Es probable que alguna vez haya creído algo que ha resultado ser falso. Pero si padece una rara enfermedad mental llamada trastorno delirante, ninguna cantidad de hechos y razones puede hacer tambalear su pensamiento. Las personas con delirios no pueden distinguir qué creencias son reales y cuáles son imaginarias.
Hay varios tipos de delirios. El más común es el delirio de persecución. Es cuando está convencido de que alguien le maltrata, conspira contra usted o sus seres queridos o planea hacerles daño. Otro tipo son los delirios de grandeza, en los que tienes una idea irreal de ti mismo o de tus logros.
Síntomas
Alguien con delirios persecutorios puede parecer normal. Pero si sus delirios son lo suficientemente graves, pueden llegar a obsesionarse hasta el punto de perturbar su vida cotidiana.
A veces, su falsa creencia puede ser algo improbable pero no imposible. Por ejemplo, pueden sospechar que sus vecinos les espían o temer que la policía quiera torturarles. Otras veces, sus delirios son irracionales, como creer que un espíritu maligno planea secuestrarles.
Normalmente, los delirios surgen de interpretaciones erróneas o exageraciones de sentimientos y experiencias reales. Por ejemplo, pueden percibir una mirada inocente de un desconocido como una amenaza.
A veces, esta paranoia puede ir asociada a
Alucinaciones. Se trata de ver, oír o sentir cosas que no existen. Las alucinaciones no son muy comunes en los trastornos delirantes. Si las tiene, están relacionadas con su delirio. Por ejemplo, si cree falsamente que su compañero de trabajo ha puesto comida en mal estado en su coche, puede pensar que huele algo podrido.
Cambios de humor. Es posible que se sienta molesto, deprimido e irritable. Pero estos estados de ánimo deberían durar poco y ocurrir sólo durante tu periodo de delirio.
Causas
No sabemos exactamente qué causa los delirios. Pero los expertos creen que probablemente sea genético. A veces, los delirios pueden ser un signo de otra condición, incluyendo:
-
Esquizofrenia, un tipo diferente de trastorno psicótico.
-
Enfermedad de Alzheimer
-
Demencia
-
Epilepsia
-
Trastorno obsesivo-compulsivo
-
Intoxicación por drogas
El estado de tu mente también puede influir en el desencadenamiento de los delirios de persecución. Es más probable que ocurra si usted:
-
Es propenso a preocuparse y a analizar en exceso
-
Son demasiado sensibles a las críticas o tienden a malinterpretar los comentarios o gestos de otras personas
-
Tiene baja autoestima o pensamientos negativos sobre sí mismo
-
Sentirse constantemente ansioso, temeroso o inquieto sin razón
-
Tener problemas para dormir
-
Tienden a sacar conclusiones precipitadas
Muchas personas con delirios de persecución también tienen depresión o ansiedad. También tienden a carecer de relaciones personales sólidas y suelen tener malestar físico.
Diagnóstico
Ninguna prueba puede confirmar que usted tiene un trastorno delirante. Pero su médico hará una historia mental detallada y descartará otras causas para hacer un diagnóstico.
Usted tiene este u otro tipo de trastorno delirante si cumple estos criterios:
-
Ha tenido uno o más delirios que han durado un mes o más.
-
No se le ha diagnosticado esquizofrenia.
-
Muestra un comportamiento evidentemente extraño aparte de sus delirios.
-
Si ha tenido algún episodio de manía o depresión, no ha durado más que sus periodos delirantes.
-
Tus delirios no provienen de las drogas, de otra condición médica o de otro trastorno mental.
Tratamiento
Puede ser difícil conseguir ayuda con un trastorno delirante porque puede que no te des cuenta de que algo va mal. O puede que te dé vergüenza o miedo acudir al médico. Pero el tratamiento es clave para sentirse mejor.
Fármacos antipsicóticos. Es probable que su médico le recete primero una medicación. Los estudios demuestran que los antipsicóticos como la olanzapina (Zyprexa) y la risperidona (Risperdal) pueden ayudar a la mayoría de las personas.
Terapia de conversación. Los estudios sugieren que un tipo de psicoterapia llamada terapia cognitivo-conductual puede ayudar a reducir los pensamientos delirantes. Pero se necesita más investigación para saber cuánto y por qué. Esta forma de asesoramiento le ofrece un lugar seguro para hablar de sus delirios con un experto en salud mental. El simple hecho de hablar de sus delirios persecutorios de la forma adecuada puede ayudarle a controlarlos.
Tratamiento involuntario. Si tus delirios suponen un posible daño para ti y para los demás, es posible que tengas que permanecer en un hospital o en un centro de tratamiento hasta que te estabilices. Los estados y las localidades tienen diferentes leyes sobre cuándo... y durante cuánto tiempo se le puede obligar a recibir tratamiento contra su voluntad.