Puede que no podamos controlar el estrés, pero sí podemos gestionarlo. He aquí algunos consejos para controlar el estrés que pueden ayudarle a sentirse mejor -y menos estresado- cada día:
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Acepta que hay acontecimientos que no puedes controlar.
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Mantén una actitud positiva; en lugar de recurrir por defecto a lo negativo (''Nada me sale bien'' o ''Siempre me pasan cosas malas''), date mensajes positivos (''Hago lo que puedo'' o ''Pediré ayuda'').
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Frena el estrés en seco; si te sientes agobiado, date un paseo o conduce por el carril lento para evitar enfadarte con otros conductores.
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Gestiona tu tiempo. Date tiempo para hacer las cosas; pon tu reloj para tener más tiempo para preparar un evento.
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Haz cosas que te resulten placenteras, como la lectura o la jardinería.
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Tómate entre 15 y 20 minutos cada día para sentarte en silencio y reflexionar. Aprende y practica técnicas de relajación como el yoga o la respiración profunda.
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Haz ejercicio con regularidad montando en bicicleta, caminando, haciendo senderismo, corriendo o haciendo ejercicio en el gimnasio. Tu cuerpo puede combatir mejor el estrés cuando está en forma.
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Evita el alcohol y las drogas recreativas. Y no fumes.
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Come de forma sana y equilibrada.
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Descansa y duerme lo suficiente. Tu cuerpo necesita tiempo para recuperarse de los acontecimientos estresantes.
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Busca apoyo social.
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Busque un terapeuta o psiquiatra si las cosas se vuelven demasiado abrumadoras.