De los archivos del médico
Imagina vivir sin enfermedades que te frenen. Aunque no hay garantías de por vida, se han realizado suficientes investigaciones científicas para que una vida larga y saludable sea una posibilidad.
Para ayudar a las mujeres a potenciar su salud, la doctora examinó cinco condiciones médicas que les preocupan mucho: enfermedades del corazón, cáncer de mama, osteoporosis, depresión y enfermedades autoinmunes.
Examinamos los factores de riesgo de cada enfermedad y preguntamos a los expertos qué pueden hacer las mujeres para prevenir esas dolencias.
Para aprovechar al máximo esta información, la doctora Saralyn Mark anima a las mujeres a hacerse cargo de su salud. Dice que las mujeres deben trabajar en colaboración con sus médicos averiguando su historial médico familiar, informándose sobre cuestiones de salud y prestando atención a su cuerpo.
"Sabes lo que te hace sentir bien, sabes cuando no te sientes bien. Entender tu cuerpo es la clave", dice Mark, asesor médico principal de la Oficina de Salud de la Mujer del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.
Enfermedades del corazón
Las enfermedades del corazón son la principal causa de muerte tanto en hombres como en mujeres. En las mujeres, esta afección es responsable de cerca del 29% de las muertes, informa el CDC.
Sin embargo, la muerte en sí misma no es el mayor problema para las mujeres con enfermedades cardíacas. El verdadero problema es la muerte prematura y la discapacidad, dice Cindy Pearson, directora ejecutiva de la Red Nacional de Salud de la Mujer.
"Hay demasiadas mujeres que mueren de enfermedades del corazón a los 60 años, cuando nadie espera morir porque eso es demasiado joven en este país", dice Pearson. "Hay (también) mujeres que, durante muchos años, están realmente enfermas de cardiopatía: se quedan sin aliento, no son capaces de subir un tramo de escaleras porque la cardiopatía merma su capacidad de desplazamiento".
Aunque mueren más hombres que mujeres de enfermedades del corazón, las mujeres tienden a estar infradiagnosticadas, a menudo hasta el punto de que es demasiado tarde para ayudarlas una vez descubierta la enfermedad.
"Los síntomas de las mujeres son los típicos de las mujeres, y a menudo los médicos y las propias pacientes los pasan por alto", explica Mark. "A menudo pensamos en síntomas como el dolor de pecho. Algunas personas pueden tenerlo, pero otras pueden tener sólo un poco de dolor de mandíbula, dolor de hombros, náuseas, vómitos o falta de aliento."
La Asociación Americana del Corazón enumera los factores de riesgo de las enfermedades cardíacas como:
-
Aumento de la edad
-
Sexo masculino (los hombres suelen desarrollar enfermedades del corazón a una edad más temprana)
-
Herencia (incluida la raza). Las personas con antecedentes familiares de la enfermedad tienen mayor riesgo. También los afroamericanos, los mexicano-americanos, los nativos americanos, los nativos hawaianos y algunos asiático-americanos.
-
Fumar
-
Colesterol alto en sangre
-
Presión arterial alta
-
Inactividad física
-
Obesidad y sobrepeso
-
Diabetes
"La carga de las enfermedades cardíacas en las mujeres es muy grande", afirma el doctor Gregory Burke, profesor y presidente del departamento de ciencias de la salud pública de la Facultad de Medicina de la Universidad Wake Forest. "Cuanto antes se adapte la gente a comportamientos más saludables, menor será su riesgo general de padecer enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares".
Burke dice que las personas pueden reducir su riesgo de enfermedad cardíaca modificando su estilo de vida para incluir una dieta bien equilibrada y ejercicio.
Cáncer de mama
El cáncer de mama es el más frecuente en las mujeres. Es el segundo, después del cáncer de pulmón, como principal causa de muerte en las mujeres.
Los expertos afirman que el miedo al cáncer de mama puede ser a veces exagerado, impidiendo que las mujeres acudan a sus médicos para someterse a pruebas de detección, o empujando a las mujeres a tomar decisiones precipitadas sobre la mastectomía, cuando puede no ser necesaria.
"Hay muchos tratamientos para el cáncer de mama", asegura la doctora Diane Helentjaris, ex presidenta inmediata de la Asociación Americana de Mujeres Médicas. "No es una sentencia de muerte".
Insta a las mujeres a mantener sus emociones en perspectiva y a informarse sobre los problemas.
La Sociedad Americana del Cáncer enumera los siguientes factores de riesgo para el cáncer de mama:
-
Aumento de la edad
-
Genes. Entre el 5% y el 10% de los cánceres de mama están relacionados con mutaciones en determinados genes (los más comunes son los genes BRCA1 y BRCA2).
-
Antecedentes familiares de la enfermedad
-
Antecedentes personales de la enfermedad
-
Raza. Las mujeres blancas tienen un riesgo ligeramente mayor de padecer cáncer de mama en comparación con las afroamericanas. Sin embargo, las afroamericanas tienen más posibilidades de morir por esta enfermedad.
-
Una biopsia de mama anormal más temprana.
-
Radiación torácica más temprana
-
Inicio temprano de la menstruación (antes de los 12 años) o menopausia después de los 55 años
-
No tener hijos
-
Uso de medicamentos, como el dietilestilbestrol (DES)
-
Demasiado alcohol
-
Obesidad
El doctor Stephen F. Sener, presidente de la Sociedad Americana del Cáncer, recomienda controlar el peso, hacer ejercicio, dejar de fumar y hablar con el médico sobre el riesgo y las pruebas de detección adecuadas para el cáncer de mama. También dice que hay que mantener los factores de riesgo en perspectiva.
"Sólo porque tu madre no haya tenido cáncer de mama, no significa que seas inmune a este problema", dice Sener. Al mismo tiempo, también es importante tener en cuenta que algunas mujeres que tienen uno o más factores de riesgo nunca padecen cáncer de mama.
Osteoporosis
La espalda encorvada, el dolor de espalda y la fragilidad solían ser cosas que las mujeres mayores tenían que aceptar antes de que los médicos supieran algo más sobre la osteoporosis. Ahora, hay medidas que las mujeres y las niñas pueden tomar para evitar esos problemas.
La osteoporosis amenaza a 44 millones de estadounidenses, de los cuales el 68% son mujeres, informa la Fundación Nacional de Osteoporosis.
"La osteoporosis se puede prevenir en gran medida", dice Mark. "Los comportamientos que las mujeres desarrollan en su infancia, en su adolescencia y en los primeros años de su vida adulta realmente juegan un papel importante en el desarrollo de la enfermedad".
Esto se debe a que los cuerpos acumulan la mayor parte de la masa ósea hasta los 30 años. A partir de ese momento, se deja de formar hueso nuevo y la atención se centra en el mantenimiento del hueso viejo.
Nunca es demasiado tarde para mantener los huesos fuertes y evitar las fracturas.
"El cuerpo hará lo que pueda para reparar el daño óseo, pero hay que proporcionarle las herramientas necesarias, como el consumo adecuado de calcio y la actividad física con peso", dice Mark.
Los factores de riesgo de la osteoporosis son:
-
Sexo femenino
-
Aumento de la edad
-
Armazón pequeño y de huesos finos
-
Origen étnico. Las mujeres blancas y asiáticas tienen el mayor riesgo.
-
Antecedentes familiares
-
Hormonas sexuales. Los ciclos menstruales poco frecuentes y la pérdida de estrógenos por la menopausia pueden aumentar el riesgo.
-
Anorexia
-
Dieta baja en calcio y vitamina D
-
Uso de medicamentos, especialmente glucocorticoides o algunos anticonvulsivos
-
Estilo de vida sedentario
-
Fumar
-
Exceso de alcohol
Hable con su médico sobre su posible riesgo de padecer osteoporosis y sobre lo que puede hacer para prevenir problemas.
Depresión
La depresión parece afectar más a las mujeres que a los hombres. El Instituto Nacional de Salud Mental informa de que unos 12 millones de mujeres se ven afectadas por un trastorno depresivo cada año, frente a unos 6 millones de hombres.
La doctora Dorree Lynn, psicóloga y autora de Getting Sane Without Going Crazy, dice que las mujeres necesitan una conexión con otras personas en sus vidas.
"Necesitan ese sustento", dice Lynn. "Si no lo tienen, tienden a deprimirse".
A veces, los cambios hormonales también pueden desencadenar la enfermedad, sobre todo después del embarazo (posparto) o en torno a la menopausia.
Otros factores de riesgo de la depresión son:
-
Un episodio depresivo anterior
-
Antecedentes familiares de depresión
-
Antecedentes de problemas cardíacos
-
Enfermedad crónica grave
-
Problemas matrimoniales
-
Abuso de sustancias
-
Uso de fármacos que podrían desencadenar la depresión, como los medicamentos para la hipertensión o las convulsiones
-
Un acontecimiento vital estresante, como la pérdida del trabajo o la muerte
-
Enfermedades que podrían desencadenar la depresión, como la deficiencia de vitaminas y la enfermedad de la tiroides
-
Enfermedad grave o cirugía reciente
-
Antecedentes de abuso físico o sexual en la infancia
-
Ser una persona preocupada o excesivamente ansiosa
-
Tener un trastorno alimentario o un trastorno de ansiedad
Para ayudar a reducir el riesgo de depresión, Lynn recomienda encontrar una razón para levantarse por la mañana. Ella dice que cosas como el trabajo, la comunidad, el amor, las mascotas y el voluntariado pueden ser buenas razones.
"Estadísticamente, los adultos más sanos, tanto en las mujeres como en los hombres, son personas que mantienen relaciones afectivas significativas", dice Lynn. Ella dice que los adultos que no tienen relaciones afectivas pueden reducir su riesgo de depresión haciendo esfuerzos para llegar a la comunidad.
Enfermedades autoinmunes
Las enfermedades autoinmunes son un grupo de trastornos en los que el sistema inmunitario ataca al organismo y destruye o altera los tejidos. Hay más de 80 enfermedades crónicas graves en esta categoría, como el lupus, la esclerosis múltiple y la diabetes de tipo 1.
Según la Asociación Americana de Enfermedades Relacionadas con la Autoinmunidad (AARDA), alrededor del 75% de las enfermedades autoinmunes se dan en mujeres. Por sí solas, cada enfermedad parece ser poco común -excepto la diabetes, la enfermedad tiroidea y el lupus-, pero como grupo, los trastornos constituyen la cuarta causa de discapacidad entre las mujeres estadounidenses.
No se sabe qué es lo que hace que el cuerpo se vuelva contra sí mismo, pero se sospecha que hay factores genéticos, hormonales y ambientales.
"Es un área muy importante en la que hay que investigar", dice Helentjaris.
Dado que las enfermedades autoinmunes no se conocen muy bien, es difícil determinar los factores de riesgo específicos. Los síntomas también pueden ser inespecíficos, lo que dificulta el diagnóstico adecuado. Sin embargo, si sabe que algo va mal en usted o en un ser querido, es importante que se convierta en un defensor activo de la salud.
"Es muy común que las mujeres realicen varias visitas a varios médicos para obtener finalmente un diagnóstico", dice. "Insiste en que alguien se tome en serio tus síntomas".
Si no sientes que tu médico se toma en serio tus quejas, Pearson aconseja buscar otro médico que se tome el tiempo de investigar tus síntomas.
