero suelen ser los responsables.
-
Cervicitis: Inflamación del cuello uterino, generalmente causada por una infección. La clamidia, la gonorrea y el herpes son algunas de las infecciones de transmisión sexual que pueden causar cervicitis.
-
Displasia cervical: Células anormales en el cuello uterino que pueden convertirse en cáncer de cuello uterino. La displasia cervical se descubre frecuentemente en la prueba de Papanicolaou.
-
Neoplasia intraepitelial cervical (NIC): Otro nombre para la displasia cervical.
-
Pólipos del cuello uterino: Pequeños crecimientos en la parte del cuello uterino donde se conecta con la vagina. Los pólipos son indoloros y generalmente inofensivos, pero pueden causar sangrado vaginal.
-
Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP): La infección del cuello uterino, conocida como cervicitis, puede extenderse al útero y a las trompas de Falopio. La enfermedad inflamatoria pélvica puede dañar los órganos reproductores de la mujer y dificultar su embarazo.
-
Infección por el virus del papiloma humano (VPH): Los virus del papiloma humano son un grupo de virus, entre los que se encuentran algunos tipos que causan cáncer de cuello de útero. Los tipos menos peligrosos del virus causan verrugas genitales y cervicales.
Pruebas de cuello uterino
-
Prueba de Papanicolaou: Se toma una muestra de células del cuello uterino de la mujer y se examina para detectar signos de cambios. Las pruebas de Papanicolaou pueden detectar la displasia cervical o el cáncer de cuello uterino.
-
Biopsia cervical: Un profesional de la salud toma una muestra de tejido, o biopsia, del cuello uterino para comprobar si hay cáncer de cuello uterino u otras afecciones. La biopsia cervical suele realizarse durante la colposcopia.
-
Colposcopia: Prueba de seguimiento de una prueba de Papanicolaou anormal. Un ginecólogo observa el cuello uterino con una lupa, conocida como colposcopio, y puede tomar una biopsia de cualquier zona que no parezca sana.
-
Biopsia de cono: Es una biopsia cervical en la que se extrae una cuña de tejido en forma de cono del cuello uterino y se examina al microscopio. La biopsia de cono se realiza después de una prueba de Papanicolaou anormal, tanto para identificar como para eliminar células peligrosas en el cuello uterino.
-
Tomografía computarizada (TC): Un escáner de TC toma múltiples radiografías y un ordenador crea imágenes detalladas del cuello uterino y otras estructuras del abdomen y la pelvis. La tomografía computarizada se utiliza a menudo para determinar si el cáncer de cuello uterino se ha extendido, y si es así, hasta dónde.
-
Imágenes por resonancia magnética (IRM): Un escáner de resonancia magnética utiliza un imán de alta potencia y un ordenador para crear imágenes de alta resolución del cuello uterino y otras estructuras del abdomen y la pelvis. Al igual que las tomografías computarizadas, las resonancias magnéticas pueden utilizarse para buscar la propagación del cáncer de cuello uterino.
-
Tomografía por emisión de positrones (PET): Una prueba para buscar la propagación o la reaparición del cáncer de cuello uterino. Se inyecta en las venas una solución, conocida como solución trazadora, que contiene una sustancia química ligeramente radiactiva. El escáner PET toma imágenes a medida que esta solución se desplaza por el cuerpo. Cualquier zona de cáncer absorbe el trazador y se "ilumina" en las imágenes del escáner.
-
Prueba de ADN del VPH: Las células cervicales pueden ser analizadas para detectar la presencia de ADN del virus del papiloma humano (VPH). Esta prueba puede identificar si están presentes los tipos de VPH que pueden causar cáncer de cuello uterino.
Tratamientos del cuello uterino
-
Cerclaje cervical: En las mujeres con incompetencia cervical, se puede coser el cuello del útero. Esto puede evitar la apertura temprana del cuello uterino durante el embarazo, lo que puede provocar un parto prematuro.
-
Antibióticos: Medicamentos que pueden eliminar las bacterias que causan las infecciones del cuello uterino y los órganos reproductores. Los antibióticos pueden tomarse por vía oral o administrarse a través de una vena, o por vía intravenosa, para las infecciones graves.
-
Crioterapia: Se coloca una sonda extremadamente fría contra las zonas anormales del cuello uterino. La congelación mata las células anormales, evitando que se conviertan en cáncer de cuello uterino.
-
Terapia con láser: Se utiliza un láser de alta energía para quemar áreas de células anormales en el cuello uterino. Las células anormales se destruyen, evitando que se conviertan en cáncer de cuello uterino.
-
Vacuna contra el cáncer de cuello de útero: Para prevenir el cáncer de cuello uterino, se recomienda una vacuna contra ciertas cepas del virus del papiloma humano (VPH) para la mayoría de las adolescentes y mujeres jóvenes.
-
Quimioterapia: Medicamentos contra el cáncer que suelen inyectarse en una vena. La quimioterapia suele administrarse para el cáncer de cuello de útero que se cree que se ha extendido.
-
Histerectomía total: Extirpación quirúrgica del útero y el cuello uterino. Si el cáncer de cuello uterino no se ha extendido, la histerectomía puede ofrecer una cura completa.
-
Biopsia de cono: Una biopsia cervical que extrae una cuña de tejido en forma de cono del cuello uterino. Como se extrae una gran parte del cuello uterino, la biopsia de cono puede ayudar a prevenir o tratar el cáncer de cuello uterino.
-
Procedimiento de escisión electroquirúrgica con asa (LEEP): Se toca un bucle de alambre electrificado contra las células anormales del cuello uterino. La corriente eléctrica destruye las células, previniendo o tratando el cáncer de cuello uterino.
-
Radioterapia: Utilización de energía radiactiva para eliminar las células cancerosas del cuello uterino. La radioterapia se administra en forma de haz desde el exterior del cuerpo o en pequeños gránulos implantados en el cuello uterino, lo que se conoce como braquiterapia.
