Limita los alimentos picantes y la cafeína
1/11
Las bebidas con cafeína, como el café y los refrescos de cola, y los alimentos picantes, como el curry o los pimientos picantes, pueden provocar sudoración, especialmente en la cara y la cabeza. También lo puede hacer el alcohol. Lleva un diario de comidas y bebidas para ayudarte a identificar qué alimentos o bebidas te hacen sudar mucho. Además, utiliza hierbas más suaves en lugar de especias fuertes para dar sabor a la comida.
Báñese con cuidado
2/11
Báñese o dúchese diariamente, utilizando un limpiador suave. Puede sentir la necesidad de ducharse más de una vez al día. Si le molesta el olor, intente utilizar un jabón antibacteriano para reducir las bacterias en la piel. Cuando las bacterias se mezclan con el sudor, provocan el olor. Asegúrate de secarte completamente, ya que las bacterias y los gérmenes prosperan en la humedad.
Controla los sofocos y los sudores nocturnos
3/11
Si la menopausia provoca sofocos o sudores nocturnos, existen muchos remedios. Aplique una toallita fría y húmeda sobre la piel o beba agua helada para aliviarse. Los medicamentos recetados y la terapia hormonal también pueden aliviar los sofocos. Muchas mujeres prueban terapias alternativas (soja, cohosh negro, raíz de dong quai, ginseng, kava, trébol rojo o DHEA), pero no hay pruebas concluyentes de que funcionen. Hable con su médico para decidir qué es lo mejor para usted.
Elige la ropa adecuada
4/11
La ropa holgada y los tejidos naturales como el algodón permiten que el aire circule alrededor de la piel, lo que retrasa la acumulación de humedad. Cuando hagas ejercicio, utiliza tejidos que absorban la humedad y la alejen de la piel. Ten a mano una camisa o chaqueta adicional por si la sudoración es excesiva. Las prendas estampadas, negras o blancas ocultan especialmente bien las manchas de sudor.
Reducir el estrés
5/11
Es un círculo vicioso. El estrés puede causar sudoración, y la sudoración excesiva puede causar estrés. Las técnicas de relajación como el yoga, la meditación, la respiración profunda y la biorretroalimentación pueden ayudar a controlar los factores desencadenantes y a disminuir los efectos de la sudoración. Apúntate a una clase de yoga, coge un CD de imágenes guiadas o simplemente reserva un poco de tiempo cada día para meditar...
Encuentra el antitranspirante adecuado
6/11
Los antitranspirantes a base de aluminio actúan bloqueando los conductos de las glándulas sudoríparas. Para los síntomas leves, hay productos disponibles en las tiendas. Aplique una fina capa de antitranspirante sobre la piel seca con una toalla antes de acostarse. Los ingredientes activos pueden empezar a actuar mientras duermes. A continuación, vuelva a aplicarlo por la mañana. Los desodorantes reducen el olor, pero no afectan a la humedad. En caso de síntomas graves, el médico puede recomendar un antitranspirante de prescripción.
Cuidado de los pies
7/11
Si el sudor de los pies es un problema, evita las medias. Usa calcetines de algodón o de materiales que absorban la humedad de la piel, y cámbiate de calcetines con frecuencia. Asegúrate de que los zapatos están completamente secos antes de volver a usarlos. Esto puede significar no usar los mismos zapatos dos días seguidos. Las plantillas absorbentes también pueden ser útiles. Despiértese siempre que sea posible. Los antitranspirantes no son sólo para las axilas. También puedes usarlos en los pies y las manos.
Mantén la calma
8/11
Las temperaturas más bajas en casa y en el trabajo pueden ayudar a reducir la sudoración. Pon en marcha un ventilador o un aire acondicionado. O abre las ventanas para que el aire circule. Beba mucha agua fría y tome duchas o baños frescos. Vístase con ropa en capas para poder quitarse o añadirse capas según cambie la temperatura. En verano, manténgase alejado del sol y realice actividades extenuantes por la mañana.
Mantente sano
9/11
La obesidad, el tabaquismo y el consumo de alcohol pueden provocar o intensificar la sudoración intensa. Así que mantén un peso saludable, di no a los cigarrillos y limita el consumo excesivo de alcohol. No sólo reducirás la sudoración, sino que también te sentirás mejor y reducirás el riesgo de muchas enfermedades.
Protege la piel y la ropa
10/11
Los pliegues de la piel húmeda son propensos a la dermatitis irritante y a la infección. Utilice forros para las axilas -pequeñas almohadillas que se adhieren a la ropa- para absorber el sudor y proteger la ropa. Cámbiate de ropa a diario. Lávela regularmente. Y asegúrese de secar bien la ropa antes de usarla.
Acude al médico
11/11
Si la sudoración excesiva le causa problemas en su vida, hable con un médico sobre los tratamientos. Las inyecciones de bótox, las corrientes eléctricas de bajo nivel y algunos medicamentos pueden ayudar a reducir la sudoración excesiva. Llame al médico de inmediato si también tiene fiebre, pérdida de peso, dolor en el pecho o latidos rápidos del corazón. La sudoración acompañada de cualquiera de estos síntomas puede ser un signo de un problema de salud grave como una enfermedad de la tiroides, tumores, infección o enfermedad cardíaca.