Si alguna vez has hecho un viaje largo por carretera, sabes lo que se siente cuando te entran ganas de hacer pis y la siguiente salida está a kilómetros de distancia.
Pero cuando se padece vejiga hiperactiva (VH), una afección en la que de repente se necesita orinar, a menudo ocho o más veces al día, la urgencia es aún mayor. Viajar puede ser más difícil con la VHA, pero no es imposible. Esto es lo que debes saber para disfrutar de tu viaje.
Haz un plan
Sigue estos consejos cuando viajes con OAB:
Reserva un asiento de pasillo. Si viaja en avión, intente reservar un asiento de pasillo cerca del baño. De este modo, tendrá fácil acceso a cualquier necesidad repentina.
Lleva protección adicional. Ponte una almohadilla absorbente que pueda retener más líquido en tus días de viaje. Prueba uno hecho para usar durante la noche.
Busca el baño más cercano. Busca los baños a lo largo de tu ruta y en tu última parada. Las aplicaciones de localización de baños pueden ayudar. Muestran los baños públicos más cercanos en todo el mundo, y muchas de estas aplicaciones son gratuitas. Si viajas al extranjero, quizá quieras repasar algunas frases relacionadas con el baño en otros idiomas.
Cronometra tus pausas para ir al baño. Intenta parar para ir al baño cada 2 ó 3 horas. Puede ser una molestia, especialmente en los viajes largos por carretera, pero te ayudará a evitar accidentes.
Lleve provisiones adicionales. Lleva un kit de emergencia. Si vas a hacer un viaje largo, piensa en enviar provisiones a tu destino con antelación. Estará preparado y no tendrá que hacer tantas maletas. Su kit debe incluir:
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Ropa interior
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Pantalones
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Almohadillas absorbentes
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Crema de barrera
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Desinfectante de manos
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Papel higiénico
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Catéteres
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Medicamentos para la OAB (si toma alguno)
Limitar ciertos líquidos y alimentos
Puede que tengas la tentación de probar algo nuevo en tu viaje, pero podría acabar irritando tu vejiga. Evita estos alimentos y bebidas, o al menos redúcelos:
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Cafeína
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Té
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Alcohol
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Bebidas con gas
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Zumos o frutas cítricas
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Chocolate
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Alimentos picantes
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Tomates
Hable con su médico sobre la cantidad de líquido que debe beber cada día. Demasiado puede empeorar tus síntomas, pero muy poco puede irritar el revestimiento de tu vejiga y hacer que sientas que necesitas ir. Una forma rápida de saberlo: si tu orina es de color claro o transparente, probablemente estés bebiendo suficientes líquidos.
Prueba el entrenamiento de la vejiga
Cuando orinas antes de que la vejiga esté llena, sientes la necesidad de ir más a menudo. La idea del entrenamiento de la vejiga es enseñar a tu vejiga a vaciarse según un horario. Con el tiempo, será capaz de aguantar más. Considera la posibilidad de practicar esta técnica en las semanas previas a tu viaje. Así es como funciona:
Lleva un registro. Anota las veces que orinas o tienes una pérdida de orina, incluyendo el tiempo que transcurre entre las idas al baño. Hazlo durante un par de días.
Espacia los descansos para ir al baño. Calcula el tiempo medio entre las idas al baño y añade 15 minutos. Así, si normalmente orinas cada 2 horas, empieza a esperar 2 horas y 15 minutos.
Añade más tiempo. Cuando tu vejiga se acostumbre al nuevo horario, añade otros 15 minutos. En el futuro, podrá esperar más tiempo y tendrá menos ganas de ir al baño.
Tenga paciencia. El entrenamiento de la vejiga puede llevar semanas o meses. Cuando sientas la necesidad de ir al baño antes de tiempo, intenta recordar que no está llena. Si sientes que tu vejiga está vacía cuando debes orinar, ve al baño de todos modos.