Esta enfermedad también se denomina AIJ o artritis idiopática juvenil. (Idiopática significa que no se conoce la causa).
Lo mejor es trabajar con un reumatólogo pediátrico, un médico especializado en el cuidado de niños con artritis y otros problemas articulares. Si no hay ninguno en su zona, puede trabajar con el pediatra de su hijo y un reumatólogo. También pueden ayudar los fisioterapeutas, los especialistas en rehabilitación llamados fisiatras y los terapeutas ocupacionales.
El médico recomendará un plan de tratamiento para aliviar la hinchazón, mantener el movimiento completo de las articulaciones afectadas, aliviar el dolor e identificar, tratar y prevenir las complicaciones. La mayoría de los niños con ARJ necesitan medicación y fisioterapia para alcanzar estos objetivos.
Medicamentos
Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (
AINEs
)
, incluidos el ibuprofeno y el naproxeno, y otros medicamentos con receta, suelen ser el primer tipo de medicación que se utiliza. La mayoría de los médicos no tratan a los niños con aspirina porque podría causar problemas de hemorragia, malestar estomacal, problemas hepáticos o síndrome de Reye. Pero para algunos niños, la aspirina en la dosis correcta, medida mediante análisis de sangre, puede controlar los síntomas de la ARJ con pocos efectos secundarios graves.
Medicamentos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (DMARD)
suelen utilizarse si los AINE no proporcionan suficiente alivio. Los DMARD pueden evitar que la ARJ empeore. Pero como tardan semanas o meses en aliviar los síntomas, suelen tomarse junto con un AINE. El metotrexato suele ser el principal FAME que recetan los médicos para la ARJ.
Corticosteroides
, como la prednisona, pueden ayudar a los niños con ARJ grave. Estos medicamentos pueden ayudar a detener síntomas graves como la inflamación del revestimiento que rodea el corazón (pericarditis). Los médicos pueden administrar a los niños estos medicamentos para la ARJ directamente en la vena, en las articulaciones o por vía oral. Los corticoides pueden obstaculizar el crecimiento normal del niño y pueden causar otros efectos secundarios, como una cara redonda, aumento de peso, debilitamiento de los huesos y una mayor probabilidad de infección.
Medicamentos biológicos
, que están modificados genéticamente, pueden utilizarse en niños si otros fármacos no funcionan. Entre los inyectables se encuentran el abatacept (Orencia), el adalimumab (Humira), el canakinumab (Ilaris), el etanercept (Enbrel) y el tocilizumab (Actemra). Los biológicos suprimen el sistema inmunitario hiperactivo, dirigiéndose a las proteínas que desencadenan la inflamación.
Fisioterapia
El tratamiento de la ARJ de su hijo debe incluir fisioterapia. Ayuda a mantener sus músculos fuertes para que sus articulaciones puedan moverse lo mejor posible.
Un fisiatra o un fisioterapeuta pueden crear un programa de ejercicios para su hijo. El especialista también puede recomendar el uso de férulas y otros dispositivos para ayudar a mantener el crecimiento normal de los huesos y las articulaciones.
Medicina alternativa
Algunos enfoques alternativos o complementarios para la ARJ, como la acupuntura, pueden ayudar al niño a manejar parte del estrés que supone vivir con una enfermedad continua. Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) consideran la acupuntura un tratamiento adicional aceptable para la artritis. Los estudios demuestran que alivia el dolor, puede reducir la necesidad de analgésicos y puede aumentar la flexibilidad de las articulaciones afectadas. Pero no impide que el daño articular empeore en algunas formas de ARJ.
Informe a su médico si desea probar tratamientos alternativos. Su médico puede comprobar qué es eficaz y seguro.