Durante el sueño profundo, prestas menos atención al mundo exterior. Pero aunque estés apagado como una luz, algunas partes de tu cuerpo trabajan duro. Tu respiración y tu ritmo cardíaco disminuyen, pero tu capacidad para combatir los gérmenes y formar recuerdos aumenta.
Los expertos aún no saben para qué sirve el sueño profundo. Pero saben que todo el mundo lo necesita. La falta de sueño reparador aumenta las posibilidades de sufrir infecciones, problemas de pensamiento y memoria, y otros problemas de salud.
El sueño profundo y tu cuerpo
Tienes dos tipos de sueño: el de movimientos oculares rápidos (REM) y el de movimientos oculares no rápidos (NREM). El sueño más profundo se produce en la fase 3 de NREM. También se llama N3 o sueño de ondas lentas (SWS). La mayor parte de este sueño se produce en la primera mitad de la noche.
Los procesos corporales cambian según la fase del sueño en la que te encuentres. Esto es lo que ocurre durante el sueño de ondas lentas:
Temperatura. El cerebro y el cuerpo se enfrían. El cerebro y el cuerpo se enfrían, producen y retienen menos calor. Una de las teorías es que esto ayuda a conservar y restaurar la energía. También es una señal del reloj interno del cuerpo, o ritmo circadiano, de que es hora de dormir.
La presión arterial y el ritmo cardíaco. El sistema nervioso parasimpático entra en acción. A veces se le llama red de descanso y digestión. El ritmo cardíaco disminuye y la respiración es más lenta y constante. La presión arterial también disminuye. Es normal ver un descenso del 10% al 20%.
Huesos y músculos. Su glándula pituitaria envía la hormona del crecimiento humano. Esto ayuda al cuerpo a reparar los músculos y otros tejidos. Si eres un niño, el sueño profundo enviará la hormona del crecimiento para ayudar a tus huesos a crecer.
Metabolismo. Se gasta menos energía. Los expertos creen que es para que tu cuerpo tenga la oportunidad de recuperarse del día. El sueño profundo parece ser importante para la regulación de la glucosa en los adultos. Los estudios demuestran que su falta puede reducir la sensibilidad a la insulina. Eso significa que no podrás utilizar la glucosa, o el azúcar, tan bien. Es posible que comas más porque tienes más hambre.
Niveles de energía. Con un sueño de calidad, deberías sentirte menos cansado al despertarte. Los niveles de trifosfato de adenosina (ATP) aumentan durante el sueño profundo. El ATP es una fuente de energía para las células. Algunos expertos creen que este aumento es lo que restablece la energía. Pero necesitamos más investigaciones para saberlo con seguridad.
El sueño profundo y tu sistema inmunológico
Normalmente te cansas cuando estás enfermo (y es más probable que enfermes si no duermes lo suficiente). Los expertos creen que esto se debe a que el sueño pone en marcha el sistema inmunitario. Las investigaciones demuestran que se duerme más profundamente cuando se tiene una infección. Si descansas, puedes mejorar más rápido.
Pero el sueño profundo no sólo te ayuda cuando estás enfermo. Puede:
-
Fortalecer su sistema inmunológico diariamente
-
Disminuir las sustancias químicas que causan la inflamación
-
Ayudar a que las vacunas actúen en el organismo
El sueño profundo y tu cerebro
Tus ondas cerebrales cambian durante este ciclo de sueño. Se vuelven más lentas, más largas y siguen un patrón. Se llaman ondas delta. Son una parte importante de la forma en que se aprende y se almacenan los recuerdos.
También hay menos flujo de sangre al cerebro. Esto parece un poco preocupante, pero no es algo malo. Deja espacio para que entre y salga más líquido cefalorraquídeo (LCR). Es el líquido que rodea el cerebro y la médula espinal. En comparación con cuando estás despierto, el LCR ayuda a eliminar más residuos que pueden dañar tus células. El sueño profundo también elimina el beta-amiloide, una proteína relacionada con la enfermedad de Alzheimer.
También es necesario investigar más para saber exactamente cómo actúan conjuntamente el LCR y el sueño profundo.
Riesgos de un sueño profundo insuficiente
En general, un sueño de mala calidad puede pasar factura a tu bienestar mental y físico. Está vinculado a problemas de salud como los trastornos del estado de ánimo, las migrañas, las enfermedades cardíacas y la obesidad.
La pérdida de sueño profundo aumenta las posibilidades de:
-
Demencia y enfermedad de Alzheimer
-
Hipertensión arterial
-
Ataque cardíaco y accidente cerebrovascular ?
-
Diabetes tipo 2
Cómo conseguir un sueño más profundo
Estos son algunos hábitos saludables que pueden ayudarte a tener un sueño más profundo:
-
Date el tiempo suficiente para dormir.
-
Levántate a la misma hora todos los días.
-
Evita la cafeína.
-
Evite el alcohol antes de acostarse.
-
Haga ejercicio regularmente, pero no justo antes de acostarse.
-
Dale una oportunidad a la meditación.
-
Date un baño caliente al menos una hora antes de acostarte.
Habla con tu médico si sigues sin poder dormir bien. Hay tratamientos que pueden ayudar.