¿Intenta adelgazar? Tanto si tienes unos pocos kilos que perder como si necesitas bajar más por tu salud, estos consejos te mantendrán en el camino del éxito.
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Corta las verduras y la fruta y guárdalas en la parte delantera de la nevera para tomar un tentempié inteligente.
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Escribe tus razones para querer perder peso. Colócalas donde las veas todos los días.
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Utiliza un diario de alimentos o una app para controlar y gestionar lo que comes.
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¡Sigue moviéndote! Estar sentado en casa viendo la televisión puede ser un desencadenante para comer cuando no tienes hambre.
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Deja el tenedor entre bocado y bocado. Piensa en lo que estás comiendo.
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Come sólo cuando tengas mucha hambre. Si estás aburrido o estresado, sal a caminar o manda un mensaje a un amigo.
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Trabaja hasta llegar a los 30 minutos de ejercicio la mayoría de los días.
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Sirve tus comidas en platos más pequeños. Es probable que comas menos.
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No comas los bocadillos de la bolsa o la caja. Pon una sola ración en un bol.
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Bebe agua en lugar de bebidas azucaradas y con muchas calorías.
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¿Comiendo fuera? Guarda en cajas la mitad de la comida en cuanto la recibas.
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Usa un podómetro para motivarte a caminar más.
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Desayuna todos los días. Así no tendrás demasiada hambre y comerás de más a lo largo del día.
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Prepara un almuerzo saludable para el trabajo o la escuela que te ayude a evitar la tentación.
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Pésate a diario para hacer un seguimiento de tu pérdida de peso. ¡Celebra tus progresos!
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Planifica las comidas con antelación, así sabrás que serán saludables.
