De los archivos del médico
Has oído el viejo dicho de desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un pobre? Este antiguo consejo se basa en pruebas científicas que recomiendan consumir la mayor parte de las calorías durante el día, cuando se es más activo. Desgraciadamente, la mayoría de nosotros hacemos la comida más copiosa en la cena, cuando somos menos activos, comemos un almuerzo considerable y nos saltamos el desayuno para ahorrar calorías.
Romper el ayuno
Tras una buena noche de descanso, el nivel de azúcar o glucosa en sangre es bajo. Saltarse el desayuno permite que el cuerpo se mantenga en el estado de hibernación, que quema sólo un mínimo de calorías.
Aunque no lo creas, en realidad puedes perder peso desayunando porque los alimentos que tienes en el estómago potencian tu metabolismo.
Es cierto, tu cuerpo necesita acelerar su metabolismo, y la única manera de hacerlo es con una comida nutritiva. Arranca ese motor con un desayuno saludable y ayudarás a mantener estables los niveles de azúcar y hormonas en la sangre mientras tu metabolismo zumba a un nivel más alto, quemando más calorías.
Consejos basados en la ciencia
No soy de los que desayunan, como tampoco lo son el 95% de los individuos con sobrepeso. Pero la ciencia sugiere que nos beneficiaríamos si adoptáramos los hábitos de las personas que desayunan y que han demostrado ser más eficaces en el control de su peso.
-
El Registro Nacional de Control de Peso, un centro que hace un seguimiento de las personas que han perdido 30 libras y las han mantenido durante un año, descubrió que la mayoría de los perdedores exitosos comienzan el día con el desayuno.
-
Un estudio reciente de la Universidad de Vanderbilt descubrió que las mujeres que desayunaban eran más capaces de cumplir con sus dietas y perdían más peso que las que se saltaban el desayuno y hacían trampas en sus dietas.
Detener esos antojos
La ventaja de un desayuno saludable es que puede estabilizar las hormonas y los niveles de azúcar en sangre para evitar posibles atracones y excesos durante el día. Puede darte el poder de pasar de esos donuts en la sala de descanso.
¡Tú puedes hacerlo!
¡No desayunar es sólo un mal hábito que hay que romper! Empieza de forma sencilla, prueba con una pequeña comida o un sustituto de comida, y luego experimenta gradualmente con una variedad de alimentos que te atraigan. Es importante que la comida contenga carbohidratos complejos, proteínas y un poco de grasa para que te mantenga satisfecho hasta el almuerzo.
Ejemplos de comidas
-
Tazón de cereales integrales de salvado, leche desnatada y plátano en rodajas
-
Un huevo, una tostada de pan integral y un vaso o zumo de naranja
-
Dos tortitas, arándanos y café con leche
-
1/2 bagel con mantequilla de cacahuete o de almendras y vaso de zumo de pomelo
-
Panecillo pequeño de salvado con pasas y vaso de leche desnatada
-
Yogur bajo en grasa y un bol pequeño de granola baja en grasa
Controlar tu peso con menos frecuencia puede significar que te levantes una mañana y descubras que has subido 5 kilos. Eso puede ser bastante desalentador, y podría hacer que simplemente te rindas.
Recuerda
El desayuno no tiene por qué llevar mucho tiempo. Puedes ahorrar tiempo si preparas todo lo que necesitas la noche anterior. Todo lo que necesitas son 10 minutos extra, y si eso es todo lo que te ayuda a estar más delgado y saludable, ¿no vale la pena?
Sé creativo: el desayuno puede ser las sobras de la noche anterior o un batido de frutas. ¡Simplemente hazlo!